Para el próximo 8 de julio está fijada la fecha del término del contrato de las obras de la Ruta D-43 que conectará a Ovalle con las ciudades de Coquimbo y La Serena.
Esto quiere decir, que a partir de esa fecha, la flamante nueva carretera de doble vía que promete disminuir entre 20 y 30 minutos los tiempos de desplazamiento entre una ciudad y otra, debería ser puesta en servicio para su uso.
Recordemos que la empresa ejecutante es la firma Sociedad Concesionaria Ruta del Limarí S.A. (Sacyr), la que se adjudicó este contrato de concesión el 31 de mayo de 2013. Éste tendrá una duración de 30 Años (360 meses) y la inversión estimada supera los 200 millones de dólares.
En ese sentido, la carretera presenta ya un notorio estado de adelanto que está a punto de culminarse, pues como señala el seremi de Obras Públicas, Pablo Herman, hasta el momento, las obras registran un 95% de avance “y un poco más” afirma.
“Eso según lo convenido y lo contratado. Como fecha límite del contrato está fijado el 8 de julio próximo. Y ahí estaría lo que es la puesta en servicio de la ruta D-43” sostiene el seremi.
PREOCUPACIÓN DE LOS VECINOS
Con las obras a punto de completarse y a un mes de entregar y poner en servicio la ruta según el contrato vigente, se mantienen sin embargo, algunas preocupaciones y problemáticas que vecinos de localidades aledañas a la futura doble vía han hecho llegar a las autoridades.
Éstas, según el titular de la cartera de Obras Públicas, tienen que ver básicamente, con los accesos poco expeditos que tendrían algunas localidades para entrar y salir de la ruta, así como las distancias que habría entre algunas pasarelas y el lugar de residencia de las personas.
Ante estas demandas que las comunidades han hecho llegar a las autoridades, tanto el seremi de Obras Públicas como el Gobernador del Limarí, Darío Molina, han decidido llevar a cabo una “visita inspectiva” para este domingo, “de manera de atender en terreno las preocupaciones de los vecinos. Tenemos que estar con la gente en terreno para poder dar respuestas y soluciones” señala.
Un ejemplo de ello fueron las demandas que manifestó la comunidad de Lagunillas, producto de los problemas que se presentaban en el sector del acceso a la ruta que va hacia Río Hurtado “donde me acerqué y en el fondo, dimos solución a unos requerimientos que ellos habían solicitado”.
¿POSIBLES ATRASOS?
Lo cierto es que ante este panorama, y teniendo en cuenta que sólo faltaría un mes para la entrega de la carretera, surgen pues, los naturales cuestionamientos sobre si estas demandas de los vecinos que viven a la vera de la ruta D-43 podrían generar algún atraso en su puesta en marcha.
Al respecto, el seremi de Obras Públicas, Pablo Herman, aseguró que lo primero será verificar junto a los vecinos, si las demandas que ellos expresan pueden tener una rápida solución, dejando en claro que “se tratará de llevar solución a todas sus solicitudes”.
En ese sentido, la autoridad aseguró eso sí, que una vez recabada la información, ésta tendrá que analizarse y conversarse “a nivel central” con el área de Concesiones del MOP, de manera de dar una pronta y adecuada respuesta a lo pedido por las comunidades.
En caso de determinar la construcción de obras anexas, Herman señaló que éstas “podrían hacerse perfectamente después de la puesta en marcha, o también, antes de la puesta en servicio de la ruta. Pero eso depende de la conversación que yo tenga el día lunes 18 con Concesiones”.
De todas formas, la autoridad aseguró que se hará todo lo posible por cumplir con la fecha establecida en el contrato para entregar la vía. “Ahora, si las problemáticas son mayores, ahí veremos exactamente, cuál va a ser el mejor camino para responder a las inquietudes de los vecinos, lo que se decidirá con el coordinador de Concesiones a nivel central” explicó.
Sin embargo, el titular de la cartera reconoció que existe “una presión para operar rápidamente la ruta, porque en el fondo, de esa manera podemos entregarles mayor seguridad a los automovilistas” indicó, teniendo en cuenta además, la alta cantidad de accidentes fatales que registra dicha vía, por lo cual durante algún tiempo, dicha carretera fue conocida como “la ruta de la muerte”.
Por lo mismo, el seremi Pablo Herman insistió en que será importante la inspección que, junto al gobernador del Limarí, realizarán este domingo, pues de lo que puedan observar y sacar en limpio con los vecinos, se podrá decidir los próximos pasos a seguir para concretar esta anhelada obra vial.