La pandemia por covid-19 ha generado grandes cambios en casi todos los sectores productivos, culturales y sociales en todo el planeta, y si bien muchos de los rubros han podido adaptarse para continuar activos durante incluso los momentos más álgidos de contagios, otros como el turismo se han visto de manos atadas hasta en los momentos de mayor flexibilización.
Lo que sí reconocen quienes trabajan en áreas grandes o pequeñas de ese sector comercial, es la necesidad de transformar completamente su manera de trabajar para mantenerse activos, destacando que ya no se pueden manejar grupos grandes, sino que deben ser cada vez más selectivos.
En ese sentido el representante del emprendimiento turístico Antakari, Patricio Olivares, señaló a El Ovallino que el manejo en el rubro ya no será el mismo de ahora en adelante, y que los emprendedores y pequeñas empresas deben entender la nueva necesidad de seguridad del mercado.
“El turismo en el país y en la provincia ha tenido una pausa obligada. Primero producto del estallido social cuando incluso las embajadas aconsejaban a sus ciudadanos a no visitar Chile por considerarla un destino peligroso. Y como nosotros somos parte de un engranaje que trabaja con hoteles y agencias de viaje, también nos vimos afectados, porque si no hay gente en los hoteles, no podemos ofrecer nuestros recorridos y paquetes”, señaló Olivares.
Con respecto a la pandemia aseguró que tuvieron que afrontar un escenario similar, aunque en esta ocasión sabían que una de las principales herramientas sería la capacitación y la flexibilidad con la que pudieran adaptarse a las nuevas circunstancias.
“Mientras estamos paralizados hemos tenido mucha capacitación, de cómo lo podemos hacer para reactivar la industria turística para el verano, si es que se abre la posibilidad de recibir gente para los primeros meses del 2021. Si se pudieran recibir turistas nos estamos capacitando y trabajando junto a restaurantes, hoteles, y los tour operadores sobre los protocolos y el manejo del personal que ha fijado el Minsal y Sernatur”.
Grupos pequeños
Aseguró el emprendedor que actualmente todo apunta a fortalecer el trabajo en línea y telemático, desde la promoción, la contratación y hasta algunos recorridos se pueden hacer a distancia aprovechando las nuevas tecnologías.
“Hasta los museos hoy día están haciendo los recorridos on line. El Museo del Limarí abrió sus puertas pero hay que pedir la hora a distancia y tiene la restricción de que deben entrar en grupos muy pequeños. Lo que sí es una realidad es que nos tenemos que olvidar por un buen tiempo del turismo masivo. Olvídense de trasladar gente por un fin de semana en un autobús hacia varios destinos. Ya no habrá giras de estudios o giras de adultos mayores. Eso ya no es viable. Ahora el futuro del turismo apunta más a un turismo más personalizado, a grupos familiares pequeños, parejas o grupos de cuatro personas”, vaticinó el tour operador.
Estimó que incluso con grupos de máximo 10 o 12 personas trasladados en furgones hacia espacios abiertos, tipo turismo extremo o turismo de aventura, podría ser una posibilidad en el futuro cercano si las condiciones sanitarias nacionales lo permitieran.
“De ser un grupo de amigos o familia que viene de un mismo origen, que tenga pruebas PCR negativas, que han compartido entre ellos, con ellos se podría trabajar hacia destinos abiertos. Pero el riesgo sería trabajar con grupos que no se conozcan o no vengan del mismo núcleo, como se trabajaba antes, con gente que se inscribía en un tour y eran pequeños grupos de gente desconocida. Ya eso es inviable, eso sería un caldo de cultivo para contagiar a muchas personas”, aseguró Olivares.
Destacó que sería el gran desafío del transporte, que intenta mantenerse aunque en el interior de grandes buses, micros y aviones no se puede mantener el distanciamiento físico requerido.