Riñas, bullying, amenazas e incluso un intento de secuestro son algunos de los sucesos que han marcado el regreso presencial a clases en la Provincia de Limarí. Un retorno que se ha transformado en todo un desafío para las comunidades educativas, sobre todo por el incremento en los niveles de violencia en los establecimientos educacionales o que involucran estudiantes, lo que se reflejan en la gran cantidad de denuncias por diferentes delitos asociados que han ingresado en la Región de Coquimbo a Carabineros, de hecho, desde el inicio del año escolar a la fecha se ha recibido un total de 135 denuncias por hechos de esta naturaleza, que involucran a establecimientos educaciones o a estudiantes. En detalle, son 49 requerimientos por amenazas, 9 por daños y 77 por el delito de lesiones, las cuales se han remitido a la Fiscalía para ser investigadas.
Es por tal motivo que tanto a nivel central como en cada una de las comunas están realizando diferentes acciones que permitan controlar de alguna manera este incremento de la violencia, que, entre otros factores, se da por el regreso presencial tras dos años de modalidades remotas o híbridas con jornadas escolares reducidas y la disminución de habilidades socio emocionales, sumado al contexto familiar de cada estudiante.
“El aumento de la violencia al interior de los establecimientos educacionales es multicausal”, sostuvo a El Ovallino, Viviana Romero, psicóloga educacional, quien explicó que se pueden observar carencias afectivas como un factor gatillante de violencia, “es importante analizar las habilidades socioemocionales, es decir como los estudiantes se vuelven a relacionar con sus pares, como manifiesta su necesidad de ayuda, de apoyo, como reconocen sus propias emociones. Podríamos decir que este aumento en la violencia obedece a multicausalidad con un contexto familiar y una dinámica escolar que está tratando de volver a una pseudonormalidad y como podemos incentivar volver a relacionarse de manera sana al interior de los colegios y ahí tenemos que poner acento en el clima escolar y socioemocional que ocurre dentro de las salas de clases”.
ACCIONES
Durante la semana pasada en Ovalle y Monte Patria se desarrollaron actividades tendientes a enfrentar esta problemática, es así como el pasado 18 de abril en la comuna de los valles generosos se desarrolló una mesa de trabajo en el que participaron representantes de la comunidad educativa. También se han generado reuniones con el delegado presidencial provincial y Carabineros. “Como Departamento de Educación Municipal, conociendo las noticias a nivel nacional, inmediatamente pusimos en situación de alerta a todas las escuelas, se convocó a los directores para activar las duplas psicosociales y el encargado de convivencia, tuvimos una reunión con Carabineros y se llegó a un acuerdo (…)un patrullaje a la entrada y salida de los establecimientos, también establecimos comunicación con los centros de padres, hicimos una mesa especial con el delegado provincial presidencial enfocado específicamente a lo que es convivencia escolar”, indicó Jaime Castillo, jefe del Departamento de Educación Municipal (DEM) de Monte Patria, asegurando que, “la vuelta a clases ha sido compleja”.
Así mismo, en Ovalle, el 6 de abril se realizó jornada de trabajo con encargados de convivencia escolar de la comuna y el 20 una jornada de diálogo y colaboración con las redes de apoyo comunal, y que buscaba levantar información relevante para desarrollar el plan de trabajo comunal de convivencia escolar.
“Estamos generando estos espacios pues sabemos que es de vital importancia resguardar los derechos de los estudiantes, así como también asegurar el buen trato entre todos los integrantes de las comunidades educativas”, indicó el jefe del Departamento de Educación Municipal de Ovalle, Nelson Olivares. Por su parte, María Belén Araya, coordinadora del Programa Habilidades para la Vida I, expresó que “es muy relevante que se hagan este tipo de reuniones y que sea un trabajo que se proyecte y perdure en el tiempo. Es algo muy relevante para la gestión de todos los programas que trabajamos con los establecimientos educacionales de la comuna. Ha sido muy valioso el poder conocer la labor de todos los programas y articularnos para fortalecer el trabajo conjunto, entendiendo el objetivo en común que tenemos todos, que son nuestros niños y jóvenes”.
Además, en las próximas semanas se desarrollará una jornada que reunirá a los líderes estudiantiles de los establecimientos educacionales, para de este modo ir cerrando la primera fase de este trabajo que busca levantar información relevante para efectuar planes de trabajo efectivos para las comunidades educativas de la comuna.
FLEXIBILIDAD
Una de las respuestas originadas a nivel central fue la opción de reducir las jornadas de clases de los estudiantes, a través de una en resolución exenta publicada por el Ministerio de Educación (Mineduc), en el cual se estableció que los establecimientos educacionales podrán reducir el horario de las clases para avanzar hacia el funcionamiento regular hasta el 31 de mayo. En Ovalle, por ejemplo, son 12 los establecimientos que ya solicitaron esta reducción. “Algunos colegios comienzan con la reducción de jornada y de a poco, como se extendió el plazo hasta el 31 de mayo más escuelas lo van a ir solicitando, porque es un tema a nivel nacional”, sostuvo Natalia Reyes, presidenta del Colegio de Profesores de Ovalle, quien aseguró que la jornada de los profesores continúa de manera normal, “nuestra jornada de trabajo sigue igual, los únicos que reducen su jornada son los estudiantes”.
“Los niños estuvieron dos años fuera de las aulas y volvieron de repente a clases, con jornada completa, uso de mascarilla, eso yo creo que ha ido generando el tema de la violencia, la irritabilidad, la poca tolerancia entre los mismos estudiantes, nosotros como profesores estamos bien preocupados, porque aparte del desgaste físico que uno tiene de cuando hace las clases, estamos muchos profesores haciendo hasta tres cursos en uno porque hay estudiantes que están necesitando refuerzo, muchos del primer ciclo que no saben leer, entonces estamos volviendo atrás, manejando cursos con estudiantes con niveles diferentes. El apoyo de los apoderados además no ha sido el esperado, hemos tenido problemas con la tolerancia y el respeto que los apoderados debiesen tener con el profesorado como se tenía antes, no se ha reflejado en esta vuelta a clases”, indicó Reyes, quien si bien espera que la reducción sea de ayuda, también analizó otras medidas, “yo creo que todos los profesores y profesoras estamos buscando diferentes estrategias, no enfocarnos tanto en el ámbito pedagógico y tratar de realizar pausas activas, conversar con los estudiantes, muchos de los cuales vienen con una carga emocional súper grande desde sus casas, nos hemos encontrado con realidades que tal vez antes de la pandemia no encontrábamos, mucha frustración, poca tolerancia a la frustración y como profesores hemos estado buscando otras formas de canalizar esa rabia interna que tienen algunos estudiantes, conversando con ellos, tratando de hacer el ambiente acogedor”·