Después de siete meses de inactividad presencial, los miembros de la serie adulta del Ovalle Rugby Club decidieron regresar cuanto antes a los entrenamientos presenciales. Y es que los efectos de la pandemia por Covid-19 se dejaron sentir, sobre todo en los deportistas amateurs, quienes debían cumplir una serie de requisitos para volver a entrenar, o bien, esperar que la comuna avance de Fase en el denominado Plan Paso a Paso.
Es así como los rugbistas locales comenzaron a estudiar los distintos protocolos sanitarios y deportivos de las respectivas autoridades para volver en gloria y majestad a tener relación directa con la “ovalada”.
Fue así como estando la comuna de Ovalle en Fase 2 o Transición, la directiva del club solicitaron los protocolos a los antes mencionados y también a la World Rugby, quien es la federación internacional de la disciplina.
Y así como cumpliendo con lo exigido por las autoridades, la vuelta a los entrenamientos presenciales se concretó este martes, en el Complejo Deportivo La Silleta.
“También creamos un protocolo y lo adecuamos a la realidad del club, luego Ovalle entró en Fase 3, por lo que se abrieron más puertas para poder volver a entrenar. Capacitamos a cada jugador adulto con el protocolo, siendo requisito obligatorio para el retorno seguro, mientras que después tuvieron una capacitación virtual en Covid-19, dictado por la World Rugby”, contó Felipe Ramírez, miembro de la directiva del club ovallino.
A pocos días del regreso, cada jugador debió llenar una encuesta para la base de datos interna del club, en la cual debieron responder sobre los síntomas, si han mantenido contacto con contagiados o sospechosos por Covid-19.
Lo más importante, y que recalcan en el club, es que cada jugador cuenta con sus propios implementos deportivos sanitizados, para evitar una posible propagación del virus. Es así como cada rugbistas tienen sus propios balones, su kit de alcohol gel, agua y pañuelos desechables, además del propio centro de entrenamientos mantienen sus dependencias sanitizadas para la práctica deportiva.
Serán los rugbistas adultos quienes lideren las primeras semanas de entrenamiento, esperando que la comuna avance de fase para que las demás ramas del club se unan a los entrenamientos.
POR FASES
En esta primera etapa, los entrenamientos estarán alejados del roce propio del rugby, por lo que se mantendrán prácticas con balón, pero sin realizar tackles o jugadas típicas de la disciplina que incluyan contacto físico entre jugadores.
Es así como el protocolo de regreso deportivo se subdivide en el kit personal deportivo, para luego avanzar en un futuro a la fase 3, solicitando incluso un examen PCR para en un futuro volver a los entrenamientos con contacto.
“La idea es que se comprometan al autocuidado, siendo cada jugador responsable de su salud”, dijo el dirigente.
Por ahora, se realizarán entrenamientos presenciales todos los martes de la semana, para luego avanzar a dos entrenamientos semanales.
De esta forma, el rugby se transforma en el primer deporte amateur en regresar a los entrenamientos presenciales en la provincia de Limarí.