Ayer, el delegado presidencial de la Región de Coquimbo, Galo Luna, afirmó que la Contraloría General de la República (CGR) finalmente tomó razón de la solicitud de extensión de vigencia del Decreto de Zona de Catástrofe, petición realizada por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública para la zona, además de Valparaíso, debido a la situación de escasez hídrica que las afecta.
“Con este instrumento trabajaremos diferentes acciones, junto con lineamientos, para abordar la sequía que estamos viviendo, que es muy compleja. Es así como la continuaremos abordando con la misma energía para salir adelante”, agregó la máxima autoridad regional.
En detalle, la implementación de la medida, que se extenderá por 365 días, permitirá dar mayor rapidez a los procesos administrativos para llegar con ayuda a las comunas más afectadas por la falta de agua.
“Ya fue totalmente tramitado por parte de la CGR el decreto que designa como zona de catástrofe a la zona y a todas sus comunas”, señaló el delegado presidencial.
En esta línea, el secretario regional ministerial de Agricultura, Christian Álvarez, dijo que la disposición complementa el decreto de emergencia agropecuaria que se encuentra vigente y que termina el 31 de diciembre, pero que pretenden renovarlo por tres meses más. Al mismo tiempo, acompaña el de escasez hídrica que generó la Dirección de Obras Hidráulicas del Ministerio de Obras Públicas (MOP).
“Junto con ello, se analizarán diversas medidas que no solo dicen relación con recursos, sino que también con gestiones a nivel de los servicios públicos, como Impuestos Internos o la Tesorería General de la República”, manifestó.
De este modo, la medida, que es declarada por el Presidente de la República a través de un decreto supremo y firmado por los ministros de Interior además de Defensa, se aplica en caso de calamidad pública dentro de una determinada zona geográfica o por calamidad pública de causas humanas o naturales, de una magnitud tal que producen un grave daño al normal desarrollo de la vida social y la economía, afectando significativamente a personas o bienes dentro del territorio nacional.
Es así como los acontecimientos que generan su declaración pueden ser variados y de amplio alcance, cubriendo sismos, inundaciones, sequías o epidemias, entre otras.
Acerca de esta disposición en particular, se determinó como responsables de la coordinación y ejecución de los programas de recuperación que el ejecutivo decida para las zonas afectadas, a Galo Luna y a la delegada presidencial de Valparaíso, Sofía González. Sin embargo, las autoridades podrán delegar la ejecución y coordinación de estas labores, tanto a nivel comunal como provincial, a quienes elijan.
Así, tanto el delegado presidencial como González, tendrán amplias facultades para adoptar e implementar las medidas tendientes a solucionar los problemas que hayan surgido o que se planteen como consecuencia de la catástrofe que ha afectado a sus regiones, con el objetivo de procurar expedita atención a las necesidades que se presenten con oportunidad del ejercicio de sus funciones.
En este sentido, las autoridades, jefaturas y personal de las instituciones, organismos o empresas de la administración del Estado, deberán prestar, a las autoridades designadas, la colaboración que les sea requerida.
Para el alcalde de La Higuera, una de las comunas más afectadas por la escasez hídrica, Yerko Galleguillos, cualquier acción que venga del gobierno o desde las municipalidades será insuficiente, mientras no se produzca un fenómeno natural que es la lluvia y es así como, obviamente, ningún ejecutivo lo va a poder lograr.
“Todas las disposiciones que se implementen serán paliativas pero agradecidas, por supuesto. En esta oportunidad, el decreto que se va a ampliar tiene algunas garantías sobre los municipios y en algunas acciones, como el forraje que se entregará por parte de Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP). Son medidas que van en directo beneficio de nuestros vecinos. Eso sí, lo único que debemos lograr es que estas disposiciones sean permanentes debido a que el cambio climático se encuentra generando efectos importantes en nuestro clima, en la zona y especialmente en La Higuera, donde prácticamente ya no llueve”, añadió.
Por último, su par de Vicuña, Rafael Vera, sostuvo que, a pesar de que las comunas siempre requieren más, le parece que la extensión de vigencia del Decreto de Zona de Catástrofe es una medida necesaria.
“Basta sólo observar cómo se encuentra el embalse Puclaro y otros ubicados en el resto de la región. La totalidad de las acciones, como puede ser la construcción de una planta desaladora, es a ocho o diez año. Por eso, debemos aumentar las disposiciones para enfrentar este desastre hídrico que estamos viviendo”, agregó.
En este sentido, el edil aseguró que la medida, supuestamente, se verá reflejada en recursos económicos para la comuna situada en el Valle de Elqui. “Nos cuesta verlos, pero entiendo que llegan dineros para apoyar al sector agrícola. Porque cuando a esta industria le va mal, esto se traspasa hacia las pisqueras, frutícolas, junto con las hortalizas, situación que se traduce en un incremento en el valor de los productos. En consecuencia, la población cada vez tiene más problemas para llegar a finales de mes”, complementó.
Cabe recordar que hace unos días, en visita a la Región de Coquimbo, el titular del Ministerio de Agricultura, Esteban Valenzuela, aseveró que el escenario de sequía que afecta a la zona es dramático.
“Existe el compromiso para que la Comisión Nacional de Riego (CNR) invierta 16 mil millones de pesos para auxiliar a los pequeños, además de medianos agrícolas que tienen brechas en su tecnificación de riego y optimizarla. La totalidad de los servicios se comprometieron a tener perfiles para programas de empleo, junto con trabajar con los actores los programas de endeudamiento además de créditos”, finalizó.