Se encendieron las alarmas en el campo al notar que parte del agua que llegaba del canal Romeral, traía consigo una carga considerable de aceites de hidrocarburos que pueden afectar las plantaciones y la salud de los consumidores finales.
Aunque es una situación que han notado en diversas ocasiones, en las últimas semanas se ha acrecentado y han visto que puede ser un factor que puede poner en riesgo la salud de los pobladores, además de gran parte de la cosecha de las plantaciones al sur de Ovalle.
El presidente de la Junta de Vigilancia del Río Limarí, José Eugenio González, explicó a El Ovallino que al menos 700 hectáreas de siembra se verían comprometidas por el contaminante vertido al agua, afectando en gran medida al área cultivada del suroeste de la comuna, específicamente las zonas entre el área urbana de Ovalle y el pueblo de Limarí, hasta los sectores de Carachilla y otros ramales del canal.
“Notamos que es un aceite de vehículos, es un aceite quemado de hidrocarburos que es muy dañino para las plantas y para los humanos, esto puede ser un gran problema y por eso hemos analizado los distintos puntos en los que se pudieran verter estos contaminantes al canal del Romeral”, indicó González.
Explicó que la contaminación de las aguas podría en riesgo la plantación de frutales y hortalizas, tanto de consumo local, como para exportación.
“Muchos de los predios sembrados son de hortalizas para la distribución en Ovalle, otros son frutales que son para consumo local o para exportación y otros son de uva pisquera que se queda en la provincia”, comentó el dirigente.
La sospecha
Ante esta situación, y entendiendo que el canal Romeral atraviesa a Ovalle desde Los Peñones hasta la salida sur hacia el pueblo Limarí, con algunos tramos a cielo abierto, los regantes se dieron a la tarea de buscar cuáles podrían ser los distintos focos en los que el aceite pudiera ser vertido accidental o intencionalmente al canal.
Descubrieron al menos catorce puntos en los cuales talleres mecánicos, talleres de pintura, bencineras y botaderos de basura irregulares, podrían estar derramando constantemente el aceite quemado de los motores o lubricantes utilizados.
Los puntos estarían ubicados en la avenida Benavente, avenida La Feria, Nueva Feria y calle Portales, es decir a lo largo del trazado en puntos abiertos o abovedados del Canal Romeral.
La solicitud
En los últimos días la Junta de Vigilancia de Río Grande y Río Limarí, introdujo ante la Secretaría Regional del Ministerio de Salud una solicitud de fiscalización, que fue recibida en fecha del jueves 14 de noviembre, según el timbre del documento al que tuvo acceso El Ovallino, y que detalla el recorrido del canal y los posibles 14 puntos de contaminación del mismo.
Así, el directorio de la mencionada organización solicitó la fiscalización de “los centros o talleres de reparación mecánica y locales de distribución de lubricantes y combustibles que se ubican en torno al canal Romeral de Limarí, en el área comprendida entre el sector del puente Los Cristi, ubicado en la intersección de Avenida Benavente y Avenida David Perry y frente al acceso norte de calle Portales, en atención a la frecuente presencia de residuos aceitosos en las aguas del mencionado acueducto”.
Especificaron incluso cuáles serían los negocios o puntos que podrían verter el aceite al afluente, lo que deberá determinar luego la investigación que realicen las autoridades.
“El canal Romeral de Limarí capta sus aguas desde la ribera norte del cauce natural río Grande o Limarí, en el sector Los Peñones, en punto ubicado en las coordenadas UTM Norte 6.613.711, Este 292.398 metros (Datum WGS84), se desarrolla inicialmente por el área urbana de la ciudad de Ovalle, en un recorrido de oriente a poniente y en forma posterior, transporta las aguas de riego a los sectores denominados Las Vegas y Colonia de Limarí, abasteciendo un área de cultivos agrícolas de aproximadamente 678 hectáreas, constituidos fundamentalmente por hortalizas y frutales mayores”, indica el documento.
Refirieron que algunos usuarios y personal de la comunidad de aguas del canal Romeral de Limarí y de la junta de vigilancia, detectado en innumerables ocasiones, la presencia de residuos aceitosos en las aguas de riego que conduce el acueducto, en puntos ubicados aguas abajo de la zona que se solicita fiscalizar: “dentro del radio urbano y en el área de riego, fundamentalmente en estanques de acumulación, situación que afectaría los cultivos agrícolas desarrollados y eventualmente la salud de las personas que consumen éstos productos o realizan las labores agrícolas”.
Por tanto estiman que “la presencia de residuos aceitosos, podría provenir de la actividad que se realiza en talleres mecánicos o centros de venta de combustibles y recambio de lubricantes de vehículos motorizados que se ubican en el área”.
Destacaron los regantes en la solicitud, que en gran parte del recorrido del canal se realiza en bóveda, es decir, completamente tapado, y que sin embargo, existe una serie de cámaras de inspección mediante la cuales podría estarse vertiendo residuos y también, considerando que el canal Romeral de Limarí cumple la función de colector de aguas lluvias de la ciudad de Ovalle, existe una serie de sumideros de aguas lluvias que desembocan en el acueducto, que podrían estar siendo utilizados como vías de descarga de desechos líquidos provenientes de la actividad automotriz.
La fiscalización
Ante esta situación, y consultados por el proceder de la exigencia de los regantes, desde la Seremi de Salud confirmaron que “Efectivamente hemos recibido una solicitud de fiscalización de la Junta de Vigilancia Río Grande y Sus Afluentes, por la presencia de residuos aceitoso en el canal Romeral. Como institución recibimos tal requerimiento y se efectuarán las inspecciones correspondientes”.