Las aguas aún no están quietas al interior del oficialismo, y más se agitaron luego de la entrevista que la propia Presidenta Michelle Bachelet dio este fin de semana al diario La Tercera, donde afirmara que las reformas se iban a realizar sí o sí, y que la llegada de los ministros Jorge Burgos y Rodrigo Valdés, no representaban un “giro al centro” ni un “cambio de rumbo” del gobierno.
Ya antes, desde la DC se había manifestado incomodidad luego de que en el cónclave de la Nueva Mayoría, la mandataria no incluyera en su discurso términos como “gradualidad” o “reactivación”, conceptos defendidos por sus ministros.
En este contexto, la Democracia Cristiana es quien resiente los golpes del momento, pues tras las últimas encuestas que evidencian una creciente desaprobación del gobierno, el temor está en el hecho de que la Falange termine por verse afectada irremediablemente ante los ojos de la esa crítica opinión ciudadana.
“Nosotros hemos ratificado nuestro compromiso con el gobierno, con la Nueva Mayoría, pero también con la misma claridad hemos dicho que tenemos que escuchar lo que nos dicen los ciudadanos en la calle”, afirma el diputado Matías Walker, tras una reunión entre los diputados DC y el presidente del partido, Jorge Pizarro.
Walker recuerda que en estos momentos el gobierno “tiene menos de un 30% de apoyo, por lo que tenemos que tener mucha humildad para escuchar lo que nos están diciendo los ciudadanos; rectificar lo que haya que rectificar, priorizar los temas les preocupan a los ciudadanos”.
Al respecto, el diputado falangista enumera como puntos principales, la reactivación económica, la agenda de pública anti delincuencia, solución de problemas de la salud pública. “Como la construcción de 20 hospitales entre los que está el hospital de Ovalle. Pero antes tenemos que tener especialistas en los hospitales, pues no podemos concretar la construcción de esos nuevos hospitales y no tener especialistas”.
Respecto a las declaraciones de la Presidenta y su referencia a los ministros Burgos y Valdés, Walker ratificó la lealtad de su partido con el gobierno y con las reformas, pero acotó que se debe “tener un pie en la calle para escuchar lo que la gente nos está diciendo hace mucho tiempo”.
“Uno representa a la gente, uno no da una opinión porque se le ocurre. Cuando se pide priorizar la seguridad ciudadana, o cuando se pide priorizar los temas de salud pública, o el acceso a la gratuidad a la educación superior sin discriminación, es porque es lo que la gente nos pide en la calle, y eso es lo que uno transmite” aseveró.