Por: Pía López Eccher
– ¿Cómo evalúa el rol que ha jugado la oposición?
“Creo que es muy importante que la oposición se ordene, se articule. Todos los sistemas democráticos necesitan una buena oposición. En el Gobierno del Presidente (Sebastián) Piñera ese fue nuestro rol: tratamos de hacer una buena oposición, generando acuerdos en leyes como la del post natal. Lamentablemente hoy tenemos una oposición muy dispersa en materia de reformas. Al Gobierno le faltan interlocutores dentro de la oposición. A diferencia de lo que ocurría antes, porque el ministro Insulza, en el Gobierno de Lagos sabía que para adoptar acuerdos tenía un interlocutor que era Pablo Longueira. Hoy en la oposición no existe un Pablo Longueira con quien uno pueda entenderse. Eso hace que tengamos que conversar con los parlamentarios uno por uno en vez de llegar a acuerdos colectivos, que siempre son muy importantes”.
– Usted declaró que la UDI y RN están usando el Tribunal Constitucional como una especie de tercera instancia legislativa. ¿La actitud de la derecha retrasa las decisiones políticas que el país requiere tomar?
“Tuvimos un exitoso cierre del año legislativo, aprobando proyectos muy importantes que permitieron, por ejemplo, terminar con el sistema electoral binominal tras 25 años. También aprobamos el proyecto de inclusión en materia de educación, uno de los pilares de la Reforma Educacional; el acuerdo de uniones civiles; la institucionalidad de la educación parvularia, y lo hicimos porque fue un compromiso que asumimos con la ciudadanía. Hubo una mayoría que en las elecciones, tanto a nivel presidencial como parlamentario, que se pronunció a favor de estas reformas y nosotros cumplimos con el compromiso.
Los representantes de los ciudadanos, nosotros, después de un largo trabajo legislativo, aprobamos esas reformas y los que pierden no sólo se salen de la sala. La UDI se salió de la sala cuando votamos la reforma educacional. Dejaron a sus electores sin representación. En las actas del Congreso va a quedar como que hubo artículos de la reforma educacional que nadie se opuso porque ellos se retiraron de la sala. Como niño taimado que va perdiendo un partido y se lleva la pelota para la casa. Acá los proyectos se discuten, se trata de consensuarlos como ocurrió con la reforma tributaria y si no se logra consenso tienen que votarse y las mayorías poder ejercerse.
Pero no puede pasar que cada vez que se pierde un proyecto de ley, en una elección democrática como pasó con el binominal y el de inclusión en materia educacional, que el que pierde recurre al Tribunal Constitucional, porque eso lo transforma en una suerte de tercera instancia legislativa. Creo que por un principio de responsabilidad no se debe hacer”.
– ¿Por qué cree que los dirigentes provinciales del agro sienten disconformidad sobre el plan estratégico que ha encabezado la Intendencia?
“Este plan se hizo con más de 100 medidas para enfrentar la sequía en el corto, mediano y largo plazo. Pedí que este plan se nos presentara a los parlamentarios, para que también pudiéramos realizar nuestros aportes y eso se hizo, en las últimas semanas. Ojalá se hubiera hecho antes, pero no se hizo.
La semana pasada, en la Comisión de Recursos Hídricos, le pedí a la intendenta establecer una instancia a través de la cual el Consejo Regional Campesino, las comunidades agrícolas, los crianceros, los comités de APR, los regantes y la SAN, puedan tener una instancia formal para aprobar u observar este documento. Se han realizado muchas reuniones y este plan se ha elaborado tomando en consideración aquello. Pero debe haber una instancia formal, así como la que se hizo con los parlamentarios para cuantificar las inversiones que se requieren.
Acá tienen que ampliarse las facultades que contempla el decreto de declaración de zona de catástrofe, porque la verdad es que los alcaldes se siguen quejando que deben llamar a la licitación para contratar camiones aljibe. Hay que agilizar la gestión de la sequía, hay que desburocratizar”.
– A su juicio, ¿es necesario un cambio de gabinete a nivel regional?
“Esa es una decisión que recae siempre en la Presidenta. Yo, en general, hago una buena evaluación de lo que ha sido el trabajo de los gobernadores y jefes de servicio”.
– ¿Qué opinión le merece la conducción política de la intendenta?
“Ya lo he dicho antes. Creo que la Intendenta se dio cuenta tarde que tenía que trabajar con todas las autoridades de la región y eso incluye a los parlamentarios. A la intendenta le faltó capitalizar el éxito electoral que tuvimos en la región en la elección parlamentaria, donde tuvimos siete parlamentarios de ocho. La Intendenta se dio cuenta tarde que tenía que trabajar en conjunto con nosotros, porque los parlamentarios estamos siempre en terreno, recibimos los requerimientos de la gente y tenemos la posibilidad de llevar esos temas al nivel central.
Faltó diálogo y tuvimos que pedirlo públicamente. Recién tuvimos una reunión con la Intendenta y todos los parlamentarios de la región después de siete meses. Yo no tengo ningún problema personal con ella, pero creo que hubo por parte de sus asesores cercanos un error de diseño, no sé con qué intenciones, de prescindir de los parlamentarios y eso fue un error.
Un intendente es el representante del Presidente de la República y tiene que trabajar con todas las autoridades, más si son de su propia coalición. Yo le decía al ministro del Interior que es raro que los parlamentarios seamos convocados todas las semanas a un comité político para ver la agenda legislativa, pero no seamos convocados por la primera autoridad de la región para ver cómo concretamos la aplicación del programa de Gobierno en la región. Eso nunca lo entendí”.