Valentina Núñez / Monte Patria
Por medio de la gestión de la Municipalidad de Monte Patria, se llevó a cabo la Primera Feria del Libro de la comuna, realizada en la Plaza de Armas de la localidad. Una actividad que tuvo como principal objetivo dar visibilidad a autores de la comuna, gestores culturales que con esfuerzo han editado e impresos sus libros de manera independiente, como la escritora local Sandra Castillo, quien presentó su libro “Para que no se me olvide”, el cual relata historias sobre su niñez en la localidad de Tulahuén.
El evento tuvo una duración de cuatro días y contó con una variedad de stands editoriales y una programación que contempló en su itinerario más de diez presentaciones de libros, actividades infantiles, actividades para adultos, cuentacuentos, conversatorios y diversas presentaciones musicales de artistas locales, regionales y nacionales, ya que a través de la lectura y la escritura también se han compuesto e interpretado importantes temas musicales.
Al respecto, el alcalde de la comuna, Cristian Herrera, hizo un balance de la actividad, señalando que ¨la experiencia superó las expectativas que teníamos. Fue una iniciativa que nació apenas asumí como alcalde, ya que junto a mi equipo presentamos un proyecto para hacer esta Feria del Libro y no nos fue bien, así que decidimos hacerlo con recursos propios. Se hizo con el corazón y el resultado fue exitoso, es sin duda una instancia para acercar la literatura y la conversación a cada una de las familias de Monte Patria”.
Actividad de cierre
La noche del sábado once de junio fue la culminación del evento, que contó con la participación de la periodista científica con maestría en Arte, Fresia Castro, quien escribió libros como El cielo está abierto, publicado en 2001, Surameris y el cofre de los secretos, su segundo título, que ha estado en las listas de bestsellers en América Latina. Castro actualmente imparte conferencias y seminarios alrededor del mundo como presidenta de Cyclopea Worldwide, una organización dedicada a promover técnicas para la automaestría.
Castro se mostró muy agradecida por la invitación y señaló que “me alegra muchísimo ser parte de la Primera Feria del Libro en Monte Patria, porque para alguien que no conoce la comuna, estuvo lleno de sorpresas. Es un lugar especial con gente especial, donde me he encontrado con personas bullentes de creaciones. Yo creo que esto es ancestral, que esto viene de las grandes creaciones que nos heredaron y que hoy hemos podido ver a nivel de artesanía, literatura, música y pintura”.
Quien también formó parte de la jornada de cierre, fue el crítico de cine, presentador de televisión y publicista, Juan Andrés Salfate, conocido por difundir teorías no comprobadas sobre un nuevo orden mundial, apocalipsis, fantasmas y diversos temas paranormales y controversiales. Salfate agradece la invitación a la actividad y señaló que “cuando recibí la invitación a participar en la Primera Feria del Libro de Monte Patria junto a Fresia Castro, dije que sí, absolutamente, así que gracias al municipio por organizar esto, porque fue maravilloso, deberían hacerlo dos veces al año”.
Proyecciones a futuro
Debido al éxito de la primera edición de la Feria del Libro en Monte Patria, el alcalde de la comuna se mostró optimista en cuanto a una próxima versión de la actividad, indicando que “estoy contento de ser parte de la historia con este evento, así que seguiremos haciendo ferias del libro y además veremos la posibilidad de abrir un fondo editorial el próximo año, para fomentar que nuestros escritores puedan imprimir y editar sus publicaciones, porque siempre es importante acercar la literatura a las familias”.
Sin lugar a dudas la Feria del Libro marcó un hito en cuanto a actividades culturales en la comuna, un anhelo que por años tuvieron los vecinos y vecinas de Monte Patria y que gracias al esfuerzo del municipio se pudo concretar. Un espacio para promover y compartir la lectura, resaltar la literatura y el conocimiento, claves para el desarrollo personal, ya que los libros, de cualquier género o categoría, enriquecen culturalmente y desarrollan más confianza en las personas, además de brindar nuevas perspectivas de distintos temas del mundo y romper con aquello que antes se concebía como límite.