La Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas, la empresa sanitaria Agua del Valle y la Junta de Vigilancia del Río Grande y Río Limarí, han sostenido reuniones permanentes con el fin de evaluar la crisis hídrica que afecta a Ovalle y toda la provincia. De esta manera, se dialogan sobre propuestas para hacer frente a esta grave situación.
En este contexto, la DGA solicitó un plan de acción a la empresa sanitaria, al cual se le realizaron algunas observaciones una vez que fue presentado.
“Con ocasión a la modificación del acuerdo de redistribución presentado por la Junta de Vigilancia de Río Grande y Río Limarí, la Dirección General de Aguas le solicitó a la sanitaria Aguas del Valle presentar un plan de acción, lo que se realizó en plazo, pero la DGA le hizo algunas observaciones, y estas observaciones tienen relación con tres puntos principales. Lo primero es la necesidad de que la sanitaria cuente con derechos de aprovechamiento de aguas que se requieran para sustentar la dotación de agua superficial necesaria en la plante Los Peñones. Lo segundo es que la sanitaria obtenga las autorizaciones de los usuarios involucrados en general, para realizar algunas obras que propone la sanitaria. Y por último, entregar mayores detalles de las obras a realizar que tienen propuestas, y obtener por cierto, las autorizaciones de las autoridades necesarias para llevarlas a cabo, que son principalmente de nuestro servicio, para llevar a cabo obras con cargo a decreto de escasez, u obras definitivas”, explicó la directora de la DGA, Cinthya Álvarez.
Al respecto, el gerente regional de Aguas del Valle, Andrés Nazer, manifiesta que “hoy la prioridad ante la grave escasez hídrica que vivimos es el consumo humano. Necesitamos reservar toda el agua embalsada para las personas y también asegurar el volumen de entrada al embalse La Paloma en la parte alta de la cuenca”.
“Hemos propuesto una serie de obras urgentes, que requieren permisos excepcionales de parte de la DGA. A inicios de la próxima semana partiremos con la ejecución de trabajos en los sectores donde ya tenemos autorización y seguiremos en contacto con todos los servicios pertinentes, para avanzar lo más rápido posible dada la criticidad que tienen estas acciones”, agregó.
BÚSQUEDA DE OTRAS ALTERNATIVAS
Por su parte, el presidente de la Junta de Vigilancia de Río Grande y Rio Limarí, José Eugenio González, comenta que se ha trabajado de buena manera con las otras dos entidades involucradas, pero de igual de forma hace un llamado a buscar alternativas paralelas, en consideración de que la sequía cada día se agrava más.
“Este jueves tuvimos reunión con DGA y Aguas del Valle, y básicamente se revisó que el plan se está cumpliendo, hay preocupación por la disponibilidad de agua, pero por el momento la DGA anunció que se estudian nuevas medidas, para no poner en riesgo el agua para consumo humano. De todas maneras la sequía está compleja, por eso nosotros insistimos en que hay que buscar otras alternativas de abastecimiento de agua, porque mientras antes empecemos, más rápido vamos a llegar a la solución”, señaló el dirigente.
Con respecto a ese último punto, González explica que “una solución que quizás no es tan inmediata, pero que tenemos que trabajar desde ahora, es lo referido a la posibilidad de trasvase de otras cuentas que son excedentarias en este momento”.
