Dos familias ovallinas del sector de Villa Agrícola viven un profundo drama tras el complejo deterioro de su estructura causado por el terremoto, por ello, solicitan ayuda inmediata desde las autoridades tanto comunales como gubernamentales.Producto del temor de dormir a diario en las dañadas habitaciones, han debido reubicarse dentro de sus mismos hogares, corriendo el peligro de enfrentarse a un derrumbe.
María Michea es una de las habitantes de la población Villa Agrícola que se vio duramente afectada por la problemática. Si bien señaló que autoridades comprometieron una visita a su vivienda, aún esperan, junto a las otras adultas mayores que viven en dicha casa, ayuda concreta. “No se ha acercado nadie. He ido a la municipalidad, al Serviu, y solo me dicen que tengo que esperar, pero nada. Habían dicho que iban a venir hoy (ayer), pero hasta esta hora no han venido”.
Referente a los daños en muros y estructuras del hogar, Michea añadió que “desde el terremoto que quedó así. Acá viven cinco personas, incluso tenemos una señora de edad también, una abuelita. Tenemos miedo, no podemos dormir casi nada. Hace un rato hubo otra réplica y salimos corriendo de la casa. Nos da mucho miedo, porque hay una parte que puede ceder. Hay una habitación que fue la más dañada, se abrió completamente y si uno transita por ahí se ve todo por grietas hacia afuera”.
Ante ello efectuó un enérgico llamado para su caso de emergencia. “Lo que queremos es que nos arreglen acá. Queremos saber qué nos van a decir, si es que nos van a ayudar. En este momento estamos acá, pero yo llego sólo los días sábados, ya que trabajo afuera (…) hoy tuve que pedir permiso, porque me dijeron que vendrían hoy (ayer) pero hasta ahora no han llegado”. La ovallina afectada subrayó que “la casa de los vecinos tiene el mismo problema, la vecina tiene los mismos problemas, incluso se le salió la ventana. Atrás de nuestra casa también se hicieron unas trizaduras del muro, al lado de nuestra cocina, pero es más profundo en el segundo piso”.
Diego Gutiérrez es el vecino de la señora María, que actualmente vive la misma situación: una profunda falla estructural tiene prácticamente inutilizable parte del segundo piso de su casa, el cual corre serio riesgo de ceder en caso de ocurrir nuevas réplicas de gran magnitud. “No hemos tenido ninguna solución. Hemos ido a todos lados pero no nos dan solución. Supuestamente nos iban a dar el subsidio de arriendo, pero ahora lo cancelaron, no lo quieren dar, ni bono ni nada. Ahora estamos durmiendo todos en una pieza. Yo tengo cuatro hijas, más mi señora y yo somos 6. Del gobierno nos pasaron solo un colchón para dormir, pero ninguna solución más que eso. Ninguna media agua dijeron que no, ninguna solución”.
Gutiérrez enfatizó en que además desde la constructora a cargo de las obras de edificación de las viviendas tampoco han tenido algún acercamiento a las familias afectadas. “Las puertas quedaron muy malas después del terremoto, se soltaron, las tres de la casa. De la constructora tampoco se han acercado, esta casa tiene garantía por 6 años, pero ni se han acercado. Esperamos que se acerquen pronto, por ultimo para demoler aquí, y que nos ayuden a buscar un arriendo, porque nosotros en una sola pieza durmiendo estamos muy incómodos. Dormimos todos apretados”.