Gamificación en el marketing: la mejor herramienta para mejorar el engagement

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    El marketing digital no deja de reinventarse buscando nuevas formas de llegar al público y de atraerlo hacia las marcas. Muchas veces, la inspiración viene de otros sectores con fórmulas interesantes que, bien aplicadas, pueden traer resultados excepcionales a cualquier estrategia.

    Y ese es el caso de la gamificación. Un concepto nacido en el seno de los videojuegos que se ha trasladado a campos como la docencia o incluso la publicidad, trasladando las reglas y conceptos de los juegos a todo tipo de sectores. Eso es lo que ha llevado a la existencia de la gamificación en el marketing digital, una de las mejores herramientas para retener al usuario y potenciar el engagement.

    Beneficios de la Gamificación en el Marketing Digital

    La gamificación cambia por completo la interacción entre marca y público. El uso de mecánicas de juego tan familiares como los niveles, los puntos, los retos y las recompensas permiten a las marcas crear experiencias únicas y que motiven al público. Algo que eleva la participación activa en campañas y que incluso incentiva la creación de contenido por parte del usuario.

    Es algo que se puede aplicar a cualquier campo del marketing. De hecho, es especialmente interesante en el mail marketing, dado que se puede establecer una comunicación continua y personalizada con el usuario que aporte feedback a la marca, permitiendo así afinar la estrategia de gamificación y mejorarla. Esto, combinado con herramientas gratuitas de mailing como Mailrelay, es algo con un potencial enorme.

    ¿Y qué beneficios se consiguen gamificando el marketing? Para empezar, el aumento del engagement, que es por lo que estamos aquí. La presencia de juegos o desafíos mantiene el interés del usuario durante más tiempo, fomentando su fidelización. De hecho, según un estudio de Gamify publicado en 2022, una campaña gamificada puede aumentar en un 47% la participación del público.

    También es algo especialmente interesante para generar leads. Los concursos y los retos expanden la presencia de la marca y atraen más miradas, más usuarios que, si interactúan y forman parte de estas iniciativas, pasan a ser automáticamente clientes en potencia. Y eso, por no hablar de la viralidad. Si las mecánicas de juego se diseñan bien, fomentarán que los usuarios compartan la campaña por redes sociales y aumentarán exponencialmente su alcance.

    Las estrategias de gamificación más efectivas

    Para poder disfrutar de todas sus ventajas y beneficios es muy importante saber cuáles son las mejores estrategias de gamificación, y aquí vamos a ver las que dan mejores resultados:

    Concursos y Sorteos

    Los concursos y sorteos son una de las formas más comunes y efectivas de implementar la gamificación en marketing. Pueden incluir desde desafíos simples como responder a una pregunta, hasta competencias más complejas que requieren la participación activa durante un largo periodo de tiempo.

    Su gran atractivo es el premio que se ofrece a los participantes, ya que eso es lo que más incentiva la participación, sobre todo si es algo valioso. Esto, combinado con el uso de las redes sociales, puede prácticamente garantizar la viralidad de la campaña, por lo que debe aprovecharse siempre que sea posible.

    Sistemas de Recompensas y Puntos

    Implementar un sistema de puntos y recompensas es muy efectivo a la hora de aumentar la interacción y la lealtad del cliente. Es algo que se puede observar ya en muchas marcas, con programas de fidelización que dan puntos que sirven al cliente para canjear por descuentos o productos.

    Se puede usar en cualquier plataforma, sea una web o una app, manteniendo así el engagement de los usuarios e incluso sirviendo para conseguir feedback interesante a la hora de ver preferencias del público.

    Desafíos y Retos

    Los desafíos y retos son una muy buena forma de mantener el compromiso del usuario a largo plazo. No hay nada como la sensación de superación, aunque hay que tener cuidado a la hora de trazar la estrategia para que el usuario no se frustre por toparse con retos excesivamente exigentes, o se aburra porque sean demasiado fáciles.

    Si se encuentra el equilibrio adecuado y se fomenta la competitividad con rankings o tablas de puntuación, el engagement se dispara. Es algo más que demostrado.

    Existen muchas otras maneras de aplicar la gamificación al marketing digital, de hecho, seguro que hay miles de formas de adaptar las ideas de los videojuegos al marketing. Solo hay que hacer acopio de imaginación y observar las estrategias actuales para dar con la fórmula adecuada.

    Los beneficios de este método son muy atractivos para las marcas. Por eso cada vez es más habitual ver estrategias gamificadas. Ahora, que las empresas pelean más que nunca no por las compras, sino por el tiempo de los usuarios, conseguir el mayor engagement posible y potenciar la fidelización son el objetivo principal de todos. Y la buena gamificación ha demostrado ser la clave para conseguirlo.