Bomberos que auxiliaron en Santa Lucía ya están de vuelta en la ‘Perla del Limarí’

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    Parte de la localidad quedó sepultada bajo el barro.

    El pasado lunes 25 de diciembre, seis bomberos de la Séptima Compañía partieron a Santiago para luego salir en uno de los aviones Hércules de la Fuerza Aérea de Chile con rumbo a la comuna de Chaitén, específicamente a la villa Santa Lucía, que el pretérito 16 de diciembre fue sacudida con un aluvión que se enterró a la mitad de sus viviendas.

    Los coterráneos héroes corresponden a;Jorge Robles, Iván Araya, Maicol Muñoz, Jesús Urqueta, Pablo Rodríguez y Mauricio Pizarro, quienes a su vez son parte del equipo Usar de Bomberos de Chile, La Serena, unidad que está presta al llamado regional y nacional cuando ocurren tragedias de alta magnitud. 

    En conversación exclusiva con diario El Ovallino, el comandante Jorge Robles reveló la experiencia consignada en la región de Los Lagos y lo difícil que fue trabajar con la fuerza de la naturaleza en contra. 

    En primer lugar habló del ambiente que por estos días habita Santa Lucía. “Es reservado, ya que solamente está siendo ocupado por el Ejército y grupos de rescate. Las familias asisten en las mañanas, pero luego tienen que retirarse”. 

    “Para nosotros como bomberos la experiencia fue bastante enriquecedora, porque tuvimos que aplicar todo nuestro conocimiento. Además, jamás habíamos trabajado con condiciones extremas; lluvias torrenciales y sobre un barro licuado. A veces, nos enterrábamos por completo”, complementó. 

    Asimismo, sostuvo que el trabajo mancomunado fue clave para sacar la tarea adelante, al menos en su turno. “Trabajamos con otras instituciones, situación que en la historia del rescate urbano jamás se había dado. En las catástrofes bomberos siempre trabaja por su cuenta, ahora no. Formamos el Comando Unificado”. 

    Al ser consultado por el hallazgo de desaparecidos, aseguró que parte del comando local fue un activo partícipe en el encuentro de la víctima número 17, que posteriormente fue identificada como María Luisa Terucan Levicán. “Mi grupo, que estaba conformado por tres colegas de Ovalle y dos de La Serena encontró a una de las personas. Luego, nos prestó ayuda bomberos de Ñuñoa y la Parme (Patrulla de Auxilio y Rescate Militar)”. 

    Después de concretar la hazaña de auxiliar a compatriotas sumamente golpeados, los miembros de la Séptima Compañía del Cuerpo de Bomberos de Ovalle que, están en canje en el equipo Usar La Serena, regresaron a su tierra natal. 

    Y si usted se pregunta por qué no siguieron en provincia de Palena, es porque “de acuerdo al protocolo del Sistema Nacional de Operaciones se autoriza a ayudar sólo siete días, luego tenemos el relevo”, explicó Robles. 

    Por último y a modo de enseñanza, Jorge formuló que “con esta experiencia, queda en claro que estamos preparados para todo terreno y ámbito que se nos presente, porque el clima allá en realidad fue extremo y de hecho, gran parte del tiempo tuvimos que realizar trabajos militares”. 

    Cabe destacar que no es primera vez que los limarinos van en rescate de necesitados chilenos. Ya que en mayo del 2015 fueron en ayuda de los copiapinos que se vieron afectados por un caótico aluvión. Acción que se vio reflejada en Constitución, una de las tantas comunas que se vio afectada con el terremoto y posterior tsunami en febrero del 2010. 

    EL ÚLTIMO HALLAZGO 

    El miércoles 3 de enero fue encontrado el cuerpo de una nueva víctima del aluvión que destruyó el pequeño poblado. De esta manera, el número de fallecidos por el deslizamiento de tierra ascendió a 18. Restando así cuatro individuos por encontrar. 

    El fiscal jefe de Chaitén, José Vivallo, confirmó el hallazgo entre los escombros de una persona de sexo femenino.La mujer encontrada correspondió a Natividad Hernández Cisterna de 64 años, quien según el listado oficial de desaparecidos, es la única mujer adulta que faltaba por hallar. 

    SITUACIÓN ACTUAL 

    Con la mejora de las condiciones climáticas y el recambio de rescatistas, continúan las labores de búsqueda de las cuatro personas que se mantienen desaparecidas. 
    Temperaturas favorables han mejorado el escenario de desplazamiento de quienes trabajan en el lugar de la catástrofe. Se construyeron senderos con latas y sobre estas caminan los 26 rescatistas que hasta ahora trabajan en la zona 0.

    El director regional de la Onemi, Alejandro Verges, explicó que la falta de lluvia solidifica el terreno facilitando los traslados, pero dificulta el ingreso de varillas para los sondajes con los que se realiza la búsqueda.

    El último informe entregado por la Intendencia habla de evaluaciones positivas, resultado de las actividades realizadas por los equipos de salud mental con los niños afectados por el desastre.