Con los ojos vidriosos y muchas con una voz resquebrajada, Hugo Andrade trataba de construir frases, pero su emoción al ver que su hijo Matías Andrade salía en libertad a la espera de la sentencia que se dictará el próximo lunes.
Después de más de un año, por fin respiraba con algo más de tranquilidad, luego de ver cómo su hijo permanecía en prisión preventiva a la espera del juicio por los hechos ocurridos el 17 de diciembre del 2019, cuando en el contexto de una protesta ciudadana que buscaba impedir el alza del valor del peaje, terminaría con casetas incendiadas y su hijo entregándose a la justicia, asumiendo sus actos que este martes el tribunal finalizó por condenarlo por delitos de desórdenes públicos e incendio frustrado.
Pasadas las 14.00 horas cambió la medida cautelar, de mantenerse en el Centro de Detención Preventiva ahora esperará en casa la lectura de sentencia, que puede determinar una pena que van desde los 61 días a los 3 años de cárcel en su grado máximo, pero de acuerdo a la defensa es probable que Matías pueda quedar en el mejor de los casos firmando quincenal o mensualmente al ya acumular un largo tiempo en prisión.
Y fue ese tiempo el que más agobió a su padre, visiblemente emocionado.
“Se está haciendo justicia con mi hijo. A él lo estaban acusando de incendio, se mostraban imágenes de casetas incendiándose, pero él no lo cometió. Por ese incendio mi hijo sufrió las penas del infierno. Con el resultado de las pruebas y peritajes, la caseta nunca se quemó, sino que mantuvo daños, por eso el tribunal está haciendo justicia y anteriormente le cambiaban la medida cautelar, porque ellos sabían”, manifestó.
A pesar de los momentos vividos, angustias, pérdidas económicas para poder costear los costos del juicio y reparar en parte el daño causado a la caseta de la plaza de peajes, Hugo se mantiene contento por el resultado del juicio, sin esconder los momentos duros durante el tiempo que su hijo se mantuvo en prisión preventiva.
“El sufrimiento igual lo tenemos, porque ha sido un calvario tanto para nosotros como para él. Cinco veces le dieron la medida cautelar y cinco veces se entregó voluntariamente, tiene buena conducta anterior. No digo que no sea juzgado, pero que sí lo sea con algo justo, no como lo estaba haciendo, de incendio, de impedir el libre tránsito. Matías tenía que ser un robot para poner todos los vehículos que estaban allí. El tribunal se dio cuenta y aquí estamos en libertad”.
Afirma que este hecho quedará presente en la memoria de su familia por el futuro, sobre todo para su hijo, tras permanecer en prisión. Cuenta que buscarán ayuda profesional mediante un psicólogo para sobrellevar los últimos episodios vividos, mientras aprovecharán estos días para recomponerse de las múltiples emociones experimentadas, desde la espera por el juicio, hasta las distintas instancias en el tribunal que concluirán este lunes a las 16.00 horas con la lectura de la sentencia.
APELACIÓN DE LOS QUERELLANTES
Aún se desconoce si los abogados querellantes recurrirán a la nulidad del resultado del juicio o recurrirán a otras instancias. Lo cierto es que el padre de Matías esperará este tiempo con calma y consciente de la decisión del tribunal.
“Ahora a esperar la sentencia con calma y lo mejor es que estoy contento, porque siempre luchamos por la causa que a él lo estaban juzgando y ellos no tenían los argumentos para juzgarlos por esos delitos”, cerró.