Colaciones, útiles y materiales de los estudiantes han sido robados desde el Colegio Especial Yungay durante las últimas dos semanas. Los delitos afectan fuertemente a los escolares, quienes ocupan a diario estos implementos para su desarrollo mental.
Primero fueron los artículos de estudio, luego vinieron los alimentos y materiales de construcción, y finalmente también fue robado un televisor led de 42 pulgadas.
Incluso, durante la mañana de ayer el personal de aseo del establecimiento educacional sorprendió a un desconocido intentando llevarse desde el lugar nuevos materiales educativos. El ladrón intentó huir con las especies, pero tras ser perseguido por el auxiliar optó por dejarlos en el recinto y fugarse.
Por estas razones el personal docente del colegio municipal de educación especial de niños con necesidades educativas metales se ha mostrado inquieto, al ver cómo los delincuentes están convirtiendo a la escuela en el blanco el robo.
El Ovallino acudió hasta la calle Yungay, donde se ubica este recinto, logrando conversar con la directora (S), Susana Guerrero, quien dio cuenta del temor que reina al interior del establecimiento que acoge a 82 niños y jóvenes.
“La semana pasada, durante la mañana del miércoles encontramos dos salas completamente desordenadas sin los útiles escolares nuevos. Ahí nos fijamos que la escuela había sufrido el robo de los materiales que son ocupados por los niños.
Lo perdido son materiales de trabajo y material didáctico. Incluso dejaron algunas especies botadas, como que se dieron el tiempo para elegir lo mejor y se lo llevaron”, comentó la docente.
El robo fue avaluado en cerca de $70 mil.
Mientras que el viernes 13 de marzo “nos percatamos que faltaba un televisor led de 42 pulgadas, avaluado en unos $250 mil. El led es muy importante para nosotros ya que en él proyectamos el material audiovisual para nuestros alumnos más pequeños, para quienes es imprescindible este televisor para ver videos como parte de su formación y educación”, comentó Guerrero.
Este jueves por suerte se frustró otro robo. “Habían ingresado a robar otros útiles, pero ahora durante la mañana. Cerca de las 07:30 horas la persona encargada del aseo ingresó al establecimiento y vio a un joven arrancando con las cosas, al seguirlo las dejó y huyó”, explicó la directora.
Carencias en medidas de seguridad
El recinto educacional inserto dentro de la población Fray Jorge carece de medidas de seguridad, especialmente en los cierres perimetrales del lugar. Tras un recorrido por sus dependencias fue fácil percatarse que los muros y panderetas no superan los dos metros de altura, convirtiéndolas en un acceso fácil para los malhechores.
El colegio colinda con un centro de madres que no está habitado y con un jardín infantil que se está construyendo.
Según la encargada subrogante de la escuela “sospechamos que es por el jardín infantil que están levantando el lugar por donde estos tipos están ingresando. Lamentablemente no contamos con muchas medidas de seguridad”.
En el colegio especial trabaja un auxiliar que las oficia como cuidador, pero solo de día, lo que entrega otra oportunidad para que los delincuentes ingresen al lugar durante las noches.
Es por esta razón que los profesores y docentes están gestionando con la municipalidad un proyecto que les permita mejorar la seguridad. “Estamos en gestiones para poder ver qué medidas se pueden tomar medidas. Ojalá el municipio nos ayude a mejorar estos cierres perimetrales”, dijo Guerrero.
Además de aquello, el centro de padres y apoderados se encuentra planificando actividades para recaudar fondos. Por ejemplo, se está preparando un cuadrangular de fútbol con la ayuda de Jorge Amaya.
La investigación
El caso de los robos en la escuela está en manos de la Policía de Investigaciones (PDI) de Ovalle, quien intenta dar con los responsables.
El comisario Raúl Muñoz, manifestó que “el procedimiento, de acuerdo a las facultades legales que tenemos, se practicaron todas las diligencias durante las primeras 24 horas a objeto de poder trabajar el sitio del suceso y obtener las evidencias.
Se recogieron algunas muestras pero no logramos identificar a los autores, sin embargo se informó a la fiscalía y estamos a la espera de una orden que pueda facultar la investigación”.
El detective agregó que “producto de ello, y sumado a otros antecedentes del año pasado relacionados con otros robos en la población Fray Jorge, se tomó contacto con la junta de vecinos del sector y se acordó que ellos nos facilitarían el máximo de información, con el objetivo de hacer llegar todas las denuncias que a veces quedan como parte de la cifra negra”.