Gary Valenzuela, edil de la comuna aprovechó de visitar los diferentes puestos uno a uno para saber de los productos exhibidos
El show fue presentado en el techado de Samo Alto y estuvieron bandas locales y grupos folclóricos durante toda la jornada.
La limpieza y orden son uno de los fuertes que más querían destacar tanto los expositores como organizadores de la feria.
Como es tradicional en esta comuna, la celebración contó con una amplia gama de ofertas, entre las que se destacan los dulces artesanales, los trabajos en madera y textiles, además de una ambientación libre de basura y plasmar un sentido ecológico a la celebración.
Turistas de todas partes convergieron en la que poco a poco se transforma en una celebración cada vez más masiva, Quintín Marín residente de Andacollo, pero ovallino de corazón y origen, encuentra que este lugar es hermoso. “Las tradiciones se han rescatado, muchas de las que se están perdiendo, este año habrá trilla a yegua suelta que en realidad se estaba perdiendo harto y son las costumbres que no hay que perder”, además pese a que no venía hace un par de años notó el crecimiento que ha tenido la festividad.
IsmeldaUrquieta deleita a los turistas con su miel, producida con sus propias manos y extraída de forma artesanal, este producto no puede faltar en cualquier mesa. “Yo lo produzco en la localidad de San Pedro en esta comuna y trato lo mejor posible de darla a conocer en esta feria”, además añadió que ya ha participado de otras versiones de la feria, pero con productos textiles, siendo esta su primera incursión en los comestibles.
El alcalde Gary Valenzuela aseguró que esta tradición seguirá a lo largo de los años, siempre impulsando a los productores locales y sirviendo de vitrina para darse a conocer y comercializar los productos típicos de este hermoso valle.
