Un obrero punitaquino de 42 años de edad, fue sentenciado por el Juzgado de Garantía de Ovalle, tras ser detenido por una orden pendiente por amenazas de muerte a un guardia de un reconocido supermercado de Ovalle, acción que llevó a que el juez de garantía, además le recordara que sobre él existían otras dos causas que lo llevaron a terminar con 102 días de reclusión en el Centro de Detención Preventiva.
La historia comienza cuando el 3 de agosto de este año el imputado fue sentenciado por un altercado que presentó con un guardia particular de un centro comercial de calle Benavente a quien amenazó de muerte. Desde entonces se encontraba en rebeldía al no comparecer a una audiencia programada, por lo que se emanó una orden de detención resultando ser localizado por lo que paso a control la mañana del lunes.
En la audiencia que fue presidida por el juez presidente Luis Muñoz, el sujeto reconoció su responsabilidad por los hechos acusados y fue condenado a 61 días de reclusión efectiva por el delito de amenazas con el agravante de reincidencia. Pero antes de terminar su proceso, el enjuiciador le recordó que desde el 2013 tenía una audiencia similar a la que tampoco acudió por incumplimiento de una pena de 41 días de reclusión nocturna, la cual fue reconvertida y que debió iniciar a cumplir inmediatamente de forma efectiva.
Pero todo continuó y el magistrado le recordó que tampoco había cumplido una resolución del Tribunal de cumplir 3 días de servicio comunitario en sustitución de una multa aplicada de 1 UTM, la cual fue revocada por 3 días d prisión efectiva que fue añadida a sus dos condenas anteriores.
Por lo que el imputado, fue sentenciado a cumplir un total de 3 meses y medio de pena efectiva, a casusa de sus olvidos voluntarios y que el juez de garantía no perdonó. o1302.