A nivel nacional el 18 de mayo se conmemora el Día Contra la Explotación Sexual Comercial Infantil, por tal motivo durante la jornada de ayer el Centro Amulén se tomó la Plaza de Armas de Ovalle, para entregar difusión a la comunidad en general frente a esta temática que afecta a la sociedad y que muchos no observan o desconocen.
Esta iniciativa estuvo liderada por los diversos profesionales que se desempeñan en este programa de intervención integral especializada, que se ubica en calle Independencia n° 71, impulsada por la ONG Paicabí y que es financiado por el Servicio Nacional de Menores (Sename), para entregar atención a situaciones de alta complejidad psicosocial en la provincia del Limarí.
“Somos un centro de apoyo y promoción a la infancia y adolescencia, acreditados como apoyo del Sename y esta es una intervención urbana para poder sensibilizar a los ovallinos respecto a la explotación sexual a niños, niñas y adolescentes, que es una problemática bastante invisible, una verdad que mucho ven pero no reconocen. Y cuesta mucho que los menores se perciban como víctimas o la gente confunde con prostitución, no hay conciencia que son menores de edad y ser así existe una condición de explotación y de un delito”, aseguró Carol Viogorena, directora del Centro Amulén.
Comunidad
En tanto, la comunidad que se interiorizó de esta temática y agradeció la información entregada, en especial las transeúntes que son madres. “Esto es bueno para tener mayor cuidado con los hijos, pero también creo pueden instar a que otros lo hagan. Hay que tener mucho cuidado especialmente con los menores de la vida de campo que andan más libres y no hay mucho cuidado”, aseveró Verenice Órdenes.
La actividad contó con diversos escritos realizados por menores afectados con este delito y que fueron expuestos en el principal centro neurálgico de la comuna. Las estadísticas de este tipo de hecho no son muy abocadas y solo existen estudios desde el año 2003, que indica que existen alrededor de 4 mil niños en Chile víctimas de este abuso.
“En Ovalle en lo que ha transcurrido el año hemos atendidos 5 casos, que no tienen un buen pronóstico pero son niños que sufren y que requieren de apoyo psicosocial y eso lo consiguen en el Centro Amulén. Son adolescentes con promedio entre los 13 y 15 años y des”, enfatizó Carol Vigorena.
Ovalle
La misma directora asegura que desde el 2010 cuando el centro abre sus puertas, se han detectado como promedio por año un total de 10 casos lo que es variable, cantidad que en verdad no refleja la realidad que se debe atender.
Las denuncias de quienes conozcan o tengan alguna duda frente a este tema, son evaluadas por el Amulén para verificar si corresponde al perfil que ellos se orientan para poder dar un debida atención de calidad.
“Generalmente los niños llegan derivados desde un tribunal y de alguna de las redes que trabajan en tema de infancia y las denuncias espontáneas de la comunidad o las sospechas, pueden hacerlas en el mismo centro, se efectúa un despeje de ingreso y se aplican pautas de riesgos, de diagnósticos y se va viendo la realidad del afectado”, subrayó la directora.
Este delito de comercialización sexual infantil, presenta distintos tipos de indicadores o síntomas sociales, como por ejemplo puede ser víctima un menor que es invisible y que no muchos prestan atención, niños en condición de calle, con un alto consumo de tipos de drogas, no escolarizados o también puede visualizarse en las familias cuando sus hijos sin tener recursos llegan con vestimenta cara y nueva, o por niños y niñas que frecuentan lugares con adultos o que viajan mucho con ellos. Todos indicadores que pueden ayudar a detectar si algún niño, niña o principalmente adolescentes están siendo abusados para comercializar su cuerpo en el mercado sexual, acción que es considerada como una forma análoga de esclavitud.
En este tema, lo que principalmente escasea es la brecha de información y los estudios estadísticos de este problema social, hacen falta estadísticas formales que no existen y que aumentan con el tema de la migración que presenta el país y que facilita este tipo de delitos. En todoa caso si usted desea denunciar algún caso que conozca, puede hacerlo a la línea 800 730 800, al 137 de Carabineros ó al 134 de la PDI. o1301i.