Un segundo robo, en menos de un año, sufrió la superbodega ACuenta, ubicada en calle Maestranza. Utilizando el mismo método que la vez anterior, desconocidos llegaron al recinto provistos de armas de fuego y tras inmovilizar al personal accedieron a la recaudación del fin de semana.
La situación se registró durante la noche del domingo, cerca de las 23:00 horas.
Según fuentes policiales, fueron tres los sujetos que a rostro cubierto perpetraron en el local comercial para cometer el atraco.
Los delincuentes aprovecharon que el establecimiento sólo había una funcionaria administrativa y un guardia para sustraer cerca de 24 millones de pesos.
El mayor de la Tercera Comisaría, Ricardo Chau, expresó que “los sujetos ingresaron por el sector estacionamiento, donde el portón estaba abierto, y procedieron a intimidar a una persona que se encontraba en una oficina, al parecer era una encargada administrativa, y luego hicieron lo mismo con un guardia”.
Amenazándolos con revólveres, los tres encapuchamos maniataron a los dos empleados de la tienda para irrumpir sin resistencia a la caja de remuneraciones. Finalmente huyeron en dirección desconocida con el dinero en efectivo.
Pasaron 41 minutos y recién los trabajadores lograron denunciar lo ocurrido a Carabineros, quienes pese a concurrir al sector, no lograron dar con los delincuentes.
“Nosotros recibimos la denuncia 41 minutos después de ocurrido el hecho, por lo que nos impidió encontrar a los responsables”, dijo Chau.
LA INVESTIGACIÓN
La fiscalía de Ovalle dispuso a Carabineros indagar en lo sucedido. El mayor Chau explicó que “estamos indagando en saber por qué el portón estaba abierto a esa hora, lo que claramente permitió la vulneración de los sistemas de seguridad del local comercial. Ahora estamos esperando contar con algún tipo de registro que exista en el supermercado para poder establecer las identidades de los ladrones.
SE REPITE EL ROBO
A inicios de septiembre del 2015, el mismo recinto sufrió un robo de $14 millones de pesos. En esa oportunidad tres encapuchados encañonaron a dos funcionarios, los inmovilizaron y sustrajeron el dinero de la caja fuerte.
En aquella oportunidad el teniente Héctor Haase señaló que “quienes estaban en el lugar escucharon ruidos en el exterior pero no le prestaron mucha atención. Posteriormente cuando se encontraban fumando fueron abordados por tres encapuchados provistos con armas de fuego, quienes los amarraron. A la mujer la sentaron en una silla, la maniataron y le cubrieron la cabeza, mientras que al guardia lo amarraron y lo lanzaron al suelo”.