Kamila M.
“Tengo 22 años, soy hija única, fui puntaje nacional para ingresar a Medicina en la U. Católica. Cuando supe que estaba embarazada las ideas cruzaban por mi cabeza a mil por hora, voy a tener que congelar, mis papás me van a echar de la casa, no voy a poder seguir estudiando, me fregué la vida. Durante un tiempo todo lo veía negro: mi papá me echó de la casa por un par de horas y aunque después se arrepintió, nada volvió a ser lo mismo. Mi mamá me hacía la ley del hielo y mi pololo me empezó a maltratar física y psicológicamente”, es el testimonio de Camila Bunel, quien vivió un complejo embarazo hace algunos años y fue acogida y acompañada por la Fundación Chile Unido.
“Yo lloraba todo el día, no veía ninguna solución posible, incluso pensé en acabar con mi propia vida, hasta que contacté a la fundación, de inmediato se preocuparon por mí. Me ayudaron a ver los problemas que rodeaban mi embarazo y me dieron herramientas para hacerles frente. Me contactaron con una psicóloga y me fui empoderando de que tomar la opción de quedarme con mi hija y luchar por ella era lo mejor también para mí. Así superé las adversidades e incluso pude mantener mis excelentes notas”, contó.
Después de esa experiencia nació su hija Matilde, “supe que todo había valido la pena y que por suerte estuvo la Fundación en mi camino para no haber tomado una decisión de la cual después me hubiese arrepentido, quizás para toda la vida”.
El testimonio de la joven grafica la relevancia del trabajo que desde hace dos décadas ha realizado en nuestro país la Fundación Chile Unido, La directora ejecutiva, Verónica Hoffman, detalla, “se constituyó con el propósito a contribuir a un país más humano. Lo hacemos a través de distintas iniciativas. Respetamos y cuidamos la vida, fortalecemos la familia como núcleo fundamental de la sociedad y también tenemos todo un trabajo con las organizaciones públicas y privadas”.
Dentro de sus programas se encuentra “Comunícate”, el cual en palabras de Hoffman, “brinda apoyo psicológico a través del teléfono 800 226 226 por cualquier problema a nivel personal o familiar que pueda estar atravesando la persona”.
Defensa de la vida
Uno de los programas que desarrollan es el de acompañamiento a mujeres con embarazos vulnerables. “La Fundación Chile Unido desde hace 20 años está al lado de esa mujer que por distintas razones su embarazo se le volvió en conflicto, no deseado, imprevisto y está viviendo una vulnerabilidad”, declara.
¿Cómo se genera la ayuda?, la mujer se puede contactar a través del número 800 572 800 para ser orientada por la fundación. También está disponible el sitio web http://www.embarazonodeseado.cl/
En palabras de Hoffman, la mujer que necesita ayuda, “está sola y necesitada de apoyo. Está angustiada, presionada, desesperanzada y no ve ninguna opción, una salida a su embarazo”.
Al tomar contacto con la línea 800 572 800 las mujeres podrán dialogar con una voluntaria acompañante que, “va a contenerlas y le bajarán el nivel de angustia inicial que ellas tienen. Hay que escucharlas y conectarse con esa soledad y falta de apoyo”.
El acompañamiento integral es personalizado, gratuito y continuo en el tiempo. “Se acompaña desde que nos llama y toma contacto por primera vez, hasta que su hijo o hija tenga una año de vida”. Al finalizar el ciclo se les informa tanto de los programas comunales, como de los nacionales, que se otorgan para que ella pueda reinsertarse a su ámbito laboral o al mundo educacional.
Hoffman destaca además que, “nada de esto sería posible si nosotros no hubiéramos levantado una red de apoyo multidisciplinaria, colaborativa, que va saliendo al camino de la mujer para resolver la vulnerabilidad que le hace pensar que su embarazo se volvió en conflicto”.
Dentro de dicha red se encuentran: médicos, ecógrafos, casas de acogida, instituciones de adopción, psicólogos, psiquiatras, servicios públicos, consultorios. Además cuentan con programas de cuidados paliativos y de acompañamiento post aborto. “Toda esa es una red de apoyo multidisciplinaria colaborativa que se suma al camino de la mujer que la Fundación Chile Unido está acompañando. Por eso no tiene costo alguno, cada uno de ellos los hace en forma colaborativa”.
Las cifras del trabajo de Chile Unido
Hoffman señala que durante la trayectoria han podido comprobar que, “cuando se acoge, cuando se contiene, se informa y se acompaña a una mujer en ese momento crucial de su historia de vida”, los resultados son positivos.
Las cifras que manejan señalan que cerca del 80% ha decido continuar con su embarazo, lo cual se ha traducido en que, “más de 5.550 niños hayan nacido, los que quizás no lo hubieran hecho y hoy son parte de nuestra sociedad”.
De acuerdo a la directora ejecutiva, el compromiso de la fundación con el país radica en, “seguir tutelando el vínculo entre la madre y el hijo, apoyando muy de cerca a las madres especialmente a aquellas que viven una situación de vulnerabilidad, y siendo la voz de los niños que están por nacer”.
Este 2019 el desafío es acoger a mil mujeres.
Apoyando a mujeres migrantes
Un aspecto importante es que el apoyo de Chile Unido no está supeditado a raza, edad, condición económica, ni menos país de origen. “Estamos acogiendo y acompañando a las madres migrantes. Como fundación desde el año 2016 estamos llevando registro de qué porcentaje del total que nosotros acompañamos en el año corresponde a ellas”.
De acuerdo a datos de la fundación, el año 2016 el 13% del total de mujeres que fueron acompañadas correspondió a madres migrantes, el 2017 fue un 18%, mientras que el 2018 el 34% del total de 791 mujeres fueron originarias de países como Perú, Venezuela, Bolivia, Colombia, Haití y Ecuador.
“Ellas han cruzado el país para tener un mejor pasar, por lo tanto, muchas de ellas están viviendo una situación de calle en el momento en que se informan que están embarazadas. Están sin redes de apoyo, con mucha soledad y mucha adversidad. En ese momento es muy necesaria una ayuda que las pueda acoger, escuchar, acompañar e informar sobre las redes de apoyo que podrían obtener a través del servicio público”, declara.
Difundiendo la labor
A raíz de ese compromiso con la sociedad chilena, es que por estos días la fundación se encuentra recorriendo diversas regiones como Valdivia, Temuco, Copiapó, Vallenar, La Serena, además de Ovalle, para visibilizar la labor que realizar y acercar a la población de forma más directa la ayuda del programa de acompañamiento que llevan adelante.
El desafío que mantienen es que, “todo Chile conozca nuestro apoyo y el número 800 572 800 para que nos contacten y desde ese momento esa mujer no esté más sola”.
“Nuestro llamado es a fortalecer los programas de acompañamiento para que ninguna mujer el día de mañana camine por nuestro país y nos exprese que si ella hubiese sabido que había alguien que la podría haber ayudado, que la podría haber apoyado, quizás hoy estaría junto a su hijo o hija”, agrega Hoffman.
La directora ejecutiva envía un mensaje a aquellas mujeres de la provincia de Limarí que pueden estar atravesando una situación difícil referente a un embarazo vulnerable y que se encuentran solas y desorientadas. “Queremos acogerlas, queremos estar al lado de ellas, informarlas y acompañarlas en el proceso que están viviendo. Sabemos que lo está viviendo en soledad, sin redes de apoyo, con adversidad a la cual tiene que enfrentar. Si desde ese momento nos llama, no estará más sola”.