Viviana Badilla Vargas
Sin duda alguna el covid-19 no solo trajo enfermedad, sino que también una crisis económica mundial. Siendo los mayores afectados el rubro hotelero, gastronómico y el transporte local. Sin embargo, aquellos emprendedores y trabajadores supieron reinventarse ante tal hecho y adaptarse a las nuevas medidas sanitarias para así mantenerse en vigencia en su labor.
Así fue lo que ocurrió con el Mesón de La Merced situado en la comuna de Monte Patria hace más de 8 años. Este es característico lugar ubicado en lo alto de un cerro, se adaptó a todo lo impuesto por el Ministerio de Salud (Minsal) y con la fase 3 que rige la zona aumentó considerablemente el flujo de huéspedes que acuden a las cabañas del lugar, comentó su propietaria Margarita Morgado.
“Es súper importante que el toque de queda se haya extendido porque la gente muchas veces no podía llegar, si venían viajando desde Santiago, les era imposible llegar antes de las 10 de la noche por el mismo toque de queda. Asimismo, ahora ha venido bastante gente y no solo de la región sino que de diferentes partes de Chile y esos nos pone muy feliz porque saben como trabajamos nosotros y que las medidas sanitarias se llevan al pie de la letra”, aseguró.
Y es bien sabido que la hotelería y la gastronomía van de la mano, ya que ocurrió lo mismo con el icónico Resto Bar Cafetería ubicado en Calle Victoria. Este lugar de encuentro limarino – que comenzó como Bar Café en el 2006- se encontró con sus puertas cerradas durante 9 meses, lo cual afectó fuertemente sus ganancias, asegura Katherine Álvarez, una de sus propietarias.
“Tuvimos que reinventarnos y ampliamos nuestros servicios para ofrecer a nuestros clientes. Una propuesta atractiva y diferente de la gastronomía local como a su vez internacional. Creando día a día propuestas en almuerzos y productos destacados como hamburguesas caseras, ceviches mixtos y tablas con quesos de la zona, tabla vegana entre otras” puntualizó.
Y fue así que decidieron no rendirse y tirar por la borda años de sacrificio, años de entregar alegría y un grato espacio de recreación en el corazón de Ovalle.
“Que el toque de queda se haya extendido y que nos encontremos en fase tres nos ha afectado positivamente, ya que nuestros clientes pueden disfrutar de un servicio y alimentación por más horas y nos permite brindar esa pequeña esperanza de una pronta normalidad y desconectarse por un momento de tanto problema”, mencionó.
Balance positivo en transporte local
Es sabido que gracias al desconfinamiento y a la fase 3 del plan “Paso a Paso”, la económica local ha aumentado sus ganancias, ya que así lo ha permitido el gran flujo de personas que se encuentran en movimiento en la comuna de Ovalle.
Así lo ha vivido Franco Barraza (27) es un joven ovallino que se dedica hace más de dos años como medio de transporte a través de diferentes plataformas digitales. Y comenta que la pandemia lo afectó de manera directa.
“Muchos locales nocturnos, cerraron por un largo tiempo, restringiendo la movilidad de las personas, en la cual se veía muy poca gente en la calle y obviamente tuve un fuerte disminución de mis ganancias”, aseguró.
Asimismo, que el flujo de transeúntes haya aumentado ha sido un verdadero alivio por él, ya que ha visto un balance positivo en sus ganancias. Y no solo él, sino que en todo el rubro.
“Que hayan modificado el toque de queda, es un gran beneficio para mí como conductor, en lo cual me permite realizar muchos más viajes, especialmente turistas que vienen a visitar la zona. He tenido un gran aumento en lo económico, lo que antes me hacía desde la mañana hasta la tarde, hoy en día me lo estoy haciendo solamente en la tarde hasta la medianoche”, finalizó.