El 21 de septiembre fue el día en que el técnico de Deportes Ovalle, Danilo Chacón, debió internarse en el Hospital Antonio Tirado Lanas de la capital limarina afectado primeramente por problemas respiratorios. Sin embargo, y con el correr de los días, el diagnóstico fue mucho más grave.
Una arritmia cardiaca con fibrilación auricular sería el diagnóstico final al exdefensa que lo obligó a permanecer internado durante dos meses. Ese tiempo evidentemente lo obligó a abandonar la banca de los verdes de Limarí y preocuparse ahora de su salud.
“Tuve visitas médicas y pensábamos que podría ser una laringitis o bronquitis obstructiva muy fuerte, tenía muchos ahogos, tenía el cuerpo con mucha inflamación y un cansancio inmenso. Estuve con eso cerca de 40 días sin darme cuenta y me dejan internado por una arritmia cardiaca muy importante”, cuenta Danilo Chacón a El Ovallino.
“Los primeros días internados fueron de preocupación”, cuenta. Estuvo sin moverse del recinto por cerca de siete días. Su enfermedad fue posible estabilizarla mediante medicamentos que aún ingiere, pero que hasta la fecha no tiene una cura posible, pero agrega que aún está el riesgo de que sufra algún infarto o que le suceda algo incluso en la calle, ya que la arritmia que lo aqueja no ha podido ser tratada.
“Los primeros días fueron difíciles. El hecho de no poder moverte de la cama, no bajarte, estar conectado a un monitor me hizo sentir un miedo que no había sentido antes. Uno dice ‘no importa y dale, dale’, pero bastante preocupado. Después empecé a gastar el tiempo en hacerme amistades dentro del hospital, conversar con los y las enfermeras. Yo soy un poco extrovertido, ellos (los internos) sabían quién era yo y ocupé el tiempo en la lectura”
Danilo Chacón estuvo delicado, pero al interior del hospital se dio cuenta que su familia, amigos y el mundo del fútbol no lo olvida.
“Al segundo día de estar en el hospital recibí llamados de todas partes, de personas que habíamos sido amigos en U. Católica, compañeros del fútbol actual, técnicos, hinchas y personas que ni siquiera tienen un lazo te llaman y preocupados”, afirmó.
El pasado 16 de noviembre salió desde el recinto hospitalario, ya está mejor pero con cuidados y lo único que desea es volver al fútbol. Aún desconoce de qué forma, pero de acuerdo a su forma de vivir la vida, está lejos de abandonarlo.