Con 7 mesas integradas por diferentes sectores de la ciudadanía partió el encuentro participativo inicial del plan de gestión del TMO, convocatoria que busca dialogar en torno a la herramienta de gestión que servirá de guía para la administración del teatro municipal de Ovalle hasta el 2028.
Con 6 ejes de gestión enfocados en la diferenciación, calidad, sustentabilidad y acceso a la programación del principal escenario regional, se busca conocer el estado de diferentes ámbitos y así, rediseñar las estrategias de administración de los recursos aportados por el programa Red Cultura del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Al respecto, el director ejecutivo de la Corporación Cultural Municipal, Ifman Huerta Saavedra, señaló que “lo importante de poder actualizar las herramientas de gestión es que nos permite tener un diálogo cercano con diferentes territorios, tuvimos mesas del sector rural, urbano, estudiantes, público, artistas, gestores y cuando llegamos al plenario nos dimos cuenta que todos tienen opciones de mejoras diferentes y toda esa diversidad de visiones nos permiten vislumbrar que vamos a tener un bonito plan de gestión para los próximos 4 años”.
La participación ciudadana en esta instancia se garantizará a través de dos maneras, la primera es la conformación de las mesas de trabajo especializadas en temáticas relevantes para la gestión cultural y también, a través de una encuesta ciudadana en formato digital para recopilar información de los habitantes que no puedan asistir presencialmente pero que quieran participar de este proceso.
“La información que dieron fue muy clara y concisa, con un método innovador que fue fácil de aplicar, se agradece que también nos tomen en cuenta y se dieron diferentes opciones, lo que es muy importante para la gestión del TMO” indicó Marisol Araya, integrante de la mesa de artistas, cultores y gestores de la comuna.
Génesis Muñoz, integrante de la mesa de público regular y fidelizado del TMO agregó que “Son interesantes estas instancias que se abren por parte de la organización y la disposición que tienen para involucrar a las comunidades a los distintos espacios culturales, es algo que no se ve habitualmente”.
La etapa que le sigue a este primer encuentro se determina “mesas de co-diseño”, una instancia donde los participantes se vuelven a reunir para hacer un trabajo de diálogo enfocado en sus propias experiencias y necesidades.