Escuelas de verano: el apoyo para quienes trabajan en la temporada agrícola

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    Bárbara Pérez

    Punitaqui

     

    Oficialmente en la Comuna de Punitaqui se está desarrollando la escuela de verano que beneficia a niños y niñas hijos de padres o cuidadores, con trabajo de temporada.

    La iniciativa se desarrolla en dependencias de la Escuela Bélgica y también en las dependencias del Liceo de Emergencia Alberto Gallardo en Las Ramadas, esto mediante el programa “Trabajo de Temporada y Centro de Cuidados” del Mindep, permite que los padres, madres o cuidadores que se desempeñan en trabajos agrícola de temporadas tengan un espacio seguro y adecuado para dejar a sus hijos mientras realizan estas labores.

    La iniciativa es formulada por el Ministerio de Desarrollo Social en conjunto con el Ministerio del Deporte a través del IND, la colaboración de Junaeb y el municipio local, y cumple con el objetivo de generar espacios de cuidado, formación y recreación, para que los hijos/hijas de madres y padres que realizan trabajos de temporada, para que puedan cumplir sus funciones de manera tranquila.

    Al respecto de esta iniciativa el director regional del IND, Jonathan Pino Naranjo, señaló que, “como Instituto estamos apoyando a estos pequeños y sus padres en Punitaqui, mediante el programa ‘Crecer en Movimiento’, generando actividades, para que estos niños y niñas tengan una verano atractivo, con las actividades que dirigen nuestros profesores  y profesoras, comparten con otros niños y lo más importante, que lo están pasando bien”.

    Por su parte el alcalde de Punitaqui, Carlos Araya, señaló que “para la comunidad es muy importante que tengamos este espacio para que nuestro niñas y niños en estas escuelas de verano, espacio en donde ellos tienen la opción y la posibilidad de poder hacer deporte y recreación, compartir y disfrutar con sus pares, mientras sus padres están trabajando. Por eso quiero agradecer de todo corazón al Instituto Nacional de Deportes a Desarrollo Social, a Junaeb y a todos y todas quienes de una u otra manera han sido parte de la concreción de este importante proyecto de verano para nuestros niños y niñas”.

    Destacó que la iniciativa se llevará a cabo, en los dos establecimientos seleccionados de la comuna, hasta el día siete de febrero.

     

    Apoyo a las familias

     

    En tanto el coordinador municipal de esta iniciativa en la Escuela Bélgica, Andrés Campos, resaltó la importancia del desarrollo de estas iniciativas en comunas pequeñas, en donde la actividad agrícola es uno de los principales rubros y fuente de ingresos para la población.

    “La escuela es una gran ayuda para muchos padres que no tienen con quien dejar a sus hijos durante gran parte del día ya que muchos de ellos son pequeños, de unos 7 a 13 años. En la escuela de verano a los niños se les entrega desayuno, almuerzo y colación de media tarde. Muchos pequeños no saben usar la cocina y en otros casos los papás no alcanzan a dejarle almuerzo, la alimentación es el beneficio más importante que tiene la iniciativa”, explicó Campos.

    Además destacó la manera de trabajar y las actividades que realizan diariamente los niños.

    “La planificación es en conjunto con el IND, que dispuso de dos monitores que realizan diferentes actividades como hacer dibujos con diferentes materiales. Hemos pedido a departamentos de la municipalidad que nos venga a realizar charlas para los niños, hace un par de días vino la OPD y le realizaron una charla sobre los derechos y deberes, también vino la PDI, se han realizado actividades deportivas en lo que es la cancha de la escuela Bélgica y hemos utilizado las dependencias del estadio Municipal para actividades de atletismo. Tenemos un día a la semana visita a la piscina, realizamos trekking, etc. Pero lo más importante es que los niños aprenden a compartir con sus pares y a respetar a sus pares”, precisó

     

    La voz de los niños

     

    Finalmente, Maximiliano Soza de 13 años, comento sobre su experiencia y al respecto señalando  que “estos días la he pasado muy bien, ningún inconveniente, es todo divertido, nuestros monitores nos van enseñando de todo y cosas nuevas. A mí me motiva mucho venir porque al menos puedo hacer algo que cambia mi rutina de día a día, mi mamá cuando no tenía con quien dejarme me quedaba con mis primos, pero ahora me la paso acá y puedo compartir con algunos amigos, es un gran apoyo para ella y mi familia”, explicó.