Tras el paso por la Costanera de Ovalle, no solo se logra apreciar las escasas áreas verdes que se mantienen tras la sequía. En parte del paisaje también se observan escombros y basura doméstica en varios sectores alrededor de la arteria principal de tránsito de la comuna. Al solo avanzar unos metros la basura es predominante, incluso cerca del acceso al complejo deportivo Kiko Rojas donde el camino está sembrado de residuos de toda índole.
Frente a esta problemática, Marcelo Tabilo, jefe de la oficina de Aseo y Ornato de la municipalidad de Ovalle explica lo complejo que es controlar estas malas prácticas. “Sorprender estos temas ilícitos es súper complejo porque lo hacen en los horarios nocturnos y personal municipal no da abasto para lograr frenar estas conductas (…) para esto es fundamental el apoyo de la ciudadanía y tomar conciencia con el tema, porque al final, el daño y el impacto que estamos teniendo con el cambio climático y la sequía, claramente eso es producto de nuestro actuar”.
En cuanto a las medidas que el municipio invierte para eliminar esta mala práctica, el jefe de la oficina de aseo sostiene que existen varias instancias donde los ovallinos pueden deshacerse de los escombros, pero que al poco tiempo vuelve a aparecer la basura. “En el fondo el municipio tienen las medidas, entrega las facilidades a la gente de hacer limpieza, operativos de basura histórica, pero aun así no se nota, porque lamentablemente el municipio en esto está solo, la comunidad tiene cero conciencia ambiental”.
A su vez, el funcionario sostiene que la colaboración ciudadana es uno de los factores más importantes para combatir estos hechos ilícitos que contaminan nuestro entorno. “La responsabilidad es de todos de cuidar el sector y hacerse responsable de lo que uno genera. Para nosotros es súper complejo combatir día a día con los microbasurales o vertederos ilegales pero lo hacemos todos los días, es nuestra labor tener los espacios públicos en un entorno limpio, eso es lo que queremos, pero necesitamos que la ciudadanía denuncie”.
LAS DENUNCIAS SON ANONIMAS
El funcionario municipal explica además que no se necesita nada más que evidencia para poder realizar las denuncias frente acciones de este tipo, ya que las declaraciones son totalmente anónimas.
“Nos interesa que nos indiquen quién lo hizo por intermedio de una fotografía, datos de cuando se registró el acto y nada más , nosotros nos hacemos cargo de realizar la denuncia al Juzgado de Policial Local o al Ministerio Público, pero necesitamos que nos retroalimenten de estas malas prácticas”, explica Tabilo.
SANCIONES QUE NO SE TOMAN EN CUENTA
Según la ley 20.879 se sanciona el transporte de desechos hacia vertederos clandestinos y expone a multas que van desde las 2 a las 100 UTM (más de 47 millones de pesos) a quienes “encargue o realice, mediante vehículos motorizados, no motorizados o a tracción animal, el transporte, traslado o depósito de basuras, desechos o residuos de cualquier tipo, hacia o en la vía pública, sitios eriazos, en vertederos o depósitos clandestinos o ilegales, o en los bienes nacionales de uso público”.
La ley, que entró en vigencia el año 2015, faculta a “cualquier persona que sorprenda o detecte las conductas descritas quien podrá poner en conocimiento de este hecho a las municipalidades, a Carabineros de Chile o a la autoridad sanitaria, quienes remitirán los antecedentes al Ministerio Público o a los tribunales competentes, según corresponda. Las personas podrán acompañar fotografías, filmaciones u otros medios de prueba que acrediten el lugar, la patente del vehículo o el día en que sucedieron los hechos".
ALTERNATIVA POCO UTILIZADA
Para poder deshacernos de aquellos residuos que no pueden ser trasladados por el camión recolector, existe la opción de servicio en el vertedero municipal de Ovalle, en donde el precio por dejar los residuos en el sector, equivale a 16 mil pesos por tonelada con IVA incluido.
En la empresa Tasui, son categóricos al indicar que los residuos que tienen total restricción son “los neumáticos y materiales inflamables, ya que el vertedero es solo para residuos domiciliarios y no industrial”.
La pregunta a modo de conclusión es, ¿a dónde va a parar esa basura? Una interrogante que podemos responder frente a la realidad que ven nuestros ojos.