No es desconocido para nadie que conduzca algún vehículo, las continuas alzas que en las últimas semanas han registrado los combustibles a nivel nacional.
Por ejemplo, el pasado día jueves, las bencinas registraron su octava alza consecutiva superando en varias comunas del país la barrera de los 1.000 pesos por litro. Así, la gasolina de 93 y de 97 octanos, así como el diésel, registraron un incremento de 5,8 pesos por litro. Por su parte la parafina aumentó 20,7 pesos por litro.
Todo esto se traduce en un nivel de gasto que para muchas personas que utilizan sus vehículos, especialmente para trabajar, les resulta insostenible sobrellevar.
En dicho contexto, el gremio de los camioneros volvió a sacar la voz ante dichas alzas, reapareciendo como en otras ocasiones, el fantasma de una eventual movilización del gremio a nivel nacional. De hecho, durante el día de ayer, los camioneros de la Región de Magallanes actuaron por su cuenta y cortaron tres rutas estratégicas de esa austral región. Una “advertencia” clara y directa que vino desde el sur, pero que podría tener efectos en todo el gremio a nivel nacional, Ovalle incluido.
PARO SÍ Y NO
Durante este sábado pasado, representantes de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones, encabezados por su presidente, Juan Araya, estuvieron reunidos en Rancagua para analizar las medidas que se estudian con respecto al alza de los combustibles, además de otras situaciones que les preocupa como el impuesto específico a los combustibles, la propuesta de modernización tributaria que el gobierno envió al Congreso, entre otros.
En ese sentido, se ha privilegiado hasta ahora el dialogo con las autoridades como primera opción, aunque la posibilidad de llegar a realizar un paro, no está descartada.
“Mientras no haya una respuesta que sea positiva, no le quepa duda que va a haber un movimiento más o menos poderoso” aseguró el presidente de la Asociación de Camioneros Ovalle-Limarí, Guillermo Fernández, aunque aclaró también que en estos momentos, “preferimos agotar el dialogo, antes de tomar una determinación tan drástica como un paro”.
Fernández señaló que hasta el momento no han recibido información sobre lo discutido en el ampliado del gremio realizado el sábado, pero la idea -por el momento- es “siempre conversar y conversar, antes de hacer una movilización, porque hacer un paro es complicado. Siempre se sabe cuándo comienza un paro, pero no se sabe cuándo termina y cómo termina. Además a nosotros mismos nos afectaría también, pues para muchos de nosotros, que somos medianos y pequeños empresarios, el camión es nuestro único capital de trabajo”.
El dirigente gremial reconoció en todo caso que “en este momento, producto del aumento de la bencina, hay un deterioro muy grande en nuestra economía. Nosotros somos microempresarios, tenemos uno o dos camiones, máximo tres camiones. Ese es nuestro capital. No somos una empresa grande que tiene desde 200 a mil y tantos camiones” argumentó.
ESTUDIAN MEDIDAS
Desde el gobierno, el propio Presidente Sebastián Piñera se refirió al tema, manifestando que "estamos estudiando la posibilidad de algunos cambios para los impuestos a las gasolinas y el diésel, pero no hago promesas. Lo estamos estudiando y no tengo una respuesta (más concreta) en este momento" señaló.
En ese sentido, vuelve la eterna duda para enfrentar las continuas alzas de precio de los combustibles: ¿acabar o modificar el Impuesto Específico a los combustibles o modificar el MEPCO?
Cabe recordar que el impuesto específico comenzó a aplicarse a partir de 1986 al consumo de gasolinas automotrices, petróleo diésel, gas licuado de petróleo de consumo vehicular y gas natural comprimido de consumo vehicular. Su objetivo inicial: financiar la reconstrucción de caminos y carreteras producto del terremoto del 3 de marzo de 1985 que afectó a la zona central del país.
Por su parte, el MEPCO (Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles) fue creado en 2014 y opera a través de aumentos y rebajas al impuesto específico de los tres combustibles de uso vehicular (gasolina, diésel y gas de uso vehicular).
En ese sentido, el diputado Matías Walker planteó al gobierno incluir una modificación al impuesto específico al combustible en la Reforma Tributaria propuesta por el ejecutivo, incorporando el concepto de “equidad tributaria”.
“Debemos evaluar el mecanismo de estabilización de precios de los combustibles, el MEPCO propiamente tal, que ha sido absolutamente insuficiente para detener esta alza sostenida en el precio de los combustibles” señaló el parlamentario, quien planteó además, la posibilidad de convocar a una sesión especial en la Cámara de Diputados para analizar este tema, sesión a la cual estaría citado el Ministro de Hacienda, Felipe Larraín.
“Queremos aprovechar la oportunidad de plantearle al ministro de hacienda que en el marco del proyecto de ley de modernización tributaria, podamos revisar la inequidad que existe entre la aplicación del impuesto específico a los combustibles hacia las empresas, que pueden deducir el pago como gasto. También el caso de las mineras que hoy no están pagando este impuesto específico de los combustibles; versus las familias que no pueden deducir como un gasto lo que pagan por las bencinas” aseveró.
El legislador insistió en que el gobierno debe intervenir en este tema, pues “el fondo de estabilización de los combustibles reporta cerca de 46 a 50 millones de dólares en términos anuales versus un impuesto específico en los combustibles que recauda 2 mil millones de dólares, lo cual claramente genera un efecto de injusticia desde el punto de vista fiscal” indicó.
Cabe señalar que el gremio de camioneros propuso al gobierno un plan para establecer una variabilidad entre el petróleo y el valor del litro de combustible cada tres meses y no todas las semanas, como es el proceso actual, rechazando además, eventuales propuestas como subir el impuesto específico al diésel para equipararlo con el aplicado en la gasolina.