Por Romina Onel / Combarbalá
Recientemente la Fiscalía de la Región de Coquimbo reveló que un hombre imputado por abuso sexual y violación contra dos menores de edad en Combarbalá, -entre ellas la hija del imputado-, fue encontrado culpable por el Tribunal Oral de Ovalle, culminando el juicio y anunciando que la sentencia se dará a conocer el martes 6 de junio.
La Fiscalía de Combarbalá lo acusó de abuso sexual impropio ocurrido el 20 de junio de 2013 y un delito de violación impropia ocurrido el 4 de junio de 2022, cargos que fueron probados ante el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Ovalle.
Aunque la causa de junio del 2022 estuvo temporalmente sobreseída por el Juzgado de Garantía local, tras apelación del Ministerio Público, la Corte de Apelaciones de La Serena permitió la continuidad de la investigación.
Entre otros detalles, se debe destacar que el juicio oral fue llevado a cabo por los fiscales (s), Cristián Arcos y Carol Gómez, quien destacó que “las declaraciones de ambas niñas fueron muy importantes y recalcamos que ellas fueron extremadamente valientes al volver a contar su historia. Además, prestaron declaración una extensa cantidad de testigos que daban cuenta del contexto de los hechos, así como testigos de oídas respecto de la develación de los delitos”.
“Se incorporó una vasta prueba documental, que consistió en corroborar -a través de informes- el estado emocional de las víctimas, su comportamiento, y se incorporaron las pruebas periciales sexológicas y bioquímicas; medios fotográficos del sitio del suceso, el testimonio de funcionarios policiales que dieron cuenta de los procedimientos y las diligencias llevadas a cabo para acreditar estos hechos. Igualmente se incorporó una prueba audiovisual, que si bien no daba cuenta claramente de la comisión del mismo delito, sí dio fe de las circunstancias posteriores sufridas de al menos una de las víctimas”, agregó Gómez.
En investigación
Cabe señalar que existe una tercera causa por violación contra el imputado, que es llevada por la Fiscalía local de Ovalle, la que se encuentra aún formalizada y por la cual en su momento se solicitó la prisión preventiva contra el imputado.
De acuerdo a la información recabada por El Día, dicho caso habría ingresado al sistema de la Policía de Investigaciones (PDI) en septiembre del 2022, lo que se concretó una vez que la misma niña, también de 12 años, supo del caso y alertó que a ella le había sucedido lo mismo.
En libertad
El primero de los casos data del 2013, lo que fue denunciado en 2020, aunque no hubo movimientos en la causa hasta el 2022, cuando la familia de la víctima supo de la formalización del caso que corresponde al de la hija del imputado, por el que se decretó prisión preventiva.
El hombre ingresó al penal de Illapel para cumplir esta medida, cuando fue formalizado por el delito cometido en 2013, oportunidad en la que no se fijaron cautelares, debido a que su libertad ya se encontraba restringida, pero tampoco se solicitaron ni decretaron otras medidas menos intensas.
La Fiscalía pidió la ampliación del plazo de investigación por el primer caso formalizado, pero el límite de tiempo ya había vencido y la fiscal a cargo se negó a cerrar la investigación. Con esta negativa, la abogada representante del individuo alegó por el artículo 247 del Código Penal, que establece como una falta lo realizado por la persecutora y por consiguiente, instruye a sobreseer el caso, cosa que fue dictada por los jueces, quienes decretaron la libertad para el individuo.
Proceso de reparación
La madre de una de las víctimas, conversó sobre este tema, manifestando que “estamos conformes con la decisión de la condena, pero expectantes a la pena que se dictará y se dará a conocer este martes”.
“Estamos un poco más aliviados, en el sentido de poder cerrar un ciclo que fue bastante extenso y arduo, y así poder iniciar con el proceso de reparación”, argumentó la mujer, refiriéndose a la demora en el proceso.
Cabe señalar que tanto las identidades del sujeto implicado, las menores de edad y la de sus familiares, han sido omitidas, para resguardo de las mismas.
Mejor Niñez
En cuanto al apoyo del Estado ante este tipo de casos, la directora regional del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia (NNA) de Coquimbo, Julia Sandes, explicó que “este servicio promueve la derivación oportuna a nuestros dispositivos especializados de protección, a fin de realizar un proceso diagnóstico que conlleve un plan de intervención especializada a la situación de cada NNA, orientados la interrupción de la vulneración, reparación progresiva del daño y a la promoción de contextos protectores”.
