El fatídico accidente de Francisco Rojo conmocionó a sus más cercanos y al mundo del fútbol local, ya que el estudiante de educación física dedicó sus años más gloriosos a defender la camiseta de Deportes Ovalle en el fútbol profesional durante el año 2007.
El entrenador de los verdes de Limarí en ese entonces, Miguel Alegre, observó a una promisoria camada de nóveles futbolistas que estaban esperando su oportunidad para debutar en el primer equipo ovallino. En ese grupo se encontraba Francisco.
Sin embargo, la historia de Francisco con el balón estuvo marcada por su relación con el exentrenador de Deportes Ovalle, Ramón Contreras, y su hijo del mismo nombre.
Con este último se conocieron a los siete años cuando ambos asistieron a entrenar a la Academia de fútbol de Kico Rojas en las canchas del Complejo ANFA.
“De hecho, cuando llegue en mi primer día, vi a Francisco y era el primero que conocí. Estaba sentado con una polera celeste. Nos saludamos y desde ahí nos hicimos amigos y compartimos juntos casi toda la vida”, recordó Ramón Contreras hijo.
Francisco y Ramón formaron una larga amistad en la cual primaron los colores ovallinos. La amistad continuó incluso cuando ambos debutaron en el primer equipo de Deportes Ovalle, donde se desempeñó como delantero.
Ramón Contreras padre lo recuerda como un jugador hábil, veloz y con instinto goleador. Fue su primer técnico en la Academia Kico Rojas y la amistad con su hijo permitió conocerlo en profundidad, hasta quererlo como uno más de su familia.
“Estoy destrozado. No puedo comprender cómo murió un hombre trabajador. Anduvimos en Argentina y Brasil. Fuimos campeones en Curicó siendo él (Francisco) como artífice del campeonato. Fue muy importante en mi vida y en mi carrera. Fuimos a jugar a Graneros para un 18 de septiembre y él era muy trabajador. Fue el primer jugador mío que debutó en el fútbol profesional”, comentó Contreras tras la desafortunada noticia.
Rojo solo permaneció durante ese año en el equipo estelar, cuando por razones personales decidió dejar el fútbol competitivo. Sin embargo, los clubes amateur de Deportivo Limarí y Porvenir disfrutaron de sus cualidades técnicas hasta el momento de su deceso.