En el marco de las celebraciones del Día Internacional del Libro, llegaron hasta la unidad de pediatría personajes icónicos de la literatura infantil como El Principito, Harry Potter, Sombrerero Loco, entre otros protagonistas de los cuentos clásicos que buscan encantar y acercar el mundo de los libros a los pacientes más pequeños que se encuentran en hospitalización.
Esta iniciativa de fomento lector, convierte la convalecencia en una oportunidad fundamental de acercamiento a la lectura, permitiendo promover la imaginación y la creatividad. Sobre este punto, la educadora de párvulos y encargada del “Punto de lectura” del recinto de salud ovallino, Clara Pinto, comentó que “la lectura dentro del hospital es importante y lo reforzamos sobre todo en el servicio de pediatría porque los libros permiten el desarrollo de habilidades lingüísticas, cognitivas y emocionales. Con estas actividades, los libros reencantan a los niños porque cuando uno entra a las salas a ver a los pacientes, todos están con el teléfono.”
Además, agregó que “a veces en las casas no tienen acceso a libros y los teléfonos van ganando espacio, entonces los libros tienen que reposicionarse. Está demostrado que quienes tienen contacto con los libros tienden a mostrar mejor rendimiento escolar, conocimiento, un buen uso del lenguaje y comprensión lectora.”
LOS LIBROS COMO PARTE INTEGRAL DE LOS CUIDADOS
Desde el año 2011, el Hospital Provincial cuenta con un espacio de lectura gracias a un proyecto Fondart que les permitió incorporar actividades de fomento lector, específicamente en el área de pediatría. Sin embargo, entre la pandemia y el cambio de hospital, esta biblioteca detuvo sus préstamos, ya que las restricciones también traspasaron a los libros y algunos por su materialidad debían ser aislados.
Pero este 2024, el proyecto impulsado por Clara Pinto, nuevamente se encuentra activo reafirmando así su compromiso con la promoción del libro. En este sentido, la mediadora de lectura del recinto de hospitalario destacó que la lectura contribuye al bienestar emocional y mental de los pacientes durante su estadía enfatizando que “el libro los tranquiliza, les muestra historias que los desconecta un poco de lo que pasa aquí, te muestra imágenes nuevas y eso hace que el niño también se distraiga de su situación de hospitalización. También distrae al padre, a la madre o al acompañante.”
El punto de lectura cuenta con una colección que va más allá de los libros infantiles, en las repisas también se encuentran novelas históricas, ciencia ficción, literatura chilena y algunos libros de salud.
Esta iniciativa, se extiende a los funcionarios que pueden acceder al préstamo de libros desde 15 días a un mes, reconociendo así el papel fundamental que juega la lectura en el bienestar físico y mental, causando un impacto positivo en las personas.