Todos los Silencios de Kaay

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    La exposición será interactiva porque el público puede participar con sus vivencias

    Dibujar, retratar, exponer. Para muchos el arte es superficialidad, pero en esta ocasión Kaay Alcayaga quiere dejar huella, quiere que su talento con el lápiz vaya más allá de un trazo fino y se convierta en una ventana que denuncia una problemática que la sociedad no ha superado.

    “Ojalá que mi experiencia te pueda ayudar” le dijeron al artista un par de víctimas de violencia intrafamiliar. “Son historias reales, vivencias personales que me contaron las víctimas” explica a El Ovallino.

    La exposición “Silencio” inaugurará el 6 de julio en el Museo del Limarí, con cuadros y retratos a víctimas que posaron y narraron sus desgracias de violencia. El objetivo, según el mismo artista, es que el visitante pueda participar y –si toma valor- comentar su propia vivencia al compartir su experiencia.

    “Basándome en esa experiencia lo escribo a mano y hacemos la intervención de inmediato en la exposición. La exposición va dirigida a la mujer, pero también pueden participar hombres, como una manera de que la gente pueda ver lo que está pasando con esta temática”

    Autorretrato

    Alcayaga cuenta que en su propio entorno familiar ha sido testigo de violencia intrafamiliar, tanto de abuso físico como de presión psicológica.

    ¿Cómo surge la idea?
    “Yo me hice artista por el dolor. Por mucho tiempo guardé silencio y ahora decidí salir de mi zona de confort –de los retratos- para reflejar las historias y los gestos de las personas que posaron al desnudo de sus historias, que fue la situación más difícil.
    Porque son años de guardar muchos sentimientos y ahora estoy más preparado más maduro emocionalmente y quizás poder entregar un mensaje a la comunidad, porque sentía que tenía que dar algo a la gente en ese sentido”.

    ¿Qué esperas de la interacción?

    -“Sé que es bastante difícil que la gente se abra a contar su historia. Las que he podido recopilar son a base de entrevistas de varios meses, porque no cualquiera le cuenta su historia a un desconocido, sobre todo por el hecho de no volver a recordarlo porque es complejo.

    No sé si resultará la idea (de que el público participe) porque no es fácil que la gente vaya y cuente una historia muy personal.

    ¿Cómo puede participar el público?

    -“La idea es que escriban en papeles sus historias y luego los juntaremos al final de la exposición, para compartir experiencias, incluso integrar entidades que trabajen el tema de la violencia intrafamiliar. En este sentido yo espero poder ofrecer un aporte para que las cosas cambien”.