Durante los periodos de del climaterio y la menopausia, la disminución de estrógenos no sólo provoca alteraciones físicas, como la variación del ciclo menstrual, sofocos y sequedad vaginal, también puede influir en la estabilidad emocional y en la percepción de la propia identidad.
Al respecto, la psicóloga del Hospital Provincial de Ovalle, Maricela Molina, entrega claves para comprender y abordar estos cambios con una mirada positiva y consciente.
UN PROCESO NATURAL, NO UNA ENFERMEDAD
La menopausia es un proceso biológico que todas las mujeres atraviesan en algún momento de su vida. Sin embargo, la manera en que se afronta puede marcar la diferencia en la calidad de vida. “Debemos entender y pensar que la menopausia no es ninguna enfermedad, sino más bien un cambio natural, parte del desarrollo de la mujer. Aceptar y visualizar este proceso de manera positiva permite reducir la angustia y mejorar la autoestima”, señaló la especialista.
En la misma línea, comentó que muchas mujeres experimentan síntomas como cambios en el estado de ánimo, ansiedad, insomnio, irritabilidad y sensación de vacío, sobre todo cuando los hijos dejan el hogar. Sobre este punto, la psicóloga destacó que “las fluctuaciones hormonales pueden generar un impacto emocional significativo. Es importante estar atentas a síntomas como la tristeza persistente o la ansiedad excesiva y buscar apoyo cuando sea necesario. Hablar sobre lo que se siente con alguien de confianza es clave”.
ESTRATEGIAS PARA EL BIENESTAR EMOCIONAL
Adoptar hábitos saludables y una actitud proactiva ante esta etapa es fundamental para mantener el equilibrio emocional. Al respecto, la profesional mencionó que “mantener una alimentación adecuada, realizar actividad física –sin necesidad de acudir a un gimnasio, sino adaptándola a los gustos y tiempos de cada una– y cuidar la higiene del sueño son pilares esenciales para el bienestar mental. También es importante educarse sobre la sexualidad en esta etapa y fortalecer el diálogo con la pareja”.
Si los síntomas afectan la calidad de vida, es fundamental acudir a un profesional de la salud. En este sentido, la experta resaltó que “pedir ayuda no es un signo de debilidad, sino de autocuidado. Un acompañamiento adecuado permite sobrellevar esta transición de manera saludable”.