En más de cien años que por primera vez la tradicional Fiesta religiosa del Niño Dios de Sotaquí se oficiará sin fieles reunidos en la localidad distante a diez minutos del centro cívico de Ovalle.
La pandemia por Covid-19 no se ha retirado de la región, por lo que los organizadores de la Fiesta Grande de Sotaquí 2021 llamaron a todos los fieles a evitar trasladarse hasta el Santuario ubicado en la localidad ovallina y seguir los oficios religiosos mediante los canales radiales y audiovisuales que se disponen.
De esta forma, la celebración 2021 será atípica a lo que históricamente se ha celebrado. Probablemente con calles vacías para este fin de semana, los feligreses ya comienzan a seguir las transmisión a través de la radio, y a través del Facebook live del Santuario y de la Revista Koinonía, ligada al Arzobispado de La Serena.
Esta nueva forma de seguir con la fe no vería reducida la devoción de los fieles en el Niño Dios, señalan desde Sotaquí.
“La pandemia solo nos ha afectado en congregar a fieles. Queda demostrado que la fe sigue intacta y justamente con el novenario, como era de forma presencial, llegábamos a un número limitado de asistentes, con cerca de 200 a 300 personas que se podían congregar en la capilla, pero a través de las redes sociales podemos llegar a dos o tres mil personas diarias. Entonces queda demostrado que la devoción se sigue difundiendo, teniendo apoyo incluso desde países de América y Europa”, comentó Francisco Macuada, presidente de la cofradía del Niño Dios de Sotaquí, un grupo de laicos que acompaña a la labor del rector del Santuario.
LOS ORÍGENES
El mismo Macuada relata el origen de la imagen del Niño Dios, que se remonta a comienzos del siglo XIX, cuando una anciana de Sotaquí trabajaba en las hierbas y cuidando a enfermos del sector. Es así como en las cercanías al sector El Romeral divisó a dos pastores que jugaban con un tercer niño.
“Sin embargo, al ver desde lejos no se dio cuenta que era una imagen del Niño Jesús, solo se percibió cuando se acercó a los niños. Ella consiguió quedarse con la imagen, trasladarse con esta hasta su casa y comenzar a rendirle culto”, cuenta.
Pero fue recién el 10 de diciembre de 1873 que la imagen pasó a posesión de la iglesia local de Sotaquí.
“A medida que esta anciana comenzó a rendirle culto a la imagen, muchas personas se trasladaron a su casa para también adorarla, por lo que esta celebración dejó de ser privada y pasó a ser pública. Luego, en 1874 pasó a celebrarse la Fiesta del Niño Dios de Sotaquí. El culto no parte de inmediato, pasó de herencia familiar, hasta que un momento no dio más por tanta la devoción para convertirse en una celebración masiva”, dijo Macuada.
El programa oficial comenzó el pasado viernes 1 de enero con la Novena de preparación, bajo el lema “Él es nuestra esperanza”, mientras que desde el 2 al 8 de enero se seguirá con las respectivas misas a las 20.00 horas; el sábado 9 con oficios religiosos desde las 06.30 horas hasta las 20.00 horas, dejando el final para el domingo 10 de enero con misas solemnes desde el Santuario y la Catedral de La Serena, junto con la misa de clausura y la subida de la imagen sagrada.