“Yo soy jefa de hogar, soy madre soltera, tengo a mi hijo estudiando en el liceo. Entonces igual nos preocupa la situación que hay sobre esto, porque este programa nos hace falta. Con eso hemos podido darle de comer a nuestros hijos, pagar luz y el agua”.
Quien habla es Andrea Bolvarán, ovallina jefa de hogar que hasta hace un tiempo pertenecía al grupo de beneficiarios – en su mayoría mujeres – de los programas Pro Empleo, programa creado durante la pasada administración de la ex presidenta Michelle Bachelet, para contener la falta de empleo que por aquellos años (2014-2015) generaba la sequía que azotaba la región.
En aquel momento se destinaron cerca de 240 cupos en la comuna de Ovalle para atender a aquellas personas que no tenían un empleo fijo. Luego, tras la última solicitud del gobierno regional para extender el programa hasta fines de 2018, los cupos habían descendido a 129 en la comuna. En toda la región, hasta el mes de diciembre, cerca de mil personas eran beneficiarias del programa.
Pero ahora, ante el fin del ciclo del programa Pro Empleo, la preocupación cunde entre aquellas antiguas beneficiaras, pues para ellas según explican, sus ingresos han resultado ser fundamentales para poder sostener sus gastos familiares.
“Ahora no hay trabajo aquí en Ovalle. Entonces lo único que le pedimos al gobierno es que se ponga la mano en el corazón, que por favor restituya estos programas” señala la señora Andrea.
Teresa Reinante, otra ovallina beneficiara de los Pro Empleo, argumenta en esa misma línea, que “la verdad, el programa fue bueno para nosotros, porque gracias a eso tuvimos el dinero suficiente para mantener a nuestra familia y para el estudio de los chicos. La verdad, es que me complica mucho quedarme sin trabajo”.
Ante ello, el concejal de Ovalle, Patricio Reyes, pidió al gobierno regional “que se continúe con estos programas y se aumenten los cupos, porque esto está asociado a una necesidad que tiene la comuna. Hay gente que carece de recursos económicos para mantener a su familia y la mayoría de los beneficiarios son mujeres jefas de hogar y no tienen otra fuente de ingresos. La reactivación económica en la parte agrícola ha estado muy lenta” señala.
Pero no sólo en Ovalle, sino también en Combarbalá llegaba la noticia de que cerca de 100 personas quedarían sin ningún tipo de empleo por el término de esta iniciativa.
REUNIÓN EN SANTIAGO
Ante este panorama, el gobernador del Limarí, Iván Espinoza, señaló que el programa Pro Empleo finalizó formalmente a fines del gobierno anterior. “No obstante lo anterior, este gobierno al tener conciencia de la prolongación de situaciones de emergencia, el Consejo Regional decidió financiar una cierta cantidad de empleos de la región de Coquimbo, hasta diciembre del 2018. Por lo expuesto anteriormente, todos teníamos claro conocimiento, que excepcionalmente, se hizo funcionar este programa por el 2018” sostuvo.
En ese contexto es que durante esta semana se llevó a cabo en Santiago, una reunión entre la intendenta Lucía Pinto y el ministro del Interior, Andrés Chadwick, con los alcaldes de la región, en cuyas comunas han sido ejecutados los empleos de emergencia. La idea fue evaluar esta medida y el impacto que este programa ha tenido en cada una de las comunas.
“La escasez hídrica ha causado un impacto negativo en el empleo y por mucho tiempo, cientos de familias han dependido del Pro Empleo. Por eso nos reunimos con el ministro del Interior, Andrés Chadwick, quien acogió nuestra solicitud para seguir apoyando a las familias afectadas por la empleabilidad por la falta de agua” sostuvo en la oportunidad, la intendenta Lucía Pinto.
Desde el ejecutivo aseguraron que “pronto” habría una respuesta concreta a la solicitud.
En ese sentido, el concejal Patricio Reyes, insistió en pedirle al gobierno que “se asignen luego los recursos, pues no podemos esperar los resultados de reuniones en Santiago. Yo quiero que la decisión se tome aquí en la región. La intendenta tiene los elementos para poder tomar la decisión en la región” indicó.
GRANDES OBRAS
De todas formas, la apuesta está enfocada a mediano y largo plazo a impulsar todas aquellas obras públicas que puedan traer nuevos puestos de trabajo a la provincia, empleos que sean de calidad y no solamente de “emergencia”, tal como lo explica el gobernador Iván Espinoza.
“La pretensión y planificación del programa del presidente Piñera, tiene tendencia a apuntar a conseguir pleno empleo y de calidad. Es decir, considerar todos los aspectos previsionales del trabajador, lo cual se contrapone con la concepción tuvo el programa “Pro Empleo”. Sin embargo y a pesar de lo anterior, se ha activado una gran cantidad de proyectos de inversión pública, los cuales van a generar nuevos empleos, tendientes a cubrir los actuales déficit si pudiesen existir” sostuvo la autoridad.