A eso de las 10 de la mañana de este jueves un perro fue atropellado por un microbús en el barrio industrial de Ovalle, en cercanías de la planta de revisión técnica. Como consecuencia el animal resultó con varias fracturas, además de graves abrasiones que lo despojaron del 80% de su piel. Minutos más tarde debió ser asistido con eutanasia.
Al enterarse de lo ocurrido, la Fundación Cachupines sin Hogar difundió a través de su red social, la cruda imagen y parte de los antecedentes que recogieron, enfatizando en lo negligente de la conducta del chofer, el cual simplemente optó por continuar su marcha y no prestar primeros auxilios.
“El pequeño presentaba múltiples fracturas y desgarrado el 80% de su piel, más shock hipovolémico lo que llevo a que se le aplicara eutanasia y se firmara su autorización por quien pidió ayuda. Esto es atroz ante los ojos de muchos y no queremos continuar viendo estas imágenes. Con los antecedentes del caso se concurrió a la PDI y se procedió a estampar la denuncia rindiendo declaraciones, a lo cual el fiscal lo acogió y entra dentro de la Ley Cholito”, escribieron.
Kelsa Torres, integrante de la agrupación ovallina, relató, “nos comentaron que había sido una micro, que iba a alta velocidad, y que ni siquiera se detuvo a prestarle ayuda y eso también es maltrato porque el perrito estuvo sufriendo, si no es por un veterinario que pidió ayuda nadie hace nada”.
De acuerdo a antecedentes de la animalista, el perro atropellado era uno comunitario del sector y solía circular por la planta de revisión técnica que ahí se emplaza.
El médico veterinario encargado de la Oficina de Higiene Ambiental de la Municipalidad de Ovalle, Pedro Muñoz, fue quien dio a conocer el hecho ante la PDI.
Tras recibir un llamado que alertaba sobre el atropello, Muñoz se dirigió hasta el sitio para asistir al animal. “No imaginaba que era tan dantesco el cuadro, estaba a muy mal traer, se veía el 80% de su cuerpo sin piel. Lo examiné y estaba con un shock hipovolémico, sus mucosas estaban blancas y tenía múltiples fracturas”.
Tristemente el profesional verificó que no era posible salvar su vida, “no había nada que hacer, era imposible, sólo tratar de terminar con su sufrimiento. Para hacer la eutanasia se debe firmar un protocolo y ahí una persona lo hizo responsablemente”.
El médico veterinario condenó la actitud indiferente del responsable del atropello, el que incluso fue enfrentado por testigos. “La gente hablaba que al chofer se le advirtió de lo que había pasado y aún así el hombre muy poco empático se marchó, no hizo caso. Eso fue lo que más molestó. A cualquier persona le puede pasar pero el tema es por lo menos tener empatía o ver la forma de poder canalizar una ayuda, sea con el municipio o con alguna veterinaria, pero no dejarlo sin auxilio”.
Con los antecedentes, Muñoz se dirigió a la PDI, “el inspector llamó al fiscal y él determinó que sí estaba catalogado como maltrato. La causa va a seguir sus procedimientos pertinentes”, detalló.
Por su parte Torres expresó, “Ojalá que PDI investigue, que se haga algo contra tanto maltrato porque acá envenenan todos los días y nadie hace ni ve nada. Se supone que la ley (Cholito) es para eso, para proteger a los animales no para que haya cada vez más maltrato”.