Tres hechos que dejaron huella en los habitantes de la zona han sido la sequía, el norovirus y el colapso de la planta de Aguas del Valle, tras las intensas lluvias registradas en julio de este año. Esta última emergencia provocó la interrupción del suministro de agua potable por 13 días en Ovalle. Autoridades, involucrados y ciudadanos evalúan dichos eventos, en donde todos convergen en un punto en común: el agua no es indiferente para nadie en la provincia de Limarí.
Desde la empresa sanitaria Aguas del Valle confirmaron los trabajos de infraestructura para evitar problemas similares a los vividos en el mes de julio.
El terremoto silencioso
La sequía avanza a pasos agigantados en la región y en especial en la provincia, la cual concentra más del 80% de todos los agricultores de la zona. Según lo afirmaba a El Ovallino en diciembre del 2014, el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo, en la zona hay un “75% del potencial agrícola que se estaría perdiendo”.
A su vez, a lo largo de Limarí, aseguran que su situación es compleja, ya que aquí se concentra sobre el 50% del total de la superficie que no es regada en la región. Corresponde a 71.462 hectáreas, donde se han dejado de regar el 72%, lo que corresponde a más de 50.000, quedando en la actualidad sólo 19.549 hectáreas disponibles para cultivo. Las zonas que se han dejado de regar, y que por tanto han perdido los cultivos, son Cogotí, Huatulame, Punitaqui y Pama.
En nuestro país, actualmente existen 188 comunidades agrícolas. De dicha suma, en la región hay 178, todas afectadas por la sequía. Quien tiene una directa relación con la problemática es Mirtha Gallardo, presidenta de la Asociación de Comunidades Agrícolas de Limarí, quien señala la falta de interés real de autoridades sobre el tema. “Para nosotros los habitantes de la ruralidad de la región, donde está inmersa la agricultura familiar campesina, la sequía ha sido uno de los flagelos más grave (…) frente a ello nuestro desafío mas importante y el mas complejo es no solamente hoy lidiar con la autoridad política, el Estado de Chile o los gobiernos de turno, para que efectivamente se generen políticas hacia nosotros. Cada día se alejan más, son cosas de parche. La sequía se mira, de parte de la sociedad no rural, como que ya es algo normal. Las políticas públicas no están adaptadas a los habitantes de los territorios rurales. Hoy en día, con el terremoto, hay gente que tiene subsidio rural, pero las soluciones son construir a 500.000 metros del lugar donde habita el campesino y no donde vive, en las casas de adobe donde tiene las cabras y su lugar de trabajo, porque la política pública de subsidio señala que no puede construir su casa en el lugar de trabajo, sino donde exista agua potable.
Las políticas se tienen que adaptar a los ciudadanos, no los ciudadanos a las políticas públicas. Los habitantes rurales somos de primera, no de segunda, porque así nos sentimos”.
Sobre las medidas en que han abordado, la dirigenta confirmó que los días 22, 23 y 24, en la comuna de Los Vilos se efectuará un encuentro regional campesino, que justamente busca avanzar en dicho desafío.
En esta misma materia, el presidente de la Asociación de Crianceros del Limarí, Juan Carlos Codoceo, recalca que las lluvias de invierno ayudaron a disminuir el problema de la sequía, pero el terremoto derrumbó parte del progreso conseguido. “Si bien los animales tienen forraje, pasto y praderas naturales, los cuales se han vuelto a recuperar, no podemos decir lo mismo de las vertientes. En muchos lugares desaparecieron las napas subterráneas y es algo bastante grave, donde la autoridad no ha sabido darle el valor que se merece. Hay lugares donde el agua ha desaparecido, por ejemplo en Los Quiles, donde las fuentes que existían se secaron. Eso nos preocupa.
También tenemos una cantidad de pequeños agricultores donde sus pozos quedaron aterrados y destruidos. Hasta el momento no hay ningún apoyo de nada para poder tener maquinarias para que puedan recuperar los árboles productivos o las siembras que tienen. Si bien es cierto llovió, se recuperó la pradera natural, no está completamente superado el tema de la sequía, ya que debido al terremoto, todo lo que se había mejorado en cuanto a recuperación de agua, el sismo en muchos sectores hizo desaparecer el agua”.
