Con varias semanas experimentando cortes programados en el suministro de agua, y con un sistema de bombeo que comenzó a experimentar algunas fallas, la crisis del agua no se vive solamente en el mundo agrícola, sino que ya ha tocado las puertas de la localidad de Las Ramadas de Punitaqui, que si bien se sigue considerando rural, ya en la práctica tiene tintes de urbanidad por su manejo y cercanía con su capital comunal.
Con el manejo del servicio hídrico bajo la responsabilidad del sistema de Agua Potable Rural de Las Ramadas, éste ha decidido en las últimas semanas establecer cortes en el servicio en distintas horas de la mañana y la noche, buscando alargar lo más posible el suministro a la mayor cantidad de pobladores.
Milena Monserrat es vecina del sector, y ha visto con preocupación y hasta molestia como se han establecido las interrupciones en el servicio, con miedo a que se normalicen en el tiempo.
“Todos los años es lo mismo acá. Para el verano se secan los pozos, no hay agua y la población reclama la situación. Las personas que tomaron el cargo no se dan cuenta que detrás de ellos hay una población completa que está sufriendo. En las mañanas al levantarnos no tenemos una gota de agua, en la tarde hay que estar atento a que llegue para cubrir las necesidades. Claro, estamos en sequía, hay que cuidar el agua. Lo que pedimos es que compren agua, como lo hacen otras poblaciones y APRs”, señaló la vecina.
Por su parte la presidenta de la Junta de Vecinos de Las Ramadas, Nieves Rodríguez, destacó que a la merma en el líquido se une a una falla en los equipos.
“Este miércoles amanecimos Las Ramadas sin agua, porque se dañaron las bombas y no se pudieron llenar los estanques. Los cortes son incómodos para toda la población porque nos dan el agua en las mañanas, pero la cortan en la tarde, luego la dan dos horas y de ahí hasta el otro día. Ya es insostenible la situación”, lamentó Rodríguez.
Medidas necesarias
En tanto la presidenta del sistema APR de la localidad, Nancy Bugueño, destacó que el corte del servicio es para buscar que sea equilibrado y que pueda llegar el líquido a todos los vecinos al mismo tiempo.
La localidad tiene en registro actualmente 415 medidores y arranques, lo que significa que llegan a mucho más de dos mil personas, ya que hay medidores hasta para tres familias de la zona.
Informó que desde muy temprano de este miércoles han estado intentando solventar una situación ocurrida con las bombas de los pozos habilitados.
“Nunca el agua es suficiente. Nosotros manejamos un APR grande de 415 arranques y 40 mil litros de agua apenas le hacen ‘cosquilla’ a los estanques. Ahorita están corriendo el pozo principal y el pozo más pequeño que tenemos. Ayer (martes) se cambió una bomba que se había quemado, pero a las 2.00 de la mañana se paró todo el sistema y no siguió llenando los estanques. En la noche nosotros estamos cortando el agua para que los estanques amanezcan llenos, para dar tiempo a que se recuperen, porque de lo contrario le llegaría el agua solo a algunas personas, a las que viven en la parte más baja, porque por falta de presión a los que viven en la parte más alta no les llegaría el agua”.
Señaló Bugueño que la obra en la que está la bomba que se quemó, no ha sido entregada todavía a la comunidad, por lo que está todavía en marcha blanca a la espera de su formal entrega.
“Este es un pozo que hicimos nosotros a comienzos del año pasado con fondos propios del APR, y este año la Dirección de Obras Hidráulicas lo habilitó por un proyecto, colocando la bomba, las instalaciones y las conexiones para que el pozo funcionara. No ha sido entregada, sino que funcionaba en período de prueba, y estaba pronta su entrega, pero falló. Por intermedio de la Asociación Gremial de APR, logramos conseguir y comprar una bomba. La instalaron en la tarde de ayer (martes) y quedó corriendo, y en la madrugada de hoy (miércoles) falló y no se llenaron los estanques. Y eso que la entregaron e instalaron sin terminar de pagarla. Está en revisión por parte de la empresa que la instaló”, señaló la dirigente gremial.
Destacó que la Municipalidad de Punitaqui ha estado muy dispuesta a colaborar con los camiones de agua que sean necesarios para abastecer a la población.
“Ya en la mañana compramos cuatro camiones, pero necesitaremos más y está el compromiso de apoyo por parte de la municipalidad para ayudarnos en esa situación”.
Al final de la tarde de este miércoles vecinos y dirigentes se verían las caras en reuniones convocadas por la Junta de Vecinos y el APR para exponer la situación y alcanzar algunas soluciones.