Durante la tarde de este martes los cuerpos de Roberto González Muñoz (47), su esposa Viviana Aguilera Ortega (40) y sus hijos Matías González Aguilera (16), Sebastián González Aguilera (13) y Constanza González Aguilera (10) fueron trasladados desde el Servicio Médico Legal (SML) de Ovalle a la Región de O’Higgins, luego que la familia falleciera en un accidente vehicular en la Ruta 5 Norte, a la altura de Quebrada Seca.
Los féretros fueron recibidos por sus cercanos y amigos de la villa Laguna El Inca, en Rancagua, ciudad a la que se dirigían luego de veranear en La Serena.
Sobre las causas del violento impacto del vehículo Mahindra Scorpio, patente FT XJ-18, contra la parte posterior del camión frigorífico que transportaba uva al puerto de Valparaíso, y que estaba estacionado en la berma, se presume que la pérdida de control sería una de las hipótesis de lo sucedido.
El fiscal a cargo de la investigación, Jaime Rojas, expresó que “solicitamos que un perito mecánico, especialista, de la SIAT de Santiago llegara a realizar algunas pesquisas en los vehículos involucrados con el fin de determinar las causas del accidente”.
No obstante, el persecutor indicó que tras el chequeo preliminar del camión y el carro que terminó completamente destruido se logró determinar que el conductor del jeep habría perdido el control al momento del impacto, ya que transitaba por fuera de la carretera.
Tras dada a conocer esta tesis, a través de las redes sociales llegaron varios comentarios sobre el tema. Fue el caso de un camionero que aseguró ser testigo del violento impacto.
El Ovallino se logró contactar con Osvaldo Hidalgo, quien aseguró que a la hora del accidente (17.20 horas) del lunes él conducía un vehículo de carga desde Tongoy a La Calera, cuando vio el choque.
“Yo venía bajando la cuesta cuando este jeep plomo me adelanta a mí y adelanta al camión que venía delante, el jeep venía muy rápido, calculo a unos 120 kilómetros por lo menos, nos sacó un kilómetro de distancia. Este conductor nos adelantó, iba por la pista izquierda y después se posesionó la pista derecha.
Después se abrió de nuevo para adelantar al otro vehículo que venía delante de él, era un camión frigorífico, entonces ahí se posicionó detrás del camión y se tira hacia la izquierda para intentar pasarlo, ahí había otro vehículo, debiéndose pasar sorpresivamente a la pista derecha encontrando al camión estacionado de repente”, indicó Hidalgo.
El chofer agregó que “al parecer el conductor del jeep vio la berma como otra pista, ya que mientras adelantaba las dos vías de la carretera estaban ocupadas. Por lo menos él viajaba 120 kilómetros por hora, a mí me pasó cuando iba en la cuesta, yo manejaba a unos 80 (kilómetros) en mi camión automático.
Yo me fijé que no alcanzó a frenar, el jeep se encontró con el camión, de hecho antes del choque no vi las luces de freno encendidas”.
Tras ocurrido el impacto de alta energía, Hidalgo sostuvo que “yo me bajé, vi lo ocurrido y quedé muy mal, hasta ayer (martes) todavía tiritaba, de hecho al bajarnos con otro chofer de un camión nos miramos y nos preguntamos qué había pasado, ahí vimos corriendo a un joven con un menor que llevaban un bidón de agua y lo saltaron, ahí se agarraron la cabeza, creo que era el conductor del camión”.
LA INVESTIGACIÓN
El Ministerio Público ordenó a la Sección de Investigación de Accidentes en el Tránsito (SIAT) de Carabineros continuar con las indagaciones de lo ocurrido.
El capitán encargado de la SIAT Coquimbo, Julio Salgado, informó a este medio que “todavía estamos desarrollando los trabajos investigativos, nosotros aún estamos con pericias pendientes, dado la complejidad y circunstancias del accidenté, hay pericias mecánicas que necesitan ser indagadas en detalle, y para eso los vehículos aún están a disposición nuestra, así que los peritajes siguen. Conclusiones de la dinámica y la causa basal son parte aún del proceso investigativo y no han sido informadas al Ministerio Público porque no está finiquitada”.
Salgado comentó que “el proceso investigativo se enfoca en 4 fases indagatorias. La primera está vinculada a las condiciones de la vía, esto quiere decir verificar el estado de la calzada, el diseño de la vía, desperfectos y señaléticas. En segundo término el proceso investigativo se enfoca en las condiciones mecánicas de los vehículos que participan. El tercero corresponde al punto de vista del conductor y por último están todas aquellas situaciones que pudieran haber influido en su conducción. Todo esto concluye para generar una conclusión única que se llama dinámica de causa basal del accidente.
Por lo pronto aún tenemos diligencias restantes que realizar al conductor y en relación con las pericias mecánicas. El vehículo menor está dañado casi por completo, por lo tanto, las pericias mecánicas se harán más dificultosas.