La leña es el energético más usado en Chile, según las propias estimaciones del Ministerio de Energía, en donde se estima un consumo anual de 12 millones de metros cúbicos (9 millones de toneladas), lo que equivale a 18 veces el volumen del Estadio Nacional.
En este sentido, hay cifras preocupantes como por ejemplo, el 85% de las emisiones de materia particulada son generadas por el uso de leña húmeda, según estadísticas del Ministerio de Medio Ambiente.
En este contexto, se ha aprobado la Ley 21.499 de Biocombustibles sólidos (BCS), la cual establece la existencia de estándares de calidad obligatorios para los combustibles derivados de la madera que se comercialicen. Los estándares contemplan las características físicas del combustible y el origen de la materia prima.
Durante esta semana, el Ministerio de Energía realizó un encuentro entre dirigentes de los pueblos originarios de la Región de Coquimbo, con la finalidad de dar a conocer esta ley y para la realización de una consulta indígena por esta misma.
No obstante, la instancia no agradó en las comunidades y agrupaciones indígenas de la zona, quienes firmaron una declaración pública para manifestar su disgusto. Cabe señalar que en esto participaron indígenas de las tres provincias, Elqui, Limarí y Choapa, en donde además no solo hay diaguitas (pueblo originario más masivo en la zona), sino también changos, mapuches e incluso aymaras.
La primera y principal molestia es con respecto a la misma consulta, la cual se realizó posterior a la promulgación de la ley, y no antes, como le hubiese gustado a las comunidades indígenas.
“La problemática es la forma en cómo se hizo este procedimiento, porque no se cumplió el estándar del convenio 169 de la OIT, que dice que cuando se tomen medidas administrativas y legislativas en los territorios y en intereses que afecten a los pueblos originarios, se debe hacer la consulta antes, para crear la ley de acuerdo a los intereses de los indígenas. Pero en este caso la ley ya estaba creada, fue discutida y promulgada sin consulta indígena, a nosotros nos llamaron solo para el decreto”, explicó el presidente de la Asociación Indígena de Educadores Diaguita Provincia del Limarí Lasta Anku, Alexis Escobar Muñoz.
Por otro lado, existe molestia en el contenido de la ley, ya que los dirigentes indígenas consideran que “está enfocada en potenciar lo que es la privatización de la madera, fomentar el negocio y el lucro”.
“La ley de lo único que habla es de la calidad de la madera, de potenciar a los productores de madera, de ver lo que es el transporte de la madera, y todo lo que es la regulación para una mercantilización del proceso. No se garantiza el acceso al mismo recurso y a cómo se va mantener el tiempo”, complementó.
En este sentido, el diaguita montepatrino comenta la preocupación por el escaso recurso hídrico, “acá lo que más se vende es leña de parra y leña de palto, y esas plantaciones ocupan mucha agua. A una persona le dan 50 litros de agua por semana, y una parra ocupa 40 litros diarios, y un palto ocupa 80 litros diarios, entonces si van a fomentar ese tipo de combustibles con ese tipo de origen, van a seguir fomentando el desequilibrio ambiental, que justamente afecta a los que viven en el área rural, que en su mayoría somos indígenas o tenemos estilos de vida indígena, que es una herencia cultural”, apuntó.
Para terminar, Alexis Escobar señala que “el llamado que hacemos a todos los pueblos originarios del país es que rechacen esta ley, queremos llevar esta ley al tribunal constitucional, porque hay que hacerle un control de constitucionalidad a una norma que ya fue aprobada y publicada, pero que no cumplió el estándar que exige la ley. Queremos que se derogue la ley y se vuelva a discutir de nuevo”, concluyó.
RESPUESTA DE LA SEREMI
Por su parte, la Seremi de Energía, María Castillo Rojas, valoró esta instancia de participación, así como también aseguró que la ley no alterará el estilo de vida de los pueblos originarios.
“El Ministerio de Energía por primera vez ha convocado a los pueblos indígenas de la Región de Coquimbo a una consulta para dialogar sobre el reglamento de la ley de biocombustibles sólidos, con la finalidad de que lo puedan conocer y dar su opinión, en base a sus conocimientos y experiencias, para elaborar un documento que junto con la ley en vigencia tenga la validación de estas comunidades, ya que le da mayor fuerza y legitimidad, por lo tanto, tenemos siempre presente el proceso de la validación y al cual no renunciaremos. El objetivo de la ley es proteger la salud de las personas, no afectará el uso para autoconsumo ni las prácticas culturales; y es más, incorpora un plan de apoyo a los pequeños productores de leña”, sostuvo la autoridad regional.