Obras de escuelas de Tulahuén y Barraza en duda tras anuncio de quiebra de constructora

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    Por Lionel Varela / Provincia del Limarí 

     

    Sorpresa causó que la constructora Cosal, con una exitosa trayectoria de más de 40 años en la planificación y ejecución de proyectos de obras civiles y edificación, anunciara su inminente liquidación debido a dificultades financieras y problemas de carácter burocrático.

    El anuncio generó réplicas que también golpearon a nuestra región, ya que la firma se encuentra ejecutando dos importantes obras, como son la construcción de la Escuela Fronteriza de Tulahuén, en Monte Patria, y la escuela de la localidad de Barraza, en Ovalle.

     

    UNA LARGA HISTORIA

     

    Cabe destacar que entre las iniciativas más destacadas que ha levantado Cosal a lo largo de su historia, se encuentran obras emblemáticas como el Estadio Monumental de Colo Colo, la cárcel de Arica y el aeropuerto de Antofagasta, entre otros. 

    También aquí, en la región, la presencia de la empresa se ha hecho sentir, levantando obras como el edificio de la Bicrim de la PDI en el Barrio Inglés, el Cesfam Santa Cecilia de Coquimbo, y Lila Godoy, en Tierras Blancas, entre otros.

    Sin embargo, la compañía ha tenido que enfrentar una serie de contratiempos que han afectado gravemente su estabilidad financiera en los últimos años.

    En ese sentido, Cosal ha declarado que la principal causa de su situación actual se explican por retrasos en el pago de los reajustes de precios decretados por el Estado y trámites prolongados en la adjudicación de obras. Estos problemas burocráticos y la demora en los procesos han generado un complejo escenario para la empresa, lo que la ha llevado a tomar la difícil decisión de iniciar su proceso de liquidación.

    En un comunicado oficial, la firma expresó su deseo de acceder a una herramienta legal que permita la liquidación de sus activos, obtener el pago de lo adeudado por sus mandantes, resolver reclamaciones pendientes y atender a los acreedores. Además, reconocieron el apoyo recibido a lo largo de su trayectoria y lamentaron profundamente haber llegado a esta situación.

     

    MINISTRA DEL MOP

     

    Consultada sobre la situación de la empresa, la ministra Jessica López manifestó que es lamentable que una firma como Cosal, así como otras empresas contratistas del Ministerio, hayan quebrado durante este período. 

    “Hemos tenido eventos bien duros que han afectado, no sólo a las empresas privadas. Todo lo que implicó la pandemia y el impacto que significó en las cadenas logísticas mundiales, y el alza de los precios de los materiales de construcción, también han afectado”, manifestó López.

    Para la titular del MOP estas situaciones han tenido un impacto significativo en la operación, incluyendo el pago de reajustes de contratos que ya estaban en ejecución cuando se desató la pandemia. Para compensar, se han tenido que realizar ajustes importantes en la estructura de precios con la que el ministerio trabaja para adaptarse a los nuevos procesos.

    “Cuando una empresa quiebra o abandona una obra es para nosotros un problema bien grande. Hay una serie de procedimientos administrativos que tenemos que hacer para dar términos a esa obra y poder hacer un llamado licitación o una asignación directa. Pero, a veces no es un plazo corto. Las obras se van deteriorando y, por lo tanto, para nosotros, esto es un trastorno y una pérdida de valor muy grande para la obra que se está construyendo”, sostuvo la ministra del MOP.

     

    PROBLEMAS EN LA REGIÓN

     

    Tal como se detallaba al inicio de esta nota, el impacto de la quiebra de Cosal se ha extendido a importantes proyectos en diferentes zonas del país, y, la Región de Coquimbo no ha sido ajena a ello, pues se encontraba realizando las mencionadas escuelas en las comunas de Monte Patria y de Ovalle, por lo que existe incertidumbre sobre qué pasará en lo inmediato con estos proyectos una vez que se oficialice la quiebra de la firma.

    Al respecto, Alex Garrido, director regional de Arquitectura, sostuvo que hasta ahora, no tienen una confirmación oficial del tema, aunque sí reconoce la compleja situación que vive Cosal a nivel nacional.

    “Hasta hace dos semanas estaban con los tiempos estipulados en las dos obras de la zona y el estado de pago que correspondería. Nos sorprendió la noticia. que son problemas a nivel nacional”, sostuvo.

    En ese contexto, Garrido señala que no han tenido conocimiento de despidos de trabajadores, pero que , ante cualquier situación, la dirección de Arquitectura y el MOP tienen los instrumentos necesarios para abordar la situación de aquellos trabajadores que tengan posibles problemas con sus sueldos.

    Mientras que desde el MOP regional sostuvieron que, en consideración a las fuertes variaciones de mercado experimentadas tras la pandemia y con el propósito de restablecer los equilibrios económicos de los contratos de obras, el ministerio estableció, a través del DS 177, una medida excepcional, la cual permitió el pago de reajustes retroactivos para las empresas con contratos vigentes hasta el 31 de marzo de 2023. Es así como hasta la fecha, a nivel nacional, un total de 547 contratos han recibido este pago, por un monto total de 110.000 millones de pesos.

    En ese contexto, el seremi del MOP, Javier Sandoval, sostuvo que la empresa Constructora Cosal, contaba con contratos susceptibles a la aplicación de este reajuste, los que deben ser gestionados por mandato de los gobiernos regionales, radicando en ellos, la responsabilidad de gestionar la disponibilidad presupuestaria para la implementación de la medida de reajuste retroactivo. 

    En específico, la autoridad asegura que, en torno a los contratos de la escuela San Antonio de la Villa de Barraza de Ovalle, y la escuela de Concentración Fronteriza de Monte Patria, las cuales fueron mandatadas a la Dirección de Arquitectura por el Gore de Coquimbo, el ministerio realizó oportunamente todas las gestiones que la ley le faculta, tanto para la fiscalización de la correcta ejecución de las obras, como en la entrega de información necesaria para la aplicación del reajuste y gestión oportuna de los estados de pago. 

    Sandoval agregó que “como ministerio estamos llevando adelante una agenda de reactivación económica para que nuestras obras y contratos continúen. Reiteramos que estas noticias nos complican por el impacto en el empleo y también por las comunidades que ven sus obras abandonadas”, indicó. 

     

    PREOCUPACIÓN EN LOS MUNICIPIOS

     

    Respecto a la situación de la escuela fronteriza de Tulahuén, el alcalde Cristian Herrera de Monte Patria se mostró preocupado debido a que, desde hace algunas semanas, han recibido información del despido de trabajadores en las obras de la escuela, tras lo cual, habían quedado laborando sólo 32 trabajadores.

    “Tuvimos reuniones con el director de Arquitectura, quien nos explicó que efectivamente la empresa que lleva a cabo los trabajos está en situaciones económicas complejas, pero que, hasta el minuto, no declaraba aún la quiebra”, sostuvo el edil.

    Herrera reiteró que existe inquietud porque hay pagos pendientes que no se han realizado a proveedores locales, además de facturas impagas de hospedaje y movimientos de tierra.

    “De confirmarse la quiebra, ojalá Arquitectura pueda asegurar estos pagos y, segundo, que se liquide rápidamente el contrato de la empresa y se pueda licitar nuevamente para que en el corto plazo, esta obra se pueda desarrollar y por fin se venga a terminar una larga pesadilla que tienen los estudiantes de Tulahuén de no ver materializada su escuela”, afirmó.

    Respecto de las obras de la escuela de Barraza, que llevan un 95% de avance, desde el municipio de Ovalle señalaron que se han mantenido en alerta y en permanente contacto con la unidad de Arquitectura del MOP, que es el organismo que lleva adelante este contrato con la empresa, agregando que “el alcalde Jonathan Acuña se reunirá con el director de Arquitectura para tratar este tema en conjunto”.