Dos sujetos identificados con las iniciales C.F.P.P. ( 24 años, sexo femenino) y R.J.M.H. (40 años, sexo masculino) fueron declarados culpables de un delito en el que habrían actuado junto a terceros.
Luego del juicio oral en el que la víctima de los hechos no quiso declarar, pese a las gestiones para contar con su participación, la Fiscalía de Ovalle acreditó los delitos de secuestro, lesiones menos graves y porte de arma de fuego contra dos acusados.
Fue así como el Ministerio Público logró acreditar los delitos con pruebas entre las que se cuenta un video que los propios acusados grabaron cuando tenían en su poder a la víctima.
Previamente la Fiscalía de Ovalle formalizó a los imputados y los acusó por los delitos de secuestro, porte ilegal de arma de fuego y municiones y lesiones menos graves, ilícitos que fueron probados gracias a la declaración de un denunciante y funcionarios de la Brigada Investigadora Criminal de la PDI de Ovalle, entre otros medios de prueba.
Al respecto, el fiscal jefe de Ovalle, Carlos Jiménez, relató que pese a que la víctima no declaró en el juicio, de todos modos se obtuvo la resolución de culpabilidad contra los sujetos por parte de los jueces del Tribunal Oral en lo Penal. “Lo particular de este caso es que durante el juicio oral no se presentó la víctima del secuestro y lesiones menos graves al juicio, atemorizado por los hechos que le habían sucedió, pero no obstante ello, con la exhibición de un video donde aparece la víctima retenida por los acusados y otros sujetos no identificados, se pudo apreciar cómo lo agredieron”, dijo.
El fiscal agregó que “junto a la declaración de una testigo que denunció los hechos y que recibió este video, más la declaración de los funcionarios de la Bicrim de Ovalle que estuvieron a cargo del procedimiento pudimos acreditar el delito de secuestro y lesiones menos graves”.
El ilícito del porte ilegal de armas quedó también acreditado con las declaraciones policiales e informes perciales.
La lectura de la sentencia se llevará a cabo el próximo 10 de diciembre, a las 13:45 horas en el Tribunal Oral en lo Penal de Ovalle. Si bien la Fiscalía solicitó penas que superan los 15 años de privación de libertad, serán los magistrados quienes decidan las condenas respectivas.
ANTECEDENTES DEL DELITO
Según la investigación de la Fiscalía y la Policía de Investigaciones, los hechos ocurrieron en Ovalle el día 2 de diciembre de 2017, a las 18:30 horas aproximadamente, en la bomba de bencina Shell ubicada en avenida Ariztía con avenida La Feria. Esa hora dos sujetos cuya identidad no se encuentra determinada, intimidaron en contra de su voluntad al joven de entonces 23 años y lo encerraron al interior de un automóvil color rojo en donde se encontraban otras personas.
La víctima fue trasladada – según la acusación – hasta el terminal de buses de Ovalle, en donde sus captores se reunieron con los imputados C.F.P.P. de sexo femenino y R.J.M.H., quienes transitaban en una camioneta Nissan Terrano color rojo y posteriormente trasladaron al joven al sector de Talhuen y “camino a la mina” de Lagunillas, sector rural.
En el lugar fue retenido, contra su voluntad, siendo encañonado con un arma de fuego y golpeado con elementos contundentes por parte de los condenados, quienes le causaron lesiones menos graves.
A las 23:00 horas de ese día, el afectado fue abandonado y al día siguiente la Policía de Investigaciones de Ovalle detuvo a los imputados cuando transitaban en una camioneta en el sector El Reloj, mientras portaban sin autorización una pistola Taurus de 9 milímetros, con su cargador, arma que fue reconocida por la víctima como la usada por los imputados para golpearlo.
El 3 de diciembre de 2017 se llevó a cabo el control de detención de ambos sujetos, instancia en donde fueron formalizados por el delito de secuestro y porte de armas y además fueron dejados en prisión preventiva. “El Ministerio Público con los antecedentes que reunió para el control de detención, logró dejar claro al Tribunal la existencia del delito, la participación de los mismos y la necesidad de cautela. El Tribunal señaló que este tipo de actuar, de este delito, es extraño para la ciudad y que obedece a organizaciones criminales de mayor envergadura y consideró que la libertad de los imputados es un peligro para la seguridad de la sociedad”, había señalado el fiscal, Lucas Rivera.
En cuanto al desarrollo del delito, las personas que mantenían en su poder al joven enviaron un video a sus familiares, dando cuenta de los hechos. “Las imágenes fueron enviadas por Whatsapp y en éstas se podía apreciar que golpeaban brutalmente a la víctima, por lo que ante la gravedad de los hechos, se activaron los protocolos de rigor para esclarecer el delito de secuestro”, había indicado en diciembre del año pasado, el comisario Raúl Muñoz, jefe Bicrim Ovalle.