En la Región de Coquimbo se tiene una percepción de que este ha sido un verano más caluroso de lo habitual, lo que ha sido confirmado por los expertos en el tema.
Así lo señala por ejemplo el meteorólogo Cristóbal Juliá, “se comenta que este verano ha sido más caluroso de lo normal, y eso es efectivo, de hecho según información internacional de los organismos internacionales, enero se caracterizó por ser el enero más caluroso de este siglo y muchos años, esto a nivel global; mientras que a nivel local, según los datos de estaciones meteorológicas registrada, enero fue más caluroso de lo normal en 1,5 grados aproximadamente. Quizás las temperaturas máximas no han llegado tan arriba, pero sí en el promedio ha estado más caluroso”, indicó.
En cuanto a las causas de esta situación, el experto declara que “la explicación de esto tiene relación principalmente con el calentamiento global, pero también con los efectos del fenómeno de El Niño”, agregando que “desde el año pasado, desde septiembre aproximadamente, comenzó una fase de El Niño que tiende a subir las temperaturas en el Chile central, y eso daría explicación a por qué este verano ha estado más caluroso de lo normal.
Para graficar esto, Cristóbal Juliá enumera los sectores de la región que han presentado las más altas temperatura en este verano, “siempre son las comunas precordilleranas las que presentan los valores más altos, está Vicuña, Paihuano, Monte Patria, Combarbalá y Salamanca. Por ejemplo en Salamanca se han registrado 37°, en Monte Patria 38°, lo mismo en Combarbalá, pero la comuna que ha registrado la temperatura más alta ha sido Vicuña con 39°. En el resto de la región, como Ovalle y Río Hurtado, hay temperaturas que superan los 30°, pero no han llegado tan arriba”, puntualizó.
PRONÓSTICO INCIERTO
Otra de las grandes preocupaciones en la región son las eventuales precipitaciones que se puedan generar en la zona, y es que rubros como el agrícola y ganadero caprino se han visto amenazados por la grave sequía que se arrastra desde hace por lo menos 10 años. La situación es tan crítica que incluso peligra el agua para consumo humano en los sectores rurales.
Ante esta inquietud, el meteorólogo Cristóbal Juliá explica que el pronóstico de lluvias es incierto este año, “todavía no se sabe qué va pasar con las lluvias, el fenómeno de El Niño está en plena retirada, y se espera que en abril de este año pasemos a una fase neutra, y por allá en septiembre se comience a desarrollar el fenómeno de La Niña, que es ausencia de precipitaciones”, explicó.
“Como estos dos fenómenos se están desarrollando y declinando en épocas en que la Región de Coquimbo está en su plena estación seca, es decir que no llueve, no se puede decir a ciencia cierta -por ahora- cómo se viene el presente invierno, y si va ser lluvioso o no. Recién después de la primera quincena de marzo se puede hacer una proyección de lo que va ser el invierno respecto a las lluvias en la región”, agregó.
Ante la pregunta de factores que pudiesen incidir en el pronóstico de lluvias, Juliá declara que “lo principal es cuánto va durar el fenómeno de El Niño, si este fenómeno se extendiera más allá del mes de abril, podríamos tener un inicio de invierno más lluvioso de lo normal, es lo que uno esperaría. Sin embargo, hay otros factores que están influyendo, como la oscilación del sur, la oscilación de Madden Julian, entre otras, que son anomalías de duración más corta, mensuales y semanales. Entonces son muchos los factores que pueden influir cuando entramos en una fase neutra, por lo tanto habrá que analizar distintas oscilaciones, para ver si se viene un invierno lluvioso o no”.
No obstante, para cerrar recalcó que “el fenómeno de El Niño es el principal factor que influye en las lluvias, y se espera que este no esté en efecto en invierno, desde ese punto de vista no se puede adelantar que pasará el próximo invierno”.