A un día de la destrucción total de las casetas de la plaza de peaje en la ruta que une Coquimbo y Ovalle, los automóviles transitan con normalidad a un costado de las estructuras siniestradas.
Recordemos que ayer un grupo de manifestantes llegó hasta el lugar para protestar por el alza de la tarifa, que implica un aumento de $500 al valor original ($2.500) a partir de enero.
Si bien la movilización comenzó de manera pacífica, a eso de las 11:00 horas las cinco cabinas fueron destruidas y posteriormente se incendiaron dos de ellas.
Desde la concesionaria Ruta del Limarí no se han referido a lo sucedido, mientras que el seremi del MOP, Pablo Herman, llamó a la empresa a tomar conciencia y mantener el cobro del peaje.