Casi una semana resta para dar el vamos a este proceso que busca ser una verdadera radiografía de la realidad local. Lo necesario para su desarrollo es la voluntad de la comunidad, sin embargo, hay ocasiones en los que podrían acontecer problemas que no favorezcan la recolección de datos. Entre ellas, la negación total a participar.
Marcela Puz, directora regional INE, explica, “el próximo miércoles tendremos este proceso de población y vivienda, por lo tanto el llamado a las personas a colaborar. Acá hay dos formas fundamentales de colaborar: la primera es inscribirse como censista voluntario, todavía hay formas para inscribirse si se quiere hacer para trabajar en ese día y cumplir con ese proceso cívico. El otro punto tiene que ver con la entrega de la información. La ley 17.374, la cual señala que el INE puede multar a aquellas personas que se nieguen a responder, en términos generales, no solamente en el Censo”.
La autoridad explica que no hay razones para no acceder a contestar las preguntas, ya que se asegura la total confidencialidad, “la misma ley protege al informante, es decir, a la persona que responde, porque el INE de ninguna manera nunca va a divulgar los datos, nunca va a publicarlos nominadamente o determinadamente, siempre serán inominados e indeterminables. Por lo tanto, el llamado es a que las personas respondan con confianza, en ningún caso el ánimo y el sentido del Censo es aplicar una multa a las personas, al contrario, aquí el llamado es a que la gente entienda cuál es la relevancia de este proceso”.
En el caso que alguien se niegue a ser receptor del cuestionario hay un protocolo que se debe seguir, “la persona puede recibir una citación para ir a un lugar específico que está indicado dependiendo de dónde viva para que acuda los días posteriores para responder las preguntas del Censo, solamente para eso, no para una multa. Insisto en este sentido el ámbito del Censo no va en el aspecto de multar a las personas, al contrario, apela por la buena voluntad, por la importancia que le pueden dar las personas a este proceso por este compromiso cívico. Ese es el sentido y así lo hemos dicho todo el tiempo, independiente de la ley orgánica”.
Otra forma de no perjudicar el proceso, es permanecer en los hogares hasta después de ser encuestados, “el incentivo de que ese día sea feriado es que precisamente las personas permanezcan en sus casas y esperen al censista, ojalá que no salgan hasta su visita. Es importante que las personas estén en sus casas, aprovechen que es un día feriado y puede ser de familia. Pensemos que este Censo es una fotografía de un país en un momento determinado”.
De esa forma se asegura que se cumpla el objetivo central de este proceso, “lo que vamos a tener finalmente como producto es información que de alguna forma u otra le sirve a todos los chilenos y a los que viven en territorio nacional”, concluye Puz.