En un ascenso solitario hacia el cerro El Reloj, a menos de 15 minutos de Ovalle, el excursionista Matías Rojas se topó con tres cóndores que sobrevolaron majestuosamente los cerros de la zona. El joven ovallino acostumbra practicar senderismo en los cerros de la comuna, y refirió que para él es habitual ver fauna silvestre, el espectáculo de esta semana fue muy diferente a los anteriores.
“La entrada al camino del cerro no está muy lejos del cruce de Los Leíces. Este lunes comencé a subir el cerro como a las 9.00 de la mañana y como iba parando, tomando agua, descansando llegué pasado el mediodía a la parte alta. Me causó cuidado porque estos cóndores no estarían en una zona muy alta. El cerro tiene unos 1100 metros sobre el nivel del mar. Yo siempre estoy haciendo este tipo de senderismo y nunca me había topado con estas aves. Había visto águilas plomas y jotes, pero cóndores nunca había visto”, señaló el deportista.
Aseguró que se trata de tres aves adultas, dos machos y una hembra, los que sobrevolaron por largo rato desde las tres de la tarde.
“Aparecieron de repente, seguramente tendrían el nido por allí, porque no los había visto, estaban volando bajo, y luego comenzaron a planear y comenzaron a subir bastante alto. En la zona había cuatro jotes, estaban cerca de donde yo estaba, incluso les pasé cerca y ni se movieron, parece que están acostumbrados. Yo había visto cóndores antes en El Cajón, y se diferencian al tiro, son gigantes y el plumaje es diferente, se diferenciaban incluso los machos de la hembra”, indicó Rojas.
Cree que tendrían su nido en un barranco inaccesible que tendría su cara hacia la costa.
Resguardos
En tanto el director regional (S) del SAG Coquimbo, Cristian Sabelle, explicó a El Ovallino que si bien esta especie se observa principalmente en la cordillera y precordillera de toda la región, se ha visto ocasionalmente en zonas costeras.
-¿Han registrado la presencia de cóndores en los valles o la baja cordillera?
-“En la provincia del Limarí se han observado cóndores a 300 msnm, a escasos kilómetros de la costa, en las cercanías de Mantos de Hornillos, por ejemplo. El cóndor habita desde la costa hasta la cordillera, busca su alimento, el cual consiste principalmente en carne descompuesta (carroña). Debido a que los valles y las zonas costeras han sido ocupadas por ciudades y pueblos, esto les ha llevado a desplazarse a lugares más seguros, como son los lugares a más altitud. Eso sí, tiene como sitios de reproducción preferentemente los acantilados de la cordillera de Los Andes. El SAG Ovalle ha recibido cóndores enfermos, principalmente intoxicados, los que han sido tratados y luego liberados. Se han recibido desde lugares como Rapel, Tulahuén y Serón, en los últimos años”.
¿Qué deben hacer las personas que se consigan con estas aves?
-“A las personas que ven animales nativos silvestres, hay que señalarles que los observen desde una distancia prudente, no molestarlos, no alimentarlos, en muchas oportunidades los animales se encuentran en buenas condiciones, por lo que hay que dejarlos tranquilos. Si se observa que se encuentran heridos, cojeando, no pueden volar, presentan evidencia de sangre, no se mueven, deben dar aviso al Servicio Agrícola y Ganadero, o bien a Carabineros. En el caso del Cóndor, hay oportunidades en que se alimentan en exceso y les cuesta iniciar el vuelo, por lo mismo esperan un tiempo antes de volar”.
¿Qué tipo de sanciones arriesgan quienes interfieran con la alimentación o costumbres de estas aves?
-“Los animales nativos silvestres NO deben ser tratados como mascotas, no son mascotas. Cuando se los trata como tales, se les hace un daño, que en ciertos casos puede ser irreparable. No deben ser capturados y su tenencia es ilegal. La ley de caza contempla multas de 3 a 50 UTM, o en algunos casos prisión a quienes cacen o capturen especies de fauna silvestre cuya caza o captura se encuentre prohibida”.