“La uva de mesa Flame Seedlees está sufriendo una de las peores crisis de la historia”.
Así reza el comienzo de la declaración pública que los productores de uva de mesa de Monte Patria y Vicuña, en la provincia del Elqui, dieron a conocer el día de ayer a los medios de comunicación, y que busca darle visibilizar la grave crisis económica que afecta al sector.
Con precios que bordean los 6 dólares el envío, y con el número de cajas embarcadas durante el pasado mes de enero con cifras negativas, los productores no han podido cubrir sus gastos operacionales anuales, a lo que se suman dos temporadas consecutivas de malos retornos, todo lo cual, ha derivado en la actual crisis.
A eso, hay que agregarle la fuerte competencia que otros mercados como Perú y Estados Unidos (el principal destino de la producción nacional) representan para la uva nacional, pues por ejemplo, en el caso del vecino del norte, “cuenta con un mayor número de nuevas variedades, las que son más productivas y con menos costos por hectárea” señalan los productores en el comunicado.
Todas estas condiciones adversas han generado que la actividad se vuelva insostenible en el tiempo, lo que ha implicado una disminución de las hectáreas cultivadas. Sólo en Monte Patria, se han perdido 790 hectáreas, pérdida que a nivel regional, alcanza los 50 millones de dólares.
¿QUÉ SE PUEDE HACER?
Esta situación llevó a que un grupo de productores montepatrinos, acompañados por el alcalde de la comuna, Camilo Ossandón, junto a otros productores del Elqui, se reunieran ayer con la intendenta Lucía Pinto y el seremi de Economía, Luis Arjona, para avanzar en un plan para ir en rescate de los agricultores.
“Esta fruta ya no tiene cabida en el mercado. Esto va a afectar al menos, a 3 mil empleos, con lo que eso conlleva: hay niños estudiando, quienes a lo mejor no van a poder pagar su universidad” expresa Juan Carlos Laguna, productor de uva flame de Monte Patria.
Este agricultor insiste en que hoy todos los productores se encuentran fuertemente endeudados, primero por lo que significó la sequía para ellos, y ahora por la caída de los precios de sus productos. “Todo esto está muy complicado. No tenemos mucho tiempo para solucionar este problema, esto tiene que ser luego”.
Palabras que son ratificadas por el alcalde de Monte Patria, Camilo Ossandón, quien afirmó que “la uva de mesa ocupa un lugar esencial en el desarrollo de económico agrícola de la región por lo tanto, lo que está pasando hoy día tiene carácter de catástrofe. No es algo menor”.
En ese sentido, la situación es tan grave que los productores proponen tomar una serie de medidas en el corto y mediano plazo.
Es así como en el corto plazo, los agricultores piden impulsar un programa de Capital de Trabajo, con el fin de reactivar la producción y asegurar así, la elaboración de uva flame bajo la modalidad de fruta deshidratada (pasas).
Para ello, piden además, la entrega de una asesoría técnica especializada en producción de uva de mesa para pasas, además de una asesoría comercial para la venta de pasas, ya sea para exportación o consumo interno.
Para el mediano plazo, los agricultores solicitan avanzar en el proceso de reconversión de variedades, pero de forma escalonada, de manera de que los productores no pierdan su solvencia económica. Además, solicitan un estudio y asesoría técnica, frente a la utilización de nuevas variedades de uva y búsqueda de nuevos mercados de exportación.
EL ITINERARIO
Tras la reunión, las partes coincidieron en reconocer que es necesario y urgente ir en ayuda de los productores afectados, pues los agricultores afectados por este problema concentran el 65% de la producción de uva de mesa de la región.
En ese sentido, el seremi de Economía, Luis Arjona, señaló que se le solicitó al municipio de Monte Patria y Vicuña un catastro de los agricultores afectados por los precios de la uva flame, de manera de ir con los recursos necesarios en ayuda de los productores a través de líneas de emergencia de organismos como INDAP, INIA y Corfo, y también a través de instituciones como BancoEstado y la banca privada.
“Ya tuvimos una primera reunión con BancoEstado y les explicamos que el banco estaba dispuesto a atender en primer lugar, a sus clientes. Pero también, el banco estaría dispuesto a evaluar caso a caso, a todo aquel agricultor que, no siendo cliente de BancoEstado, se podría analizar su caso” afirmó el seremi.
La autoridad anunció además que, en relación a todos aquellos agricultores que son clientes de la banca privada, se mantendrán conversaciones para lograr mayor flexibilidad crediticia, en cuanto a establecer líneas de crédito con mayores periodos de gracia en termino de pagos de intereses y capital. “Y en los casos que sean necesarios, vamos a inyectar las garantías reciprocas que están incorporadas dentro de la Corfo” agregó.
Por último, el titular regional de la cartera, señaló que se tomará en consideración el proceso de reconversión productiva, buscando darle mayor valor agregados a la uva, pero de forma paulatina.
“La idea es ir reconvirtiendo, paso a paso, ir incorporando en un horizonte de 5 años un 100% de reconversión y a la vez, ir generándole a los agricultores, unidades de negocios, a través de la producción de pasas” señaló Arjona, un tema que ya se está abordando con la Sociedad Agrícola del Norte.
“Si bien no hemos llegado a una solución concreta, pero si al menos se ha avanzado y ha sido buena la acogida. Este es un camino que hay que hacerlo y lamentablemente no tenemos mucho tiempo” concluyó el productor Juan Carlos Laguna.