Monte Patria conmemora la Semana de la Educación Rural con visita a distintas escuelas

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    El esfuerzo, la memoria e identidad son algunos de los aspectos que mantienen las escuelas rurales de la comuna de los valles generosos. 

    Cada 7 de abril se celebra el Día de la Educación Rural, fecha en que se recuerda, además, el natalicio de la profesora, poetisa y premio Nobel, Gabriela Mistral. Es por ello que la municipalidad de Monte Patria, a través del Departamento de Educación, realizó un recorrido por las 20 escuelas multigrado y 4 intermedias de la comuna con el fin de reconocer la labor de los y las docentes de establecimientos en zonas rurales. La visita comenzó el día lunes 8 de abril en la escuela La Variola de Cárcamo, la que contó con la presencia del alcalde Cristian Herrera Peña y el director del DEM Monte Patria, Jaime Castillo Boilet y la coordinadora comunal de escuelas multigrado, Keidy Castillo Pardo. 

    El tradicional y ovalado escudo nacional con el nombre de “escuela básica” yace a un costado la sala de clases. Cerca del portón de fierro, un perro observa amistosamente a quién entra al recinto. Son las 08.25 de la mañana y en la sala de clases, Millaray y Kindle -únicas estudiantes del recinto- esperan sentadas en sus pupitres para comenzar una nueva semana de clases. Ambas cursan quinto básico; para ellas vivir y estudiar en la escuela La Variola de Cárcamo es una experiencia única que disfrutan. 

     

    Los lunes, miércoles y viernes, tal como comentan las estudiantes, son trasladadas en vehículo, pero la travesía se torna más entretenida -desde su punto de vista- cuando deben hacerlo en un triciclo eléctrico, propiedad de una apoderada del establecimiento. Aquel medio es su vehículo de transporte los días martes y jueves. Kindle vive en la última casa del pueblo, a una distancia de 5km de la escuela. Ella, junto a su madre, sagradamente pasan a buscar a Millaray a su hogar, que queda a 3 km de distancia. “Es bonito estudiar acá, porque no hay niños, no molestan casi nadie. Me gusta estudiar acá, nos vinimos los jueves y martes nos venimos en un triciclo. Como nosotros vivimos en la última casa de acá, ella (Millaray) espera en el frente y la pasamos a buscar y nos vinimos a la escuela. En las tardes es divertido, porque llega viento y hacemos cosas como jugar. En la mañana no tanto, porque hace frío”, expuso, Kindle Olmos Rojas.

    Aunque a veces las condiciones no sean favorables en aquel territorio, las pocas familias que viven en este recóndito lugar de Monte Patria -y zona limítrofe con la comuna de Combarbalá- hacen un esfuerzo colosal para cumplir con la educación de las estudiantes. “Nosotros empezamos a funcionar a las 06.00 horas para que ellas puedan llegar en el horario que les corresponde, entonces, es grande el esfuerzo y se agradece harto la visita del alcalde, porque es una escuela donde hay muy pocos alumnos y a los estudiantes les hace muy bien la visita. Esto es gratificante, porque sabe que uno está pensando en el futuro de ellos, en su bienestar. A veces, nos cuesta un poco, sobre todo, el regreso en tiempos de verano, cuando hay calor, cuando el triciclo no puede trasladarlas, como son dos alumnas, nos turnamos e incluso hasta en caballo nos ha tocado venir a buscarlas”, indicó Carmen Villalobos, apoderada del centro educativo rural. 

     

    Chilecito conmemoró a doña Gabriela 

     

    Hablar de Gabriela Mistral, es hablar de educación rural. Y las comunidades escolares multigrados así lo perciben. La premio Nobel realizó clases en distintos establecimientos educacionales de Chile, tal experiencia logró transformarse en una corriente de pensamiento crítico sobre educación y cambios sociales; es más, en sus obras poéticas deja entrever el cariño y la añoranza por la educación en el campo, donde refleja la labor del docente rural. De esta forma, la figura de Mistral se torna en un referente para las actuales generaciones que imparten la docencia en zonas rurales. 

    Su vida y obra dejó un legado, dicha razón es suficiente para que la escuela Chilecito quisiera destacar por segundo año consecutivo este importante día con un acto escolar en que se realzó a la profesora rural y poetisa nacional la jornada del miércoles 10 de abril“nosotros conmemoramos este día, porque tenemos el sello de escuela rural. Acá no solo hay una muestra hacia la comunidad, sino que se enmarca dentro de una actividad pedagógica donde se trabaja en torno a su persona. Los estudiantes conocen su historia, su vida y el trabajo que realizó y conocen sus poemas principalmente”. 

    El sello de la escuela Chilecito, al igual que otros establecimientos de la comuna, busca vincular al tejido social de la zona, convirtiendo al establecimiento en una especie de plaza ciudadana que se retroalimenta cultural y socialmente. Esta nueva apuesta, que comenzó a implementarse desde el año pasado, ha dado buenos frutos en distintas comunidades educativas que volvieron a reavivar el espíritu comunitario. “Quiero felicitar a la comunidad educativa Chilecito; creo que se ha ido dando en este establecimiento con el nuevo director en términos de poder ir compartiendo los desafíos de la educación pública, en donde sean partícipes toda la comunidad educativa y sus padres, que sea una escuela abierta. Estamos volviendo a una escuela en donde seamos todos partícipes, donde las puertas estén abiertas para ir realizando arreglos y demandas que nos hicieron, donde hemos estado presentes viendo temas importantes como el cierre perimetral que tuvo un costo de inversión de 25 millones y vamos a seguir presentes, porque creemos en la educación rural”, indicó el alcalde Cristian Herrera Peña.

    Así como en Chilecito y Cárcamo, otros establecimientos multigrados e intermedios realizaron diversas actividades en torno a esta temática que pone en énfasis una educación cercana y personalizada en comunidades rurales.