Temporada de incendios forestales reportó menos superficie afectada que en otros años

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    Autoridades nacionales de los ministerios de Agricultura e Interior analizaron los resultados de esta temporada y revisaron el Programa de Protección contra Incendios Forestales para la temporada 2021-2022.

    “Respecto al balance de la temporada anterior podemos decir que se vieron afectadas 35 mil hectáreas, lo que significa un 65% menos de hectáreas afectadas en comparación con la temporada anterior. Esto requirió un trabajo coordinado, se explica por múltiples motivos, pero nos anima a continuar en la senda, en la estrategia que no solamente combate, sino que tiene un plan de prevención importante”, señaló la Ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga. 

    Resaltó que en la reunión ya se comenzó a definir la hoja de ruta frente a la próxima temporada de incendios. “Estamos en una condición climática compleja, con temperaturas altas, bajas precipitaciones que nos proyectan una temporada compleja, es por eso, que no solamente hicimos un balance de la temporada anterior, sino también la proyección de la siguiente”, sostuvo Undurraga.

    El director ejecutivo de CONAF, Rodrigo Munita señaló la relevancia que tiene el observar lo que está ocurriendo en el verano del hemisferio norte.

    “Respecto de la temporada que se nos viene lo primero es que debemos mirar hacia el norte, lo hemos hecho en años anteriores cuando las condiciones climáticas producto del cambio climático son absolutamente adversas, altas temperaturas, material seco, olas de calor, en fin. Las imágenes que nos están mostrando son de verdad tremendamente alarmantes y eso significa que nosotros como país debemos hacernos cargo de lo que eso nos va a implicar”, afirmó.

    Realidad Regional

    Si bien, desde CONAF Región de Coquimbo, hay satisfacción por las cifras positivas que avalan los últimos cuatro años a la baja tanto en número de incendios forestales, así como en hectáreas de terreno consumido por el fuego; también hay preocupación por esta serie de incendios que afectan principalmente a la Región de Valparaíso, que posee condiciones similares a las de la zona.

    A esto se refirió el Seremi de Agricultura de la región, Rodrigo Órdenes, señalando que “si bien en las últimas temporadas hemos tenido resultados positivos, bajando de 85 incendios forestales la temporada 2019 – 2020 a 58 eventos en el 2020 – 2021, no podemos bajar los brazos, el combate de incendios forestales es una labor que requiere de planificación y de organización entre el sector público, privado y de la comunidad en general, todos tenemos una gran responsabilidad. Este año con motivo de la escasez hídrica, se incrementan las posibilidades de que ocurran estos siniestros, por lo que desde ya llamamos a todos los ciudadanos a que nos ayuden a cuidar nuestros recursos naturales, denunciando a tiempo y evitando realizar acciones que generen estas catástrofes que son muy perjudiciales tanto para el medio ambiente, como para las comunidades afectadas”.

    Eduardo Rodríguez, director regional de CONAF, argumenta que las cifras de la última temporada de incendios si bien han ido a la baja, siguen siendo una “lamentable noticia, por cuanto el Cambio Climático golpea enormemente a esta región y los recursos vegetacionales, son la base productiva de muchas actividades tradicionales  como la ganadería y la agricultura”, sin embargo, sostiene “estamos preparándonos con todos los recursos disponibles; el gobierno ha dispuesto una cifra histórica para controlar los incendios forestales y estamos estableciendo las coordinaciones necesarias con bomberos, con las fuerzas policiales, con las delegaciones provinciales y con el delgado presidencial; para tener aceitada la maquinaria para el control”, sostiene Rodríguez.

    Según los datos que presenta las estadísticas de ocurrencia y daño nacional 2020-2021, en la Región de Coquimbo, la temporada 2020 – 2021 registro un 32% menos de incendios forestales, disminución que también se aprecia en la cantidad de superficie dañada, presentando una baja de un 13%, pasando de 230 hectáreas afectadas a 200 hectáreas en la última temporada.