Referente a dicha problemática que aún afecta duramente a un sinnúmero de limarinos, el gobernador Cristian Herrera recalca en los avances para combatir los problemas asociados y el trabajo en conjunto para abordar a futuro un tema tan complejo como lo es la sequía en la zona. “El tema de la sequía también ha sido duro. Somos como provincia el epicentro de la escasez hídrica en el país, y eso como Gobierno Regional lo sabemos. Por lo mismo generamos planes con inversión superior a los 30 mil millones de pesos para atacar esta catástrofe.
Este año tuvimos lluvia, que ha sido un alivio, pero de ninguna manera se ha terminado la sequía. Hay que seguir trabajando y cuidando nuestro vital elemento. Como gobierno seguiremos trabajando y generando acciones a corto, mediano y largo plazo. El embalse Valle Hermoso en Combarbalá, las plantas desaladoras, el apoyo de Indap, de la CNR demuestran el compromiso con nuestros agricultores. Lo primero es asegurar el agua para consumo humano, luego para actividades productivas”.
Cuando Ovalle se convirtió en The Walking Dead
El Hospital Antonio Tirado Lanas colapsó en septiembre del año 2013 tras el brote de norovirus producido en la comuna de Ovalle.
Más de 4.700 personas. Esa fue la cifra aproximada de casos que detallaron los medios de comunicación a nivel local y nacional tras la alarma del norovirus, causante de la masiva intoxicación que afectó a la comuna de Ovalle en septiembre del año 2013 y de la cual hasta el día de hoy existe incertidumbre de su origen. El peak de las consultas en el hospital se registró el jueves 5 de septiembre con 833 casos registrados según el Minsal. De acuerdo a lo detallado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), los norovirus son virus de la familia Caliciviridae, sin envoltura de RNA, de cadena simple, que causan gastroenteritis en humanos.
La gastroenteritis por norovirus se presenta en forma leve o moderada, a menudo en forma de brotes, con síntomas clínicos como nauseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, mialgias, cefaleas, malestar general, febrícula o una combinación de varias de estas manifestaciones. La transmisión se produce por la vía fecal-oral aunque se ha propuesto que puede transmitirse por contacto o por el aire a partir de fómites de la persona infectada. También se ha documentado transmisión a través de alimentos, agua y mariscos.
Autoridades nacionales llegaron hasta la provincia para evaluar el problema sanitario y de salud en el Limarí, que ocasionó mas de 4.700 casos y profundas molestias en los ovallinos.
Sobre la causa de dicho brote, hasta el día de hoy hay dos informes completamente contradictorios; uno de la Seremi de Salud que condenó a la sanitaria Aguas del Valle en su sumario, y otro de la Superintendencia de Servicios Sanitarios que descarta que el agua potable hubiese tenido incidencia. Finalmente será el Ministerio Público el que establezca, a través de una investigación que aún está en curso, las responsabilidades penales de los involucrados.
David Flores, editor de El Ovallino en aquella época, recuerda el caso que enfermó a gran parte de los ovallinos y en el hecho que hasta el día de hoy no existen responsables definidos. “Luego de extensos meses de investigar el tema de la masiva intoxicación con norovirus en Ovalle pudimos sacar varias conclusiones. Primero, tal como confirmaron las autoridades sanitarias de la época, este cuadro fue generado por la ingesta de agua potable, el único agente común que pudo enfermar a más de 5 mil personas. Según consignó el sumario, el virus se propagó durante la Fiesta Chica de Sotaquí, por exceso de deposición en el río Limarí, lo que llegó hasta las plantas de tratamiento de agua potable, ya que en las mediciones realizadas en el instante confirmaron la falta de cloración. La investigación penal es otro tema, ya que si bien se tomaron en cuenta estos antecedentes, es imposible sancionar la presencia de agentes virales y sólo se considera los bacterianos. Un vacío legal que en definitiva deja en impunidad una de las mayores crisis sanitarias que se conozcan en nuestro país. Una tarea pendiente para las autoridades”.
Una nube de contradicciones sobre el origen del virus se generó en el momento mas complejo de la emergencia generada por el norovirus, que también tuvo como participe al ex ministro de Salud Jaime José Mañalich.
