“Muchos crianceros quedaron con los brazos cruzados por la pérdida de su ganado”

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    Juan Carlos Codoceo, actual consejero regional por el Limarí, y presidente de la asociación provincial de los crianceros, puso el acento en la grave situación que están viviendo los crianceros de la provincia, en especial, aquellos que no son usuarios de organismos como INDAP. (FOTO: CHRISTIAN ARMAZA)

    Algo más de un mes ha pasado desde que las heladas afectaron al agro local, generando fuertes pérdidas para todos quienes viven de la tierra en nuestra región.

    Campesinos, grandes y pequeños, comuneros y crianceros fueron quienes vivieron en carne propia los efectos de las bajas temperaturas que arrasaron con sus respectivas producciones, generándoles fuertes pérdidas económicas.

    En primera instancia, organismos del Estado como el INDAP e INIA salieron a terreno para efectuar un catastro de todos aquellos productores que habían sufrido daños por las bajas temperaturas. Posteriormente, desde INDAP, se abrió una línea de emergencia para ir en ayuda de sus usuarios, mientras que al mismo tiempo, parlamentarios y alcaldes de la zona solicitaban al gobierno central la declaración de la región como Zona de Emergencia Agrícola.

    Finalmente, dicha solicitud fue aprobada, por lo que la región podrá contar con mayor cantidad de recursos de forma más expedita para ir en auxilio de los productores agrícolas de la zona.

    No obstante, quienes también sufrieron un fuerte impacto en sus emprendimientos producto de las heladas fueron los crianceros, importante sector económico y social de la provincia, que viene recurrentemente sufriendo los efectos que el clima ha generado en los últimos años.

    Juan Carlos Codoceo, consejero regional y quien durante años ha sido el presidente provincial de lo crianceros, es quien pone las alertas por lo que están pasando centenares de crianceros por estos días, a más de un mes del fenómeno climático.

    “A la gran mayoría de los crianceros les malparieron los animales. Ellos han sufrido una tremenda perdida” advierte.

    Codoceo señala que a su juicio, aún no se ha tomado el peso sobre la situación que viven los crianceros, por lo que solicitó que se les apoye económicamente, pero haciendo una precisión: no sólo a los que son usuarios de INDAP.

    “Ellos son los que están más complicados, porque no reciben ayuda de ninguna índole. Hay muchos crianceros que quedaron con los brazos cruzados por la pérdida de su ganado, y por eso, necesitamos que se les apoye con recursos, pero que sea pronto y no haya tanta demora” sostiene.

    Si bien posterior a las heladas, precipitó en la zona del Secano, Codoceo señala que no es suficiente para reparar el daño que generaron las heladas.

    “Es necesario que las autoridades trabajen con los dirigentes, que nos llamen a una reunión para ver la situación, porque para todos ellos, es su única fuente productiva” afirma, insistiendo que los crianceros que no son usuarios de INDAP, “claman por ayuda, pues no han recibido nada hasta el día de hoy, y ellos son la mayoría”.

    HAY DISPOSICIÓN PARA AYUDAR, PERO…

    Sobre el número efectivo de crianceros afectados por las heladas, Codoceo señaló que no manejan números exactos, pero asegura que sólo en la comuna de Ovalle, podrían acercarse a los mil afectados, mientras que en las otras comunas, la cantidad podría variar entre los 600 y 800 crianceros perjudicados.

    En ese sentido, el consejero regional por Limarí aseguró que entregó una carta al Ministro de Agricultura, Antonio Walker, durante su visita a la región “donde solicitábamos como asociación provincial de crianceros, entrega de forraje como había ocurrido en 2015, que fue una medida muy exitosa”, pero asegura “no fui escuchado, porque esa carta no me ha sido respondida”.

    Si bien, el Consejo Regional dispone de algunos recursos para emergencias, Juan Carlos Codoceo espera que desde el gobierno central se tome real conciencia de la situación. Y pese a que reconoce que existe disposición de parte del gobierno para atender las necesidades de los crianceros, afirma que “ha quedado con un sabor amargo. No tengo mucha esperanza, porque si hubiese tenido una respuesta del ministro por sí o por no, ya buscaríamos otros caminos”.

    El dirigente de los crianceros se mostró en todo caso, dispuesto a trabajar con todos, pero con celeridad. “Yo vivo en el sector rural, soy comunero, soy criancero, y uno ve la realidad y ve lo que está pasando la gente. Esperemos que haya una pronta solución” concluyó.