Toneladas de ayuda es la que se ha recolectado en Ovalle para ir en ayuda de la gente que resultó damnificada por los siniestros que han destruido pueblos y se han propagado por el sur.
Uno de los centros de acopio fue el Cuerpo de Bomberos de Ovalle, por ello, algunos de sus voluntarios tuvieron la posibilidad de ir a entregar ese aporte y ver en terreno la magnitud de esta lamentable tragedia. “La verdad que el caso de Santa Olga es un estado de catástrofe. Para tener una idea, lo que se quemó es como si se quemara la población Media Hacienda completa; desde el cementerio hasta el sector de la cancha Las Américas. En Empedrado es como si se hubiera quemado la mitad del pueblo de Sotaquí”, dijo Exequiel Guerrero, voluntario del Cuerpo de Bomberos.
El día de ayer terminó la campaña en este cuartel. Guerrero explica que, “la razón es que es demasiada la ayuda que está llegando a los sectores y es muy restringido el acceso”.
Por ello, agradece a todos quienes cooperaron, particularmente con las empresas y personas que decidieron colaborar y aseguraron la bencina para que los camiones llegaran al sur. “Damos las gracias a todas las personas que colaboraron, también a la gente que donó el combustible algunos de ellos fueron; Dabed, Buses Ciktur, Luis Carvajal”.
Constanza López, miembro de “Voluntarios del Limarí” y una de las organizadoras del centro de acopio considera que la ciudad mostró toda su solidaridad durante estos días. “Al principio costó harto que viniera la gente, pero de a poco fueron llegando y trayendo hartas cosas; alimentos, medicamentos, colchones, coche para guagua, cunas, camas”.
López calcula que cada dos días han salido camiones hacia el sur y que en total fueron 30 los voluntarios que se turnaban para recibir, clasificar y cargar los camiones.
Otro de los centros de acopio que cerró de manera positiva el tema de la recolección fue el que se habilitó en la Iglesia San Vicente Ferrer. La iniciativa de apoderados del Colegio Amalia Errázuriz recolectó desde alimentos, sacos de harina, hasta zapatos de seguridad.
La ayuda fue entregada el día martes. “La idea era que fuera directamente entregada por nosotros pero los pueblos que nos asignaron eran muy al interior, por lo tanto, el camión no tenía acceso. Nos contactamos con la municipalidad de esa zona y ellos se van a hacer cargo de las entregas”, comenta Rodrigo Bugueño, profesor de religión del Colegio Amalia Errázuriz y uno de los coordinadores de esa campaña en la iglesia.
De esa forma durante los días 26, 27, 28, 29 y 30 de enero alumnos del recinto, apoderados y miembros de la Pastoral Juvenil de la Parroquia San Vicente Ferrer, ayudaron a recolectar alimentos y agua afuera de los supermercados.
Tras la recolección y clasificación, el pasado lunes se fue embalando cada una de las cajas (las que además contenían cartas esperanzadoras para los receptores de la ayuda), las que en total fueron 140. “Tenían todo lo necesario; fideos, arroz, pasta de dientes, útiles de aseo, salsa de tomate, atún”, puntualiza el docente.
Además de esa ayuda, los padres y apoderados del recinto educativo realizaron un aporte de medio millón de pesos, los cuales fueron destinados para comprar sacos de harina de 10 kilos, los que en total fueron 92. Además de lo anterior se juntaron 80 bidones de agua, palas, zapatos de seguridad, pañales y ropa.
Sobre el balance de la campaña, Bugueño expresó que “estamos gratamente sorprendidos. No estuvimos yendo a la radio o haciendo otro tipo de difusión, solamente utilizamos las redes sociales. Calculamos que recaudamos en ayuda casi 3.660.000 pesos, es un aporte que no es menor. La gente confió en nosotros y nos ayudó”. o1201