Patricia Alfaro, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos que fue una de las afectadas directas por la emergencia sanitaria, recordó los complejos momentos que vivió la comuna y sus habitantes por el brote viral. “El año 2013 fueron más de 4.700 personas reconocidas por tener el norovirus en Ovalle, mas todas las personas que fueron a clínicas privadas, porque producto de ello, la gente llegó a todos los lugares hospitalarios, tanto públicos como privados, donde muchos no salen en las encuestas. Finalmente no se nos devolvió ningún peso, de los remedios, nos salió más luz por hervir el agua, etc. Ahí no se solucionó nada. Se produjo un silencio y nadie dijo nunca nada mas”.
El alcalde de Ovalle Claudio Rentería recalcó que “el norovirus nos afectó a nosotros los ovallinos. Fue una epidemia que se abordó con los epidemiólogos del Servicio Nacional de Salud, a través de la Superintendencia de Servicios Sanitarios y todos los estamentos correspondientes”.
El diputado Matías Walker enfatiza en el rol fiscalizador que, según sus palabras, han llevado a cabo. “Aspiramos a que en una comuna como Ovalle, puedan existir condiciones para la provisión de un servicio de agua potable de manera regular, continua y que cumpla con la norma sanitaria. Ese es el ejercicio de fiscalización que hemos desarrollado en los últimos años, que incluyó el triste episodio del norovirus, cuando realizamos las primeras acciones fiscalizadoras con la Superintendencia, la autoridad sanitaria, e incluso presentamos y aprobamos en la Cámara de Diputados un Proyecto de Resolución pidiendo tener una norma más exigente de la calidad de agua en nuestro país”.
Consultado por la investigación sobre el caso, el fiscal jefe de Ovalle, Gianni Stagno, ratifica que dicho proceso no está cerrado, en el cual, hasta el día de hoy, “se continúan efectuando diligencias”.
Agua ¿Potable?
Sólo una anhelada lluvia, que vendría a apalear los duros efectos de la sequía, causó una crisis que hasta hoy tiene consecuencias. “Ellos tienen que entregar un servicio de calidad y no lo han entregado”. Esas fueron las palabras finales del alcalde Rentería luego de un despacho radial por la emisora nacional Biobio, tras insistir en sanciones concretas para la empresa Aguas del Valle luego de 13 días sin agua potable en la comuna. La causa principal del hecho se generó por el colapso de la planta ubicada en el sector de Los Peñones, producto del caudal con lodo generado por las intensas lluvias en Quebrada Seca.
Los habitantes de la comuna de Ovalle tuvieron que hacer largas filas tras el corte de agua potable que se extendió por 13 días tras el colapso de la planta Los Peñones.
Mirando unos meses atrás, el edil puntualiza que fue una situación compleja, donde hasta el día de hoy exigen mayores medidas contra la empresa sanitaria. “En el caso de los 13 días que vivimos con el problema, donde las cuencas arrastraron sedimentos y dichos sedimentos llegaron a las fuentes de captación de Aguas del Valle, hemos hecho grandes esfuerzos para que dicha empresa mejore el sistema y creo que en este sentido lo han ido mejorando en el transcurso del tiempo, gracias a la presión que tienen de parte de la comunidad.
Ellos (empresa sanitaria) tienen una deuda por cada uno de los ovallinos que han gastado recursos y que hasta el momento no se ha ido reflejando. Han emitido boletas de agua de $700 o $1.000 pesos y eso no me parece. Yo creo que hay que hacer un análisis más exhaustivo, por lo cual me reuniré prontamente con los gerentes de la sanitaria para conformar una mesa de trabajo y poder satisfacer las necesidades. Quien fue y que anduvo con las banderas de lucha soy yo y debo representar a mi pueblo”.
La dirigenta vecinal Patricia Alfaro confirma que aún están luchando por lo que consideran una compensación adecuada por el servicio prestado por la empresa. “Hubo un terremoto pero la gente tiende a olvidarse de lo que pasó. Como juntas de vecinos estamos ahí latentes con el tema con Aguas del Valle, porque solución no hemos tenido. Es una vergüenza lo que le han descontado a la gente, lo que han devuelto, $900, $1000 pesos por el corte. Hace unos días tuvimos una reunión donde el único parlamentario que asistió fue Daniel Núñez”.
El gobernador Cristian Herrera fue el encargado de liderar el comité de emergencia tras la situación vivida por los problemas en la entrega del vital elemento. “Desde que asumí como gobernador han sido días intensos de mucho trabajo, de mucho terreno, porque es lo que nos ha pedido nuestra Presidenta Bachelet. Sin duda como provincia vivimos momentos complejos este último tiempo, el más reciente el terremoto, pero el tema del agua también fue difícil. Estar cerca de dos semanas sin agua potable en la red de distribución fue caótico. La empresa sanitaria en su momento no tuvo la capacidad de respuesta que se hubiese esperado, esperamos que aquello no se vuelva a repetir”.
Durante el mes de julio, más de cien personas llegaron hasta el Tercer Juzgado de Letras de Ovalle para patrocinar la demanda por intereses colectivos y difusos contra Aguas del Valle, por los gastos en que incurrió la población luego de no poder beber agua de la llave. El abogado querellante, Roberto Vega, detalla que “el juzgado de Ovalle, aproximadamente el día 15, acogió la reposición de Aguas del Valle, en el sentido que la demanda no se habría acreditado la calidad de consumidores por parte de las personas que demandaron, modificando la resolución inicial de comenzar en juicio, a esa resolución nosotros presentamos una apelación. Estamos apelando y en espera de qué se va a resolver.
Esto se solucionaría rápidamente si Sernac se hiciera parte en el juicio, pero como no se ha hecho parte, nos corresponde acreditar que las personas consumen agua potable, valga lo inverosímil de la afirmación, pero va a ser la Corte la que confirme si se inicia o no el juicio. El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) fue notificado en la misma fecha que se oficializó la demanda hacia la empresa y hasta el día de hoy no han evacuado ni siquiera los oficios al tribunal”.
En lo que respecta al trabajo de la comisión investigadora en el parlamento, Matías Walker añade que buscarán llevar hasta último término el proceso sancionatorio. “Hemos pedido ante el prolongado corte de agua en Ovalle, ampliar dicha acción colectiva, para lo cual nos reunimos con el Director del Servicio Nacional del Consumidor, el ministro de Obras Públicas y la Superintendencia de Servicios Sanitarios pidiendo incluso que se pueda evaluar el término de la concesión de la empresa Aguas del Valle, expediente que ya se abrió en la Superintendencia, y que también nos llevó a iniciar esta comisión investigadora en la Cámara de Diputados. Ya hemos recibido el ministro de Obras Públicas y vamos a recibir a la Superintendencia de Servicios Sanitarios, al Servicio Nacional del consumidor”.
Consultados sobre la situación actual de la empresa en el caso, y las medidas que han adoptado para prevenir hechos lamentables como el ocurrido en el primer semestre del año, el gerente de Aguas del Valle Andrés Nazer recalca que “hemos tomado medidas, como por ejemplo la instalación de nuevos filtros que nos permiten controlar mejor las turbiedades, construimos cuatro norias y una conducción desde el sifón Paloma Recoleta, de modo de tener un mayor margen de respaldo, ante situaciones críticas en el río”.
Junto a ello, especifica que la inversión de dichas obras alcanza a “más de $300 millones de pesos y gastos por más de $420 millones, lo que suma un total de $720 millones para enfrentar la emergencia en Ovalle. Además la empresa estaba en proceso de ejecución de obras para instalar de 12 filtros y un estanque en la planta Los Peñones, que suman una inversión cercana a los $600 millones de pesos adicionales. No sólo la turbiedad centra las preocupaciones de nuestra empresa. Estamos desarrollando un fuerte plan de obras para enfrentar la escasez hídrica, que ya es un problema estructural en la zona. Estamos construyendo 17 nuevos pozos gracias a una inversión de $6.500 millones”.
Por ahora, continúa sesionando la comisión investigadora en el parlamento. Paralelo a ello, se encuentran en curso una serie de demandas colectivas presentadas por la comunidad en contra de la sanitaria, las cuales aún no tienen sentencia definitiva y mantienen a los limarinos en espera de una respuesta que compense las horas y días de inconvenientes sufridos. Los únicos que han ganado son las empresas de aguas embotelladas.