Finalmente, el –hasta mañana-gobernador provincial del Limarí, Cristian Herrera será candidato para las elecciones primarias que la Democracia Cristiana organizará el próximo 17 de enero en Monte Patria, en donde enfrentará al actual presidente regional de esa colectividad, Camilo Ossandón.
Se terminan así, un año y ocho meses de gestión al frente del gobierno provincial por parte de este militante DC que este viernes, abandona oficialmente sus labores administrativas anunció.
-¿Cuál es la evaluación que Ud. hace de su gestión al mando de la gobernación?
“Esta fue una decisión muy meditada, el poder presentarse como precandidato a alcalde por Monte Patria, donde además primó el apoyo de diferentes dirigentes sociales que propusieron que pudiera encabezar un proyecto en la comuna.
Y si bien no es una obligación legal que yo tenga que renunciar, creo que hoy día la política no solamente se mide por legalidades, sino por conceptos éticos y como somos capaces de enfrentar una actividad.
El desafío de ser gobernador es muy grande, aquí no puede haber una dualidad de funciones, pues hay que tener respeto por el cargo, por la Presidenta, y efectivamente he tomado la decisión de renunciar, decisión que ya había tomado desde el día lunes, cuando presenté mi candidatura y le informé al intendente y al gabinete regional la decisión que teníamos y que habíamos adoptado por el beneficio de la transparencia en la política.
La verdad, me siento honrado de haber acompañado nuevamente a la Presidenta Bachelet, pues me había tocado acompañarla como seremi de gobierno en el anterior gobierno los últimos siete meses, y hoy día, al iniciar este gobierno, que no ha sido fácil. Ha sido un gobierno, de enormes transformaciones a nivel nacional como a nivel local que ha generado resistencia en algunos, pero hoy día, estoy feliz de poder decir que fui parte de una gestión a nivel provincial”.
-¿Cuándo se materializaría su renuncia al cargo?
“Creo que cuando se inicia un proceso lo primero que se tiene que hacer es cerrar el proceso que termina.
El día viernes va a ser mi último día laboral dentro de la gobernación para poder finiquitar los temas administrativos, generar las firmas correspondientes y terminar como corresponde este proceso.
Mi idea es estar en la calle, en terreno, con la gente, construyendo con ellos el nuevo Monte Patria que queremos para la comunidad”.
-¿Fue un trampolín su llegada a la gobernación del Limarí para alcanzar el municipio de Monte Patria como lo acusan sus opositores?
“En la gobernación me dedique a trabajar, por las cinco comunas de la provincia. A lo mejor pudo haber sido un trampolín el trabajo ejecutado en la gobernación para la comunidad en general, pero yo jamás cuando llegué a esta gobernación me planteé como objetivo ser candidato.
La verdad es que desarrollamos un trabajo serio que era lo que nos podía la Presidenta, pensando en toda la provincia del Limarí, y eso está reflejado en las enormes cifras de inversión que hay en nuestra provincia completa. Creo que somos la provincia con la mayor inversión pública del país.
Logramos revertir una tasa de desempleo que iba en aumento por la sequía, básicamente con inversión publica. Fue un trabajo de 24 horas y hoy día tenemos la convicción de que lo ejecutamos con un equipo de profesionales para mejorar la calidad de vida de nuestra gente”.
-¿Es Ud. la continuidad de la gestión del alcalde Juan Carlos Castillo, como lo señala su rival, Camilo Ossandón?
“Yo siento que las palabras de Camilo más bien obedecen al apoyo que ha manifestado el alcalde hacia mí como precandidato, y como posible alcalde.
Yo conocí a Camilo siendo funcionario municipal; él también fue parte de la administración del alcalde Castillo, conocí a Mery (Mora) siendo funcionaria municipal también, pues fue parte del proyecto del alcalde Castillo también.
La verdad, es que nadie de nosotros es el alcalde Castillo. Yo lo que busco y voy a buscar, si es que la comunidad me da el respaldo y el apoyo para que yo canalice sus sueños, es iniciar un nuevo proceso que va a ser liderado por una nueva persona que soy yo”.
-¿Cuáles son sus propuestas para Monte Patria?
“Yo todavía soy gobernador. El día viernes vamos a comenzar a trabajar con aquellos equipos que me han pedido que encabece este proyecto, elaborando un plan participativo.
Creo que es injusto y en términos éticos, no es prudente, ocupar un cargo como éste, y estar trabajando en otros temas. Durante los próximos días daremos a conocer nuestras propuestas a la comunidad”.
Como gobernador
–Respecto al trabajo que Ud. desarrollaba junto a los alcaldes de la provincia ¿existió alguna rivalidad política con alguno de ellos, como el alcalde Claudio Rentería?
“Creo que todos los alcaldes quieren lo mejor para sus comunas, para sus habitantes, y por ahí se generan también estos roces, producto que ellos buscan con mayor rapidez, temas que se pueden estar ejecutando, pero yo quiero agradecer la relación con todos los alcaldes”.
-¿Cómo afrontó las críticas realizadas por esos mismos ediles al gobierno por las demoras en el proceso de emergencia tras el terremoto del 16 de septiembre?
“Como gobierno hemos estado haciendo los mayores esfuerzos para abordar este terremoto, el cual es muy distinto al terremoto de 1997 que fue focalizado. Éste incluyó además un tsunami que azotó nuestras costas y que ha afectado a muchas más personas.
Uno entiende la opinión de los alcaldes al respecto, pero también creo que es importante rescatar lo positivo que hemos hecho en este terremoto. Hoy día estamos entregando una vivienda de emergencia que no tiene nada que ver con la vivienda que se entregó el año 1997 que era una mediagua, de 3×3.
Hoy tenemos una glosa presupuestaria aprobada para la reconstrucción”.
-También hubo críticas al momento de enfrentar la sequía…
“Los recursos nunca son suficientes. Hay que señalar que en nuestra provincia del Limarí, todos los recursos que se destinaron para la sequía, el 50% de esos recursos quedó en la provincia.
Tuvimos profundizaciones de pozos, aplicaciones para sistemas de agua potable rural tan esperadas, a Combarbalá también llegamos con soluciones. La verdad es que hicimos harto, pero siempre para las catástrofes y para los afectados pareciera que no es mucho”.
-Luego de la crisis del agua que Ovalle vivió en julio producto de los cortes tras los temporales de ese mes y de marzo, ¿considera que la empresa Aguas del Valle cumplió con las exigencias que se le impuso, tras el fuerte rechazo ciudadano?
“Yo siempre fui muy crítico del actuar de la empresa sanitaria en la emergencia. Creo que no tuvimos que llegar a eso, porque justamente en marzo ya habíamos tenido problemas. Después volvimos a tener problemas tras precipitaciones de julio. Eso nos llevó a estar pendientes de cómo eran capaces de resolver esta situación y como eran capaces de darnos tranquilidad en el futuro”.
-¿Era partidario de que a la empresa se le revocara la concesión del servicio de la distribución de agua?
“De lo que yo era partidario era que la empresa pudiera haber hecho un gesto con los habitantes de Ovalle, y más allá de las demandas colectivas, que no hubiese cobrado nada durante ese período. Creo que la empresa sanitaria perdió una oportunidad enorme para que la misma comunidad hubiese vuelto a confiar en ella como empresa sanitaria”.
–¿En qué situación está la deuda que el Estado mantiene con los distribuidores de agua potable (camiones aljibes) para los APR?
“Hay un proceso a través de Onemi que existe. El Estado y quienes son proveedores de agua o los camiones aljibes, saben que éstos no son de una metodología rápida porque hay una boleta que se tiene que emitir al municipio por ejemplo; es un trámite muy largo que se estaba demorando en torno a los tres meses.
Pero claro, esto se estaba excediendo de tiempo y es entendible la molestia de los proveedores que han sido socios nuestros para enfrentar la sequía”.
-¿Algún plazo para que eso se solucione?
“No tengo el dato exacto, pero según el director de la Onemi eso estaba en procedimiento